Capítulo 19 (K)

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POV KEIRA 

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—No debiste comportarte así—entró a la habitación y me giró en su dirección —Eres muy impaciente Damián —lo miró a los ojos mientras niego.

—Yo me comporto como quiero, por algo soy el Alpha —levanto una ceja y me cruzo de brazos.

Y ahí esta de nuevo... Volvemos al principio.

—¿Y porque solo eres el Alpha, significa que te tienes que comportar de manera irrespetuosa? No puedes ser tan desconsiderado —él me mira con el ceño fruncido y se acerca a mí.

—No vuelvas a decirme algo como eso Keira —ruedo los ojos y bajo la mirada molesta.

—Solo digo la verdad —murmuro y escucho un gruñido de su parte.

—Soy el Alpha de esta manada, estás en mi territorio por lo cual también soy tu Alpha, así que es mejor que vayas midiendo tus palabras Keira —resoplo y levanto la mirada molesta.

—Esta bien "Alpha"  —recalco la ultima palabra con molestia y siento como él se enfada más.

¿Ahora que rayos hice? 

Este hombre esta loco. Tonto...

—¿Qué me has dicho? —da un paso hacia mí y yo levanto mis cejas en sorpresa.

Rayos, siempre se me olvida el pequeño detalle de que puede leerme el pensamiento.

—¿Yo? —me hago la desentendida —Nada "Alpha"  —vuelvo a recalcar la última palabra y él aprieta su mandíbula con fuerza.

—Para —murmura mirándome a los ojos fijamente.

—¿Qué pare de que "Alpha" ? —vuelvo a repetir recalcando la última palabra y de un segundo a otro Damián me pega contra la pared agarrando mi cintura.

—No me digas así... —entrecierro los ojos confundida.

—¿No me dijiste acaso que eras mi Alpha? —susurro cerca de su rostro —Yo solo te llamo como todos te llaman —él me mira de forma extraña y y termino por llamarlo como todos —Alpha Damián —él niega con la cabeza y se despega un poco de mí aún sin soltar mi cintura.

—No quiero que tú me llames así —su dedo toca mi labio inferior con suavidad —No me gusta como sale de tus labios... —baja su mirada a mis labios y yo entreabro estos bajando mi mirada a sus labios.

Entonces de un momento a otro mi mente desconecta de todo gracias a su cercanía y todo dentro de mí se revoluciona.

—Me gustas... —suelto inconscientemente aún embobada por sus ojos.

Abro los ojos como platos y me tapo la boca rápidamente separándome un poco de él ya que él me tiene sujeta de la cadera. Siento como él me mira fijamente pero yo evito mirarlo a los ojos por la vergüenza que estaba pasando. 

—¿Que has dicho? —muerdo mi labio inferior nerviosa y sus dedos cogen mi barbilla, obligándome a verlo a los ojos —¿Qué has dicho? —su mirada no es seria, pero tampoco lleva una sonrisa, su rostro muestra más bien sorpresa y confusión.

—Nada, no me hagas caso —contesto y él me mira serio nuevamente.

—¿Que has dicho? —dice ansioso y yo resopló cansada.

Me armo de valor y lo suelto rápidamente.

—Me gustas, ya esta, eso es lo qu... —abro los ojos de sorpresa cuando él pega sus labios a los míos en un beso e instantáneamente le sigo el ritmo. Siento como el calor de su cuerpo se pega al mío.

Por Fin Te Encontré Donde viven las historias. Descúbrelo ahora