AQUA Healing Heart

Capítulo 35

Lentamente todo se iba al carajo y ni Liv, Nora o Erik podían hacer algo para evitarlo. Luego de protagonizar su reencuentro y dejar a todos con una mezcla de sorpresa, decepción y dolor, les fue exigida una explicación. Estaban en el estudio con Charles, quien apenas controlaba su nerviosismo por lo ocurrido. Fuera del estudio aguardaban impacientes los X-Men, Jean contuvo sus deseos de usar su telepatía para averiguar lo que pasaba adentro. Alex y Peter eran de los más afectados por la noticia. Los demás habitantes de la mansion fueron obligados a irse de día de campo por Charles, debían estar lo más lejos posible de la situación.

— ¿Me explican lo que pasa? Lo último que quiero es entrar a sus mentes.

Claramente Liv sintió como Charles hablaba con asco, incluso con odio. Le dolió demasiado su actitud, miró a su padre que parecía estar calmado y a Nora que lucía indiferente. Los cuatro estaban de pie, Erik habló primero.

— Es una larga historia...

— No quiero escucharte — Charles no dejó que su viejo amor emitiera una palabra más y lo mandó a dormir. Lo mismo hizo con Nora.

Liv actuó rápido, transformó sus cuerpos en agua para evitar que cayeran abruptamente al piso y luego los regresó a su forma natural para dejarlos sentados.

— Te entrenó bien — dijo con la voz ronca y dio el último sorbo de whisky.

— No puedo quejarme — cruzó los brazos, había llegado la hora de sincerarse.

— ¿Es tu madre?

— Es una amiga.

Charles llenó su vaso y bebió el líquido ámbar de un solo trago, frotó su cara para afirmar que eso no era un sueño. Esa mañana no despertó esperando ver a Erik de nuevo, recibir la noticia de que había formado una familia y que se había olvidado de él.

— ¿Por qué Liv?

Ella se dio cuenta del dolor en el tono de voz. Años antes siempre se preguntó por qué Erik nunca buscó una pareja y por qué no le gustaba hablar de Charles; incluso durante su estancia, notó el mismo comportamiento en el Profesor, tal vez ahora ella encontraría una respuesta.

Xavier ahora estaba sentado, sus ojos llenos de lágrimas miraban a Liv esperando a que hablara, ella suspiró.

— Para empezar, no es mi padre biológico si es lo que te da curiosidad, pero me cuidó y me ama como si yo llevara su sangre.

De pronto, Charles recordó a Raven, él hizo lo mismo con ella, adoptándola como su hermana.

— La historia es larga, ¿estás seguro que no quieres...? — movió los dedos sobre su sien para invitarlo a entrar a su mente, pero él se negó. — De acuerdo.

Liv exhaló con pesadez y para sorpresa de Charles, llenó un vaso de whisky para dejarlo vació de un solo trago; ella necesitaba un impulso.

— Nunca estuvimos en un lugar por mucho tiempo, hemos pasado por tanto— hiso una pausa para que la voz no delatara su melancolía — Hubo un incidente en Polonia y terminamos en Nueva Orleans. Quise probar que podía cuidarme sola y me metí en problemas. Entonces, papá se molestó conmigo, demasiado, y en lugar de castigarme me mando aquí. Fue su idea la de borrar mis recuerdos para facilitar la situación.

— ¿Qué situaci... ¿Hacer que volviera a caminar? — dedujo y ella asintió cabizbaja. — Pues no lo necesitaba, tomaron una decisión que no les competía.

El rechazo que Liv sentía en lo que acababa de escuchar la obligaba a responder de la misma manera, pero apretó sus puños para contenerse.

— Sé parte de la historia, y sé muy bien que Erik nunca quiso herirte. Él solo quería remediar un poco todo el daño que te ha hecho.

— Y te utilizó para lograrlo — añade Charles haciéndola enfadar.

— Crees que conoces a Erik y no es así. —Para todos Erik Lehnsherr es un monstruo, alguien a quien muchos odian pero para mí es mi padre y la persona más importante en mi vida. — su tono de voz se elevó lo suficiente, que los que esperaban detrás de la puerta escucharon.

Liv se acercó a Charles y este se levantó para quedar de frente, ambos no querían discutir sin embargo sus palabras ya los habían lastimado.

— Eso es porque aún no ha tenido la oportunidad de lastimarte. — el resentimiento hablaba por Charles.

La creciente ira en Liv era notable, sentía que la piel de sus nudillos se desgarraba y la quijada le punzaba de mantenerla apretada. A él llegaban ciertos recuerdos de aquella pelea que tuvo con Erik en el avión años atrás.

— Es suficiente — ella se relajó y suspiró profundo, no quería que todo empeorara — Quizás no es como nos habría gustado que pasara todo esto, pero ya está hecho. Parece que en lugar de hacer algo bueno, terminamos haciendo aún más daño. Habría sido mejor aparecer en mitad de la noche, curarte y luego desaparecer; me habría evitado encariñarme contigo y los demás. Lamento esto, de verdad.

Liv dijo lo último con sinceridad viendo aquellos ojos azules fijamente, luego fue junto a su padre y Nora. Charles tenía la sensación de no poder emitir palabra alguna, algo extraño para alguien que siempre tiene algo que decir. Lo único que hizo fue despertar a los antes mencionados.

Erik miró desconcertado a Liv y luego a Charles, Nora permanecía apacible incluso si su intuición le decía que ahí no eran bienvenidos.

— Quieres que nos vayamos, ¿no es así?

Charles estuvo en silencio, librando una batalla interna sobre olvidar todo lo que hiso Erik o sacarlo de la escuela y decirle que no quería verlo nunca.

— Es lo mejor papá, hay mucho de que hablar pero no ahora — rogó Liv tomándolo del brazo.

— Al menos deja que Nora se quede, ha estudiado mucho y maneja su mutación a la perfección, sería una excelente maestra.

La petición de Erik fue ignorada, con un gesto su amiga le indicó que no importaba, ella encontraría algo en cualquier otro lado.

— ¿No dirás nada? — preguntó Erik, con un poco de esperanza.

— Conoces muy bien la salida — Charles les dio la espalda y continuó bebiendo.

— No esperaba que nos recibieras con los brazos abiertos, únicamente que me dejaras explicarte — él avanzó hacia la puerta, ambas mujeres lo siguieron — Liv tiene razón, necesitamos tiempo. Si quieres hablar, sabrás donde encontrarnos. Espero que nos veamos pronto, Charles.