ᴛᴀᴇʜʏᴜɴɢ's ʀᴇᴀᴄᴛɪᴏɴs

#70

Pedido hecho por _Tae-Guk_

—No...— dijo la mujer mayor mientras los veía a ambos sentados uno al lado del otro mientras sostenían sus manos con sus dedos entrelazados. —Me niego a que ustedes dos se casen, no pienso dejar que mi nena se una en matrimonio con un chino, y si los dejo... ¿Luego qué? Me van a salir nietos con los ojos demasiado pequeños y me van a hablar en un idioma que yo no lo voy a entender. No, me niego.

La suegra de Taehyung había explotado cuando su hija con su novio le habían dicho que se casarían. Al principio de la relación de ellos, la mujer había aceptado porque decía que iba a ser un amorío pasajero e iban a terminar después de un año, como máximo. Pero jamás se esperó que, luego de 5 años, su hija llegara al país nuevamente, de la mano con el mismo chico que le había presentado hacia media década diciendo que se iban a casar pronto.

—Vamos a dormir, mañana hablaré con ella. Lo prometo.— dijo Hyeri, sintiéndose mal por como su madre había los había tratado a ambos. Pero se sentía culpable, muy culpable por no haber defendido a su pareja de las dolorosas palabras de su madre, ya que Taehyung había tenido la idea de ir y decirles a sus suegros en persona sobre el próximo casorio.

Taehyung con la mirada caída y su corazón medio roto tomó la mano de su novia y se dejó guiar por el largo pasillo de la casa en donde el amor de su vida había pasado casi toda su vida, y llegaron a la habitación.

El silencio era sepulcral y la tensión podía cortarse con un cuchillo, pero sin embargo nadie dijo nada. Ambos se colocaron el pijama y se acostaron en la cama matrimonial que había en la habitación de Hyeri, ambos pensando en lo que había pasado, dándose la espalda tratando de resolver aquel conflicto de la manera más rápida y facil posible.

[...]

Pequeños quejidos y sollozos hicieron despertar a la madre de la chica quien dormía en la habitación al lado de la de su hija. Se levantó para oír más de cerca lo que sucedía pero lo único que oía era el nombre de su hija salir de los labios de aquel "repugnante" asiático que tenía su pequeña niña de prometido.

De pronto los sonidos se detuvieron y una conversación en el patio de la casa comenzó a sonar.

—Hyeri...— volvió a decir el chico una vez salió al patio trasero para verificar si su novia se encontraba ahí, ya que en la cama no se hallaba. Y allí entre las heladas brisas de la noche estaba su novia bajo uas cobijas admirando el cielo. — ¿Qué haces aquí?— preguntó Taehyung mientras se acercaba al cuerpo de ella y la abrazaba sintiéndola tensa.