Espectro 55: Negro.

2 1 0
                                    


Practique durante una hora delante del espejo, era la primera vez que yo me iba a declarar ante alguien, me plante frente a este firmemente y dije frases sin sentido como "Me gustas", "Me gustan los hombres, ya que!", "No soy homosexual pero me gustas", "Te juro que eres el primer hombre que me gusta", "Esta bien soy medio homosexual, pero acaso no todos lo somos aunque sea de pensamiento....A propósito me gustas", "Hablando de homosexualidad.... Me gustas". Para mí era en si un gran avance pero no era lo que quería expresar, vamos pues! Ni Sid ni nadie era idiota no? Seguro ya se había dado cuenta de que de verdad disfrutaba muchísimo el que me lo hiciera como el pervertido que era. Digo, ninguno de mis gemidos era en vano y últimamente ni me molestaba en reprimirlos. Pero bueno era muy difícil aceptar una realidad que jamás antes me hubiera planteado, como era el que hubiera caído enamorado de un hombre. No lo digo a mal, solo es que nunca jamás me lo hubiera imaginado, jamás paso por mi cabeza.

En fin, mal gaste una hora frente al espejo a lo tonto ya que no llegue a nada, entre mas practicaba mas estupideces decía y menos tomaban sentido mis palabras, ese día me pareció el más largo de mi vida. Nunca tuve que esperar tanto por que el sol se metiera, pero así fue, mi mamá vino a comer y me noto muy inquieto pero solo su mirada me lo dijo, comí muchísimo así que me cayó muy pesada la comida y caí dormido a profundidad en parte también por la tensión que tenía. Soñé que estaba en un lugar muy oscuro, tanto que no podía ver mi propio cuerpo pero de un momento a otro las huellas que Sid había dejado por mi cuerpo cada vez que me tocaba comenzaban a brillar, primero con un brillo opaco y luego un resplandor comenzaba a quemarme, me dolía y mucho, yo sabía que ya había experimentado ese dolor....Si! La primera vez que Sid me había tomado , aquella noche de brujas, cuando llegue a casa había experimentado ese dolor, claro menos potente pero ya lo conocía. Quizás Dios me castigaba de esa forma por disfrutar el placer que un espectro del diablo me brindaba, pero que podía hacer yo ahora si ya era de el? Nada.

El dolor comenzó a ser intolerable, yo me jale los cabellos de desesperación, gritaba de dolor ; hasta que me rendí y me deje caer en aquella oscuridad, mis ojos llenos de lágrimas que salían a raudales se nublaron , era mi fin; entonces sentí un poco de alivio en mi pierna derecha, luego en la izquierda, era como si una ola refrescante fuera subiendo por mi cuerpo, un viento suave soplo por mi rostro y cerré los ojos para disfrutar de esa experiencia que había cesado mi dolor.

-Steph, debes mantenerte razonable, no puedes ceder a perderte en ninguna forma.

-Ah?

Abrí los ojos, sabia de quien era esa voz, era el! Sus lilas estaban brillantes y resplandecientes ,estaba acostado a mi lado pero sus manos estaban acariciando mi entrepierna con suavidad, ocasionando que me pusiera demasiado duro. No estaba listo para decir nada pero tampoco estaba listo para lo que el pretendía, así que me quede mirándole con detenimiento a manera de hacerle saber que lo único que quería en ese momento era que aliviara el dolor de mi entrepierna, así que me gire y me oculte en su pecho.

Este pareció adivinar mis necesidades y se colocó arriba de mí y entre mis piernas, arranco rudamente mi pantalón y separo de una manera ruda , luego comenzó a besar mi vientre, sus besos eran tan deliciosos que causaron más furor en mi sexo, este paso a besar la parte interior de mis muslos y finalizo en mi sexo que era el que requería de toda su atención y la destreza de su lengua. Me tape el rostro, era demasiado placer y no soportaba ser tan débil. Sid era un experto en hacerme explotar , así que no tarde demasiado en correrme , este subió a besarme con tanta intensidad que me dolieron los labios, y sin dejar de hacer masaje con su lengua en mi boca subió mis piernas a sus hombros , yo me aferre a su largo cuello y entrelace mis brazos alrededor de este no quería separarme de él.

Espectro... De Amor L1Where stories live. Discover now