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Siento el calor alrededor de mis muñecas, la sangre se escurre por mis movimientos bruscos y por el contacto de la correa en mi piel. Siento como todo comienza a dar vueltas y el doctor Blackey me sonríe mientras coloca una aguja en mi cuello. - Buenas noches Rachel- Muevo mis manos intentado poder desatarme pero no puedo y poco a poco las fuerzas de mi manos se van cayendo en una profunda oscuridad.
Estoy en el suelo, sé que estoy dentro de mi mente mientras los doctores del psiquiátrico hacen experimentos con mi cuerpo. Veo que estoy en lo mas profundo de mi mente, donde pasan los recuerdos más ocultos y donde se encuentra esa personalidad, esa parte de mi que quiero olvidar. Me observo con esa sonrisa orgullosa cuando estoy peleando al lado de mi padre Trigon, me veo disfrutar de la sangre de mis enemigos y me veo subiendo al trono cuando termino de conquistar un mundo. Esa es la Raven de hace miles de años, pero la que soy ahora es diferente mis poderes son diferentes y mi corazón me indica que debo de hacer el bien ahora.
Sin embargo no me encontraban en el mejor momento ni en el sitio indicado. Gotham era conocida por la ciudad más terrible de todo el mundo y eso lo descubrí esa noche. Atravesé miles de dimensiones para poder llegar a la Tierra y sin duda tuve que pedir demasiadas indicaciones para poder llegar a Gotham pero cuando vi esa ciudad simplemente quise dar vuelta y huir de toda responsabilidad y de todo para redimirme como persona. Me encontré con demasiada gente que había conocido en vidas pasadas pero ninguna me había reconocido, porque ya era otra persona ya no era Rachel Roth ahora solamente era Raven.
Hubo un robo en uno de los mas grandes bancos de Gotham y mi sentido de aventura se disparó, así que hice lo posible por ayudar en todo entonces lo vi.
Batman
Era mas viejo de lo que recordaba y ahora tenía a un compañero que su traje parecía semáforo, algo que solamente a Batman se le ocurriría. Como dije momento menos indicado, yo había atrapado al ladrón; un tipo que se hacia llamar el acertijo y estaba totalmente loco pero no me sorprendió, era simplemente humano y estaba cegado por la avaricia de tener todo el dinero del mundo, aunque entre él y yo sabíamos que era para su novia quien gobernada una parte oscura de la ciudad. Ella solamente quería mejorar la calidad de vida de esas personas.
Me quede ahí un rato, mientras observaba a ese niño que estaba con él, era verdaderamente curioso y me sorprendió mirándolo a lo que solamente sonreí por lo que había pasado. Camine por los techos por mucho tiempo hasta que el murciélago apareció enfrente de mi.
- ¿Quién eres tu?- Yo volteo a verlo cuando termina la pregunta
- En realidad soy nueva en la ciudad Batman- le digo para persuadir un poco
- No lo repetiré de nuevo- él saca un batarang y se pone en pose de defensa
- No estoy aquí para provocar problemas- le digo y entonces mis poderes se activan rápido y detienen el batarang que acaba de lanzarme, luego el niño semáforo llega detrás de él
