《35》

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Youngjae jugaba con el perro mientras el mayor terminaba de acomodar algunas cosas, habían estado limpiando la casa y el pelinegro ya había terminado su parte.

- Creo que debería cortarme el pelo - comentó al verse en un espejo, lo tenía bastante largo para su gusto.

- A mi me gusta así - Mark terminó de limpiar el último mueble y se tiró en el sillón, ya estaba oscuro casi por completo y las únicas que quedaban en la casa eran sus hermanas - ¿Que quieres comer? Podemos pedir comida.

- No tengo mucha hambre - se quejó - Come tú lo que quieras - se levantó del piso y se sentó a un lado de Mark.

- Tú eres lo unico que quiero comer - apoyo su mano sobre el muslo del contrario, poniendolo notablemente nervioso. Youngjae se le habría tirado encima tiernamente si no hubieran sido interrumpidos por el sonido de tacones bajando las escaleras.

- Ya nos vamos, volvemos mañana - tomaron unas llaves y ni se molestaron en saludar como correspondía, pero a ninguno le importo realmente.

Cuando la puerta se cerro, la pareja se encontró en un silencio, algo incómodo debido a lo repentino que fue, asi que el menor tomo el control del televisor y lo prendió. Mark miro la pantalla dispuesto a prestar atención a lo que sea que el menor pusiera, pero simplemente lo dejó en el canal en el que se encontraba, cuando volteo a verlo, el pequeño estaba con su mano extendida y el control en ella.

- No veo mucho la televisión, pon algo que te guste - movió el aparato como si lo alentara a agarrarlo de una vez -Lo que sea que pongas esta bien para mi - dijo al mismo tiempo que se acomodaba de forma que quedó recostado sobre el hombro del mayor a quien no le molestó en absoluto.

Pasaba los canales sin encontrar algo de su real interés, hasta que encontró una pelicula, ya la había visto, pero nunca se cansaba de verla, y no tardaron en concentrarse en aquello.

- ¡No~! - se quejó, hasta los vecinos lo escucharon gritar y se tapó la boca de inmediato - ¿Como pueden poner comerciales y dejarte con tanta curiosidad? - se cruzo de brazos, para después soltarse y buscar su celular, había hablado con Bambam pero después de la pelicula termino olvidándose, estaba todo emocionado hasta que se percató de algo - Hyung, tus padres no han vuelto - lo miró confundido.

- No vendrán esta noche, al igual que Tammy y Grace - dijo recostándose sobre el hombro del pelinegro.

- Oh - hizo un puchero que hizo sonreir a Mark.

- Jae - lo llamó, obteniendo un pequeño murmuró como respuesta, el menor le daba la mitad de su atención ya que también leía los mensajes de Bambam enojado por haberlo dejado hablando solo en el chat.

El Tuan se sentía nervioso, aunque no sabía realmente por qué. Alzó la cabeza encontrandose con la mejilla del menor, dejandole pequeños besos que hicieron reir a Youngjae, él también movió la cabeza y le dio un pequeño pico mientras terminaba de escribirle a su amigo.

- Jae - volvió a llamarlo, sin una verdadera muestra de atención - Me aburro~ - dijo contra su cuello, hasta que sonrió al momento en que se le ocurrió algo.

- ¡Hyung! - chilló casi riendo cuando sintió los dientes del castaño contra su piel, quiso estremecerse, pero la reciente sensación de la lengua de Mark paseándose por la misma zona donde había mordido se le hizo completamente placentera.

El castaño se acomodó de modo que siguió jugando con el cuello del menor, ahora comenzando a succionar pequeñas partes de piel, dejándole ciertas marcas. A esas alturas, Youngjae se mantenía enfocado solo en el mayor, con los ojos cerrados.

El pelinegro no pudo evitar pensar en aquellos ratos en los que solo follaba como conejo, junto a Jinyoung. Tan solo los besos de Mark se sentían mejor que aquello, pues lo del mayor era con sentimiento, mientras que lo del otro chico, era puro sexo.

Sintió todo su mundo revolverse al sentir la mano de Mark acariciando su muslo, tonteando hacia su pene, por lo que se apartó de inmediato con el rostro serio, el mayor lo miró confundido pero antes de que pudiera decir algo, Youngjae lo empujó de modo que quedo correctamente sentado en el sofá, no demoró en posicionarse sobre el mayor, enredando sus brazos en el cuello de este.

- Es más cómodo sentarse aquí ¿No te parece? - lamió los labios del castaño en una risa haciendo que estos formaran una sonrisa.

La situación se tornaba con mas lujuria cada segundo que pasaba, Youngjae había bajado hasta el cuello del contrario mientras se movía sobre él, Mark jugueteaba con la cintura del menor aprentandola de vez en cuanto.

El Choi comenzó a desabotonar la camisa del castaño mientras repartía besos por toda la reciente desnuda piel, sintiéndose de maravilla al escuchar la respiración de Mark cada vez mas pesada, al mismo tiempo que sentía como se ponía duro debajo de él.

De la nada subió la vista, observando a un Mark totalmente alborotado, el mayor asintió al ver la cara de Youngjae que parecía estar pidiendole algo.

Se levantó de encima y el castaño no tardó en tomar su mano y llevarlo hasta su habitación, donde su acompañante tiró de él hasta que quedó sentado en la cama. Se arrodillo bajo la atenta mirada de Mark y sin pedir permiso ni decir mas, desabrochó sus pantalones dejando la notable erección libre.

El Tuan sintió la calidez de la boca del pelinegro quien, sin vacilar, había metido toda su extensión comenzado a subir y bajar.

Youngjae no quería decirlo en voz alta ni mucho menos aceptarlo, pero a decir verdad había aprendido mas de una cosa de sus encuentros con Jinyoung.

Mark esta sorprendidamente sintiendo a la perfección todo el placer que el menor le brindaba, ese era un Youngjae que nunca había conocido, toda su ternura había desaparecido.

Jadeó mas fuerte que antes cuando sintió que estuvo por venirse, asi que alejó al pelinegro haciéndolo pararse. Lo tomó haciendo que quedara a su altura y sacó su playera sin tardar demaciado, terminó de sacarse el pantalón para luego besar al Choi mientras metía su mano en el pantalón del contrario.

Descubrió algo.

El menor parecía no mostrarlo desde un principio, pero era bastante fácil de calentar.

Los gemidos que el menor ahogaba con los besos del castaño eran música para los oídos de este último. Mordió la lengua contrario y despues se alejó quitando la ropa restante de ambos. Youngjae se acomodó terminando acostado y Mark sobre él, separando sus piernas con cuidado y posicionandose en medio de estas.

- T-Te necesito - gimió pidiendo que se adentrara a él de una vez por todas, estaba mas que necesitado.

Mark calló los jadeos con un par de besos y luego ubicó la punta de su miembro en la entrada de Youngjae, quien se aferró a la espalda del mayor al mismo tiempo que mordía parte de la piel de su cuello, sintiendo cada centímetro que se introducía en él.

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ze la creyeron we xd
ahre

A little problem // MarkjaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora