31.

254 26 8
                                    

*Narra Piper*

Michael besaba mi cuello mientras sus manos acariciaban mis caderas.

Después de tres insaciables horas de videojuegos Michael se había hartado de que le ganara en el juego de matar zombies con carritos de super mercado. Así que se me tiró encima y así llegamos aquí.

-Michael..-murmuré.

-Mmm.-respondió desplazando los besos hasta mi hombro.

-¿Hasta cuando estaremos solos?

Michael levantó la cabeza y miró el reloj de su mesa.

-Hasta dentro de una hora más o menos.-me miró e hice un gesto de aprobación.

-Hagamos el amor entonces.-reímos y tiré de sus caderas acercándolo a mi para besarle.

-¿Tienes.. ya sabes.. plastiquitos?-me miró con el ceño fruncido y reí.

-Claro que no, no voy a pagarte el polvo Mike.

-Bueno no sé, tenía que preguntarlo.-se encogió de hombros.

-¿No tienes?

Negó con la cabeza.

-Se me gastaron en el último.-sonrió el muy idiota.

-En el segundo cajón del joyero de tu hermana hay.

-Uy, pero que guarra es mi hermana.-rió y se levantó animado.

-Os viene de familia.

Salió de la habitación y yo me quedé en ropa interior y me tumbé en la cama mirando todo el cuarto.

Apareció muy sonriente por la puerta con un condón en la mano.

-El póster ese de Demi Lovato me intimida.-dije señalando un póster cercano a su escritorio.

-Mi hermana lo ha colgado.-bufó y lo quitó.-¿Me has aligerado el trabajo?-sonrió pícaramente al darse cuenta de que estaba en ropa interior.

-Ven aquí.-reí y lo tiré a la cama sentándome encima suya.

Le arrebaté el condón de la mano y sonreí.

-Allá vamos.-sonrió y nos besamos.

Y bueno, surgió la magia.

*Narra Marta*

-¿Entonces donde preferirías vivir?-miré a Luke que mezclaba la salsa-¿En el desierto, en la selva o en el polo?

-Mmm..-dudó- En el polo.

-¿Por qué? Hace frío.-fruncí el ceño confusa.

-Hay pingüinos.-me miró sonriente

-No he dicho en que polo, puede ser en el polo de los no pingüinos.

-¿No hay pingüinos en los dos polos?-vino a mi lado y dejó el cuenco en la encimera.

Me miraba mientras yo acababa de hervir los espaguetis.

-No.-le miré- Creo que en el de arriba no, o al revés, la verdad es que no tengo ni idea.-reímos.

-Te lo estás inventando.

-Que no.-me quejé.-Que lo he leído en algún lado.

-Si seguro, lo que pasa es que tu discriminas a mis pobres pingus.-rió.

-No son mi animal preferido pero son graciosos, menos el de Happy Feet, odio al de Happy Feet.-señalé a Luke con el tenedor de madera gigante que se usa para que no se peguen los espaguetis.

-Pero si el de Happy Feet es genial.-dijo sin creer lo que yo acababa de decir.-Además Happy Feet debería ser nuestra película, un pingüino que ama bailar. Yo soy un pingüino y tú bailas. Y yo te amo a ti, es nuestra relación.

Me ama. Le miré y sonreí. Me ama.

-Pues entonces nuestra relación está evocada al fracaso porque odio a ese pingüino.

-Muy bonito eh.-rió- Acabo de echarte el piropo de tu vida y así me lo pagas.- echó la salsa en los espaguetis que ya estaban listos.

-Idiota.-reí y abracé su costado.

Pasó sus manos por mi cintura y nos miramos. Los dos sonreíamos como idiotas.

-Te amo Luke.-unió nuestras frentes.-Pero yo me iría a vivir a la selva.

-Eres una salvaje.-rió y me besó.-Podemos comprarnos un apartamento de verano en el polo para pasar las vacaciones cuidando pingüinos.

-Oh sí.-reí sarcástica- No podría haber encontrado plan mejor.-le dí un beso corto- Vamos a comer anda.

-¿A comernos a besos?-tiró de mi que intentaba irme- Me parece bien.

Sonreímos a escasos centímetros y nos besamos. Me volvía loca, cualquiera en su sano juicio se hubiera vuelto loca por él.

Five Seconds Of You { 5SOS Fanfic }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora