XXXIII. COMO HERMANAS

124 17 94
                                    

[Verano de 1975, Daegu Corea del Sur]

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

[Verano de 1975, Daegu Corea del Sur]

Era una mañana fría, ni siquiera parecía verano, se sentía más como un invierno desolado cuando al frente de una de las escuelas con mayor prestigio se estacionaba una lujosa limusina, los presentes en las calles miraban extrañados, ya que a pesar de ser una prestigiosa escuela, los alumnos acostumbraban a llegar caminando en la pequeña ciudad de Daegu de aquel entonces.

—¡Srita. Hyori! —El hombre de elegante traje llamó a la niña que se rehusaba a salir de la limusina.

—No estoy segura de esto —dijo la pequeña de unos diez años de edad mientras abrazaba un pequeño conejo de peluche—, ¿Qué tal si mejor volvemos?

—Mi joven señorita debe estudiar aquí por decisión de su padre —dijo el hombre—, y mi señor siempre ha tenido la mejor intuición, si la envió a este lugar... Es porque debe ser el inicio de algo grande.

Fue así como la infante madre de Kibum llegó a Corea por primera vez, todo por iniciativa de su abuelo, quién había decidido que era imperativo que la niña volviera y conociera la cultura y las raíces de su familia.

Así fue como el pequeño conejo de peluche fue abandonado al interior de la limusina y comenzó el ciclo escolar para la pequeña niña, una jovencita con obvios rasgos orientales pero como modales, acento y un aire Americano que desde luego no fue bien recibida entre la comunidad escolar coreana de aquellos años, en que los extranjeros eran mal vistos.

Pasaron cerca de dos años, la jovencita era llevada a su instituto todos los días, su chófer pasaba por ella a la misma hora sin falta y sin atraso.

Durante esos dos años, la pequeña siempre comió apartada del resto de los niños, nunca jugó con nadie, y siempre vió las espaldas de sus compañeros tanto en las clases como en los eventos deportivos y culturales.

Así fue hasta ese día de invierno en que un accidente en una de las avenidas principales no permitió que su chófer llegara a tiempo a buscarla en la salida del colegio.

La pequeña permaneció de pie junto a la entrada principal del colegio durante varias horas, incluso el colegio cerró, todo el personal se fué y ella no se movió, porque aunque quisiera moverse, no sabría a donde ir, nunca había hablado con nadie, nunca había tenido tiempo de moverse, pues su chófer siempre estaba antes que ella saliera, nunca se había enfrentado a la situación de estar a solas en una calle desolada, en una ciudad que repentinamente parecía desierta.

La instrucción de su chófer era que se quedara en el lugar hasta que él llegara, claro que el hombre no sabía que esa tarde comenzaría a nevar, las nubes cubrieron el sol y copo tras copo los pequeños cristales comenzaron a caer, el frío comenzó a sentirse más intenso y su piel se estremeció con las pequeñas corrientes de aire que la rodearon.

—¡Achu! —Un estornudo se hizo presente cuando la tela de su falda se balanceó con la brisa y en un segundo volvió a su lugar.

Un sentimiento de abandono comenzó a invadir a la pequeña, su pequeño corazón comenzó a latir al sentirse asustada, sus ojitos amenazaban con lagrimear hasta que... fue golpeada por una bola de nieve.

VOLVERÁS A MI =JONGKEY= [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora