Carol camino al frente mientras Mike y yo la seguíamos apenas entre la gente. La cancha de basket estaba repleta, quizás demasiado para lo que recordaba de ella. Llegamos a una escalera, la que daba a las gradas con la mejor vista del campo. Sonreí al sdmarme cuenta de que ahí etsban nuestros asientos. Subimos con cuidado y nos sentamos a la derecha, cerca de una canasta y de los bancos donde pronto estarían los jugadores del campamento de la casa.
Mike miraba el lugar con asombro, cosa que no había cambiado media hora atrás, ya que parecía completamente deslumbrado con el campamento. Carla nos había mostrado los alrededores, las nuevas habitaciones, los nuevos espacios y las mejoras de las cabañas antiguas. Yo estaba feliz y asombrada con todo lo que había evolucionado el campamento.
La cancha era una de las áreas mejoradas, años atrás sólo tenía dos gradas y la pintura algo desgastada, peor ahora tenia gradas por todos lados, mas grandes y mejores, y en cuanto a los alrededores el lugar estaba encantador, pintura y estructura perfecta, al parecer alguien se había tomado muy en serio lo de mejorar el lugar.
Pasaron unos minutos y la gente dejó de entrar. La ceremonia de bienvenida comenzó, salió el director del campeonato y presentó a las porristas. Mis ojos brillaron al ver paras a esas chicas vestidas de azul, era un uniforme nuevo y en lo personal em encantaba. Habían tantas caras conocidas, no podía creer como cada una de mis amigas estaban ahí, con la mejor de sus sonrisas, más mayores y maduras.
El show comenzó y celebré con energía todo el acto, la emoción crecía en mi y sentía que en cualquier momento podría quedarme sin voz de tanto gritar. Mike me miraba divertido, notando cuánto estaba disfrutando del espectáculo.
—Entonces... ¿Cres que la de pelo negro este soltera?— dijo pícaro mirando a la chica que recordaba como Rebecca.
—¡Mike!— lo reprendí —No empieces. Ya te dije que no te puedes meter con ninguna de ellas— hable amenazante. Yo amaba a mi amigo/hermano, pero era consiente de lo poco caballero que podía ser cuando solo le interesaba un poco de sexo y una cara bonita.
El chico me miró mal y devolvió la cara al frente. Las chicas terminaron de hacer su rutina y aplaudi con entusiasmo, ese sentimiento que en el pasado me hizo amar ser porrista no había desparecido, más bien había crecido. Verlas tan seguras, haciendo la rutina, las vueltas y los saltos simplemente era hermoso, no podía apartar la mirada completamente atraída hacia lo que hacían.
Un silbato se escuchó y miré en dirección del sonido. Al lado de las bancas de la entrada estaba el entrenador Jones con una sonrisa de satisfacción. Apenas había notado su presencia y la del resto del equipo que estaban de pie mirando hacia las gradas donde yo estaba.
No pude contenerme y observe al chico de la mirada seria, Andy. Mis nervios se alteraon al notar que estaba más guapo de lo que recordaba. Su cabello oscuro estaba más largo y desordenado, estaba mucho más alto y con el cuerpo más trabajado. Su rostro casi perfecto tenía un aire maduro y sereno. ¿Solo tres años habían provocado tanta perfección? Ya lo recordaba como un chico atractivo, pero ahora lo era mucho más.
Miré el resto del equipo y sonreí al reconocer todas las caras. Cada uno estaba mayor y diferente. La pubertad les había afectado bastante bien a mis amigos, los adolescentes de hace unos años atrás eran todos unos hombres. Benditos 18.
Los equipos se saludaron y note que Andy volvía ser el capitán del equipo, antes de perder el contacto con los chicos me había enterado de que Daniel era el nuevo capitán así que ver al castaño al frente fue una sorpresa para mí.
De la nada, el chico se dio la vuelta y volvio a mirar como buscando a alguien. Por unos segundo su mirada se posó en mi, contrayendo mi corazón y provocando cosquillas en mi estómago. Sus ojos azules parecían confundidos pero antes de poder comprender que realmente nos estábamos mirando, el juego comenzó.
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Solo Tú (DESCONTINUADA)
Teen FictionTres años después de verse por última vez y ninguna de sus heridas fueron curadas. Tres años después y sus sentimientos no se atrevieron a desaparecer o cambiar. Él es un chico malo con un corazón tierno. Ella es una chica buena con el interior ro...