Capítulo 2: Nuevo Comienzo.

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—Si vos me haces un favor, yo te hago otro ¿Aceptas Jimin?

—¿Por qué querría un favor tuyo? No es como si necesitara de tu ayuda constantemente, ni tenés algo que yo quiera.

«O sí.»

Habló la consciencia, sabia consciencia...

Observó al chico a su lado, Yoongi esperaba por una respuesta de Jimin mientras masticaba salvajemente un pobre chicle, Jimin sintió lástima por aquél chicle hasta que se percató de su sabor, no era frutilla.

UGH menta. Pensó y bajó su mirada, lo analizó de pies a cabeza. Cabello teñido de gris, desordenado, camiseta negra con cuello en V que dejaba ver su blanca piel y sus marcadas clavículas, jeans negros con cadenas y rotos en las rodillas, piercings, botas negras, un brazo completamente tatuado y...

Jimin tragó saliva al ver la mano de Yoongi, su piel era pálida y sus venas se marcaban notablemente junto con sus huesos, nudillos rojos como si anteriormente hubiera golpeado a alguien.

Miró sus manos, pequeñas, delicadas, parecían suaves como las de un bebé y lo que más le gustaba a Jimin, la uña del dedo meñique pintada de azul.

—¿Y?—pegó un salto en el lugar cuando el mayor se acercó.

Yoongi y Jimin estaban en el mismo año pero Yoongi era dos años mayor que el de cabellos naranjas. Había repetido dos años por problemas que jamás quiso contarle a Jimin, en esos dos años su amistad se había roto y aunque ambos sabían por qué, ninguno lo tenía claro aún.

—Acepto.—Dijo y empezó a hacer el largo trabajo por su cuenta a la rapidez de un relámpago mientras Yoongi sólo dormía de espaldas al profesor fingiendo cada tanto trabajar junto a su compañero.

Jimin empezaba a arrepentirse de haber aceptado pero se decía a sí mismo que debía hacerlo, al ver al mayor y su fachada en lo único que pensaba era en aquella descripción que todos le daban "el chico malo" y entonces el foquito de Jimin se prendió.

Si vos me hacés un favor, yo te hago otro.

Las palabras de Yoongi se repetían en su cabeza, Jimin necesitaba urgentemente ese favor.

¿Y quién mejor que Yoongi para hacerlo?

Terminó el trabajo minutos antes de que el profesor lo pidiera, se levantó para entregarlo y vió cómo el mayor le guiñaba un ojo, sintió escalofríos, asqueroso. Pensó.

Frunció el ceño cuando volvió a su lugar y vió que Jungkook y Taehyung no habían hecho absolutamente nada, charlaban con toda la tranquilidad del mundo mientras Jungkook dibujaba sobre el brazo de Taehyung con una fibra "permanente", era bueno dibujando.

Rodó los ojos, su amigo no era irresponsable pero sabía que el menor de ellos sí y no quería que Taehyung se relacionara con el mismo ya que según él "lo llevaría por mal camino" un pensamiento bastante hipócrita ya que Jimin estaba arriesgando lo que para él era todo recurriendo a Min Yoongi.

—Muy bien muñequito, ahora podés dormir conmigo.

Jimin frunció el ceño y hizo una cara de asco al escuchar al mayor.

—Qué asco, paso, y no me digas así.

—¿Cómo muñequito?

Sintió un golpe de adrenalina recorrer todo su cuerpo y simplemente optó por ignorar a Yoongi.

Pero Yoongi no era alguien a quien le gustara ser ignorado, sólo si él lo ordenaba. Yoongi siempre había sido un mandón, el resto del mundo lo describía con tres palabras que se adaptaban a la perfección. Las llamaban "la regla de la triple M".

𝙩𝙚𝘢𝘤𝘩 𝙢𝘦 ! 𖥻 ݁ . ؛𝘺𝘰𝘰𝘯𝙢𝙞𝙣 𔘓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora