Wyatt y Lili se veían bien de negro, mientras esperaban y guardaban silencio y respeto en ese funeral.
En realidad sólo le hacían compañía a su abuela quién había perdido a una de sus amigas y vecinas de hace muchos años.
La abuela Esmeralda estaba sentada al frente con familiares de la persona fallecida. Su pareja el Sheriff Daniel también la acompañaba para que no se sintiera dola.
Lili sujetaba fuertemente la mano de Wyatt, ese era el tercer día y aunque debía estar más preocupada por un par de enfermos y asesinos tras ella, estaba aún más preocupada por su abuela, estar en funerales sólo le recordaba que un día perdería a su abuela y no estaba preparada para eso, a menos que ella se fuera antes y no tuviera que sufrir esa clase de dolor.
Las personas en el lugar prestaban atención a la caja que estaba siendo enterrada algunas personas tenían el descaro de chismear, otras de reír sin importarles mucho que personas estaban llorando a mares a los costados.
- Ya pueden irse. - Les decía la abuela susurrandole a sus nietos. Lili asintió.
- ¿Ustedes cuando se irán abuela? - Le preguntó suavemente, porque el Sheriff también acompañaba a Esmeralda Anderson.
- Ahorita mismo también. No hemos dormido mucho. - Decía el Sheriff Daniel.
Pues les habían avisado a Lilith por si acaso decidía visitarlos ese fin de semana que no estarían en casa por ese funeral, pero Lili quería acompañarlos pues de todas maneras esas habían sido personas que la habían visto crecer y le pareció correcto demostrar su respeto y aprecio.
- Esta bien entonces vayan a descansar. - Decía Lilith, dejó un beso cálido en las mejillas suaves de su abuela al igual que Wyatt. - Cuidense, tal vez vengamos hasta dentro de una o dos semanas. -
Su abuela asintió, a pesar de que Lilith había entrado a la universidad y su abuela ya no estaba sola, no había perdido la costumbre de visitarla los fines de semana o el intenso cariño y amor que le tenía.
- Conduzcan con cuidado. - Les decía el Sheriff, a lo que ambos jóvenes asintieron.
- Claro. -
Ambos comenzaron a caminar lentamente a su auto, Lilith estaba un poco cansada y con sueño mientras Wyatt estaba volteando sobre su hombro cada dos segundos.
Ese era el tercer día y si no fuera porque tuvieron que asistir a un funeral dirían que todo iba absolutamente normal. El padre de Lili ya no había hecho llamadas, lo cual no dejaba del todo cómodo a Wyatt, porque sabía que los habían estado rondando los últimos dos días.
Wyatt se aseguró que Lilith estuviera cómoda en el copiloto.
- Gracias. - Murmuró su novia.
- ¿Quieres ir directo a casa o pasamos comprando algo en el camino? - Lili volteo su cuerpo y vista hacía su novio.
- La comida rápida es dañina Wyatt. - Le sonrió y Wyatt posó una de sus manos acariciando la rodilla de su novia sin atreverse a voltear porque ese vestido negro le quedaba de maravilla como cualquier otra cosa que se pusiera, porque Lili podría llevar una bolsa de basura y sería la bolsa de basura más sexy y hermosa para Wyatt.
- ¿Quieres que cocine algo para ti? - Ella asintió tomando su mano y entrelazando sus dedos un poco.
El perfil de Wyatt era exquisito, pestañas espesas con una nariz respingada, su quijada bien marcada era la representación de masculinidad, y sus labios carnosos una perdición para Lilith, se río por sus pensamientos.
- ¿Qué piensas? -
- Nada. - Decía avergonzada, dándose cuenta que Wyatt ocupaba gran cantidad de sus pensamientos.
- ¿Qué? ¿Piensas al fin cumplir con tu fantasía sexual? - Preguntó sacándola de sus pensamientos de golpe.
