Algo me golpea en la frente e inmediatamente mi mano va a mi cabeza apretando con fuerza intentando que el dolor disminuya.
-lo siento- una chica delgada corre hacía mi y suelta una carcajada mientra me habla - mi hermano todavía no controla bien el traje nuevo.
Vuelvo a tocarme la frente y noto que un bulto ha crecido.
-por cierto, soy Shuri.
Reconozco este nombre, es la hermana de t'challa, proceden de wakanda y los vengadores hicieron contacto con ellos hace poco.
Acepto su saludo formal estrechandole la mano.
-Alex.
-¿te he echo daño?
Un hombre vestido con un traje negro pegado a su cuerpo llega corriendo a mi lado y mira mi frente donde descansa mi chichón.
-lo siento.
Me toca la frente y me aparta el pelo de la cara. Un segundo, un solo segundo basta para que una sensación electrizante recorra por donde me ha tocado y para que compartamos miradas donde los dos nos perdemos.
Mi madre siempre decía que cuando encuentres a tu pareja destinada sentirás calma y mi cuerpo siente adormecimiento, una sensación de tranquilidad tan grande que la palmada de Shuri me hace dar un salto del susto.
-lo siento- bajo la cabeza para luego levantarla y salir caminando como alma que lleva el diablo.
Camino hasta sentarme en un banco, me cubro la cara con las manos y me avergüenzo inmediatamente de lo que acabo de hacer. Me sonrojo al recordar que por un instante me perdí en sus ojos y que posiblemente solo era yo la que se hipnotizó y se quedó parada, mientras los dos, seguramente, me miraban raro.
Una persona se detiene delante mía tapando los rayos y con la cara todavía sonrojada abro los ojos con mis manos tapandome el resto de la cara. Lo que veo hace que mi corazón de un vuelco y me ponga más roja todavía.
-¿puedo?
T'challa me pregunta señalando al banco y yo solo asiento dejando caer mis brazos en mis piernas.
-te llamas Alex ¿no?
-si, Alex.
Me quedo callada y con miedo de la próxima palabra que alga de su boca y de la mía.
-siento haberte echo daño.
-oh, no te preucupes - me toco la frente- es solo un chichón, se irá.
-¿puedo hacer algo para compensar mi descuido? - me lo pienso y al parecer estoy tanto tiempo callada que el decide hablar - ¿una cita talvez?
Espera, ¿el rey de Wakanda me está pidiendo una cita? Si me dijeran esto unos meses atrás no me lo creería. Apenas destaco y ahora un rey me pide una cita.
-¿y bien?
Me he quedado callada demasiado tiempo otra vez, a este paso se marchará y no me volverá a hablar, porque el único que habla es él.
-si- hablo demasiado alto- digo, me encantaría.
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He vuelto!
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