VOLVERÁS A MI =JONGKEY= [FINALIZADA]

I. INTRODUCCIÓN

[Invierno de 1996, Seúl, Corea del Sur.]

Un pequeño de unos seis años jugaba en el jardín de un parque, el día era frío y el viento seco, la noche anterior había caído una enorme cantidad de nieve, por lo que el manto blanco predominaba... aun así al pequeño no parecía importarle el no abrigarse y jugaba alegremente, intentando hacer un cachorro de nieve.

—Pareces más un zorrito —dijo sonriendo a su pequeña creación.

El pequeño escultor, dedicó varios minutos más a su obra de arte, asegurándose de hacer una larga y respingada nariz, dos orejitas perfectamente triangulares y dos pequeños ojos, los cuales detalló con las semillas que él mismo desenterró.

—Ya casi —dijo al dar la última forma a su colita—, incluso podrías cobrar vida y salir saltando.

Jonghyun quedó completamente satisfecho con su obra, era lo más bonito que había visto en sus cortos seis años de vida, hasta que…

—¡Aaachuuu!

Un estornudo llamó su atención, la nieve en sus manos se deslizó, giró sobre su eje y a un par de pasos se encontró dos pequeños y brillantes ojitos.

"Es como un zorrito."

Pensó el pequeño completamente maravillado, con la imagen ante él…

—¿Tienes frío? —preguntó al niño que lo miraba.

Sin embargo la respuesta a esa pregunta no llegó, ya que de inmediato una mujer se llevó al niño, quien no hizo más que mirarlo, mientras pequeños copos de nieve comenzaban a caer desde el cielo.

Un pequeño y frío copo, compuesto de finos cristales... aterrizó en la nariz del pequeño que quedó atrás, mientras veía al otro ser llevado.

[Verano de 1998, Isla Jeju, Corea del Sur.]

—¡Jonghyun date prisa o perderemos el avión! —expresó la joven dama.

El niño en edad escolar, de unos ocho años, corrió con un cachorro en brazos hasta donde su madre se encontraba.

—¡No puedes traerlo! —La mujer dijo al quitarle el cachorro y entregarlo al chófer que los había llevado al aeropuerto.

—¡El Sr. Han cuidará de él —Comenzó a sacudir las ropas del pequeño, con cierto grado de rudeza—, te has llenado de pelos, ¡Te he dicho que no cargues a ese perro!

Fue así como el pequeño, subió a aquel avión completamente solo, a su corta edad, se enfrentaría a un cambio radical en su vida, era momento de ir a vivir con su padre en Seúl.

A bordo del avión, se encontró sentado en la sección VIP, siendo asistido por una amable sobrecargo, pero completamente solo.

El nerviosismo se hizo presente, la sensación de un revoltijo en su estómago, lo abordó cuando el avión comenzó a moverse, desde luego era normal, para un infante que viajaba de Jeju a Seúl, solo por primera vez.