- ¡¿Qué?! - Wyatt carcajeó. - ¿De qué hablas? -
- Recuerdo que en clase de Arte dijiste que tu fantasía sexual eran los hombres con traje y que cocinan. - Ella apenas pestañeó recordando aquello. - No hay ningún problema. Yo puedo ofrecerme para el sacrificio. - Más que sacrificio para Wyatt iba a ser un completo placer y honor.
- ¡Wyatt! - Soltó su mano y se cubrió el rostro avergonzada, a lo que él río. - ¿Aún recuerdas eso? ¿Cómo diablos te acuerdas de eso todavía y no recuerdas las clases de historia? -
Su novio río un poco, recordaba cualquier cosa que tuviera que ver con su mejor amiga y su novia, pero no recordaba cosas que en aquel momento no le parecieron nada importantes.
- ¿Qué? No me culpes, eras muy tierna y adorable. - Él no iba a negar que eso era algo que siempre le gustó en su novia, esa perfecta y jodida combinación entre un Ángel y un Demonio.
- Y tú un pervertido. - Negó ella intentando que no se notarán sus mejillas rojas como manzana, pero era tarde porque su novio ya la había visto. - Bueno aún lo eres. Eso queda claro. -
- Tú también. - Le tomó la mano para besarla, haciéndola molestar.
- ¡Oye yo no...! -
- Me refería a adorable, sigues siendo tierna y adorable. - Reía Wyatt. - Aunque la oferta sigue en pie hasta que me quite el traje. - Decía haciendo el ademán de ajustarse la corbata, mientras su novia reía.
- Al menos no tengo fantasías sexuales con camareras. -
- Ay por favor, era el primer dibujo que hice de ti. Además dame algo de crédito el uniforme de camarera y ese delantal siempre te quedaban bien. Yo estaba como "Hey Ven y sirvete, ah perdón era sirveme" - Ahora si Lili tomó un poco de aire indignada, golpeándolo fuerte en el brazo.
- ¡Wyatt! - Exclamó ella molesta. - No puedo creer eso... - Decía agachando la mirada porque sabía que lo que Wyatt quería era avergonzarla y lo estaba logrando.
- ¿Qué? Tu también babeabas por mi y yo nunca reclame nada. - Decía con intenciones de hacerla molestar aún más, su novia se veía preciosa molesta, y sexy enojada.
- Cállate. -
- ¿Qué pasa si no? -
- Vas a hacerme enojar. - Lo miró mal.
- ¿Qué pasa si si? - Habló Wyatt tranquilamente con una sonrisa en los labios.
- Nada... Sólo callate. -
- Te propongo algo. - Decía Wyatt pensando en algo que le convenía, Lili le prestó atención.
- ¿Qué? -
- Yo cumplo tu fantasía sexual y... Tú cumples la mía. - Decir que Lili casi se derretía como ketchup en el asiento de copiloto era poco, estaba por negar. - Todos ganamos. -
Anderson suspiró volteando a la ventana ¿Porque su novio siempre la ponía así de nerviosa? ¿Porque su corazón no dejaba de latir tan fuerte y rápido como lo hacía cuando estaba con Wyatt? Las respuestas eran obvias, pero ella negaba intentando acallarlas un poco.
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PD: Si no lo recuerdan en el primer libro se narra acerca de un dibujo que Wyatt hizo para Artes Plásticas en el Instituto, ese era el primer dibujo que hizo Wyatt de Lili y era uno donde Anderson estaba de perfil, sentada en el suelo, desnuda y sólo con un delantal puesto, según Lili esa era la única fantasía sexual de Wyatt que sabía (Pero ella no sabía que esa era ella).
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Cuando el Demonio Ama al Ángel. © CORRIGIENDO.
RomanceDerechos de autor completamente reservados a Kennya Chávez. NO COPIA NI PLAGIOS NI ADAPTACIONES. Segundo Libro de El Demonio es un Ángel. - La trama se basa después del primer libro. Así que para que no te sientas tan perdid@ te recomendaría leer e...