Capitulo 11

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Coloco el bolso en el suelo, en tanto veo el atardecer asomarse

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Coloco el bolso en el suelo, en tanto veo el atardecer asomarse.

— Es hora de hacer la fogata.— Lo llevo a un arbol y lo abro, saco el plato envuelto, con carne adentro. Ya esta cocinada claro

Jules fue muy amable al darnos comida para varios dias.

— Podemos calentar la..— Me giro y me callo, al tener el pecho de Aren muy cerca— carne.

— No tengo hambre.— Murmura, levanto mis ojos hacia el

Eso es raro.

Toma el plato de mis manos y lentamente lo deja en el suelo.

— Tenemos que encender la fogata.— Murmuro. Retrocedo, cuando comienza a avanzar. Pego mis manos al arbol, levanto más mi cabeza

— Me gusta oscuro.— Aprieto mis labios

— Pues, a mi no. Asi que..— Sus manos se van a mi cintura, me eleva y me coloca contra el arbol, casi a su misma altura

No protesto, no hago nada. No golpeo su sien ni pateo su estomago como normalmente haria. Porque a pesar de que no diga nada, me gusta.

— Me di cuenta de algo.— Coloco mis manos en sus brazos, no quito mi mirada de el— Nunca has dicho mi nombre.

Parpadeo, levanto levemente mis cejas.

— ¿Ah no?— Susurro

— No.— Niega con la cabeza— Me gustaría escucharlo.— Murmura de vuelta, bajando su cabeza. Cierro los ojos unos segundos, cuando roza sus labios a mi cuello

— Motivame.— Abro mis ojos, en cuanto la palabra sale de mi. No pretendia decir eso

Demonios, me deje llevar.

Saca lentamente la cabeza de mi cuello y me mira. Sonrie levemente.

— Se te escapo, ¿verdad?— Dice suavemente— No te sonrojes.— Sonrie mas, frunzo el ceño

Sacudo la cabeza y la bajo.

—Ya bajame.— Gruño. Lo miro, cuando rie— ¿De que demonios te ries?

Se coloca serio de repente, sin dejar de mirarme. Lo hace por unos segundos y luego me baja lentamente. Me quedo quieta, lleva sus manos a mis hombros, suspiro cuando empieza a quitar la tela de mi vestido.

Baja sus labios, besa la piel descubierta. Los relajo, mientras sus manos siguen bajando, con intenciones de sacarme el vestido.

Detengo sus manos.

— No.

— Necesito volver a sentir tu piel. — Acaricia mis brazos, lamo mis labios

— Ya dije que no.— Suspira y corre su cabeza, hasta rozar mis labios

Luna guerrera Donde viven las historias. Descúbrelo ahora