Capítulo 34

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Foxy

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Foxy

Ayer no me molesté ni siquiera en ir al baño o a un espacio privado para colocarme un condón para la noche con Chica, realmente esa pizza me hizo sentir más feroz que nunca, como si el pirata salvaje y romántico hubiera despertado desde el fondo de mi mente, puedo decir que Chica sí que es una mujer de verdad y únicamente mía. La noche pareció perfecta, parece ser que Chica descubrió partes de su cuerpo que ni siquiera ella misma conocía que tenía que le harían sentir tanto placer, pero a pesar de las caricias y la multitud de gemidos, fue posible para mí escuchar desde mi cueva a un conejo púrpura gemir desde su cuarto de placer (o dolor), lo cual volvió el resto de la noche incómoda, y no lo digo por haber sido dos animatrónicos varones teniendo intimidad sexual, sino porque no estoy acostumbrado a escuchar a otra pareja tener sexo mientras yo me concentro con mi chica, las técnicas sexuales se vuelven peores.
Chica se levantó temprano como de costumbre para preparar el desayuno y empezar otro día de trabajo, la pizza de ayer fue todo un éxito, tal como yo conocía la receta, aunque debo de admitir que, con tan sólo una rebanada, logré sentir un éxtasis más alto que desde la última vez, tal vez esa sea la razón por la cual escuché tantos gemidos desde la recámara de ese muchacho. Chica no me habló mucho acerca de cómo sintió todo, fue el sexo más callado que haya tenido, pero de cualquier forma estoy seguro que en algún momento se volverá a repetir, así como yo le daré algunos consejos a Bonnie para que no gima tan fuerte la siguiente vez que quiera tener sexo con Freddy, ¿me pregunto cómo será el sexo entre dos varones? Bueno, es algo que en definitiva nunca me pasará a mí. Pude escuchar después a Bonnie gritar el nombre de Chica desde afuera.

   —¡Voy en camino, Bonnie! —gritó Chica mientras se escuchaban sus pasos dirigirse al backstage.

   Era claro que tenía que ir a ver qué le sucedía al muchacho, así que me levanté de mi cama para asomar mi cabeza por las cortinas, viendo que la luz del día indica que ya era hora de comenzar a arreglarse antes de que el restaurante abriera, pero ahora me interesa más saber lo que ocurrió: me coloqué mi pantalón amarillo y salí hacia el cuarto de Bonnie, cuando escuché a Bonnie sollozando dentro del cuarto de Freddy, entonces rápidamente abrí la puerta y entré.

   —¿Pero qué hacemos ahora? —preguntó Chica.

   —¿De qué hablas? —preguntó Bonnie.

   —Freddy es la estrella del espectáculo, ¿cómo actuaremos el día de hoy sin él?

   —¿Puedo saber qué carajos está pasando? —pregunté viendo a Bonnie llorando y a Chica cerca de la cama de Freddy.

   —Freddy no despierta —respondió Bonnie llorando.

   —No sé qué tiene, pero no despierta —dijo Chica.

   —¿Está muerto? —pregunté.

   —¿¡Qué!? —gritó de repente Bonnie.

   —¡No!, relájate, Bonnie, está respirando —dijo Chica.

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