Un intenso dolor de cabeza se hizo presente al abrir los ojos, después de una larga noche, se sentía agotado como si hubiese tenido una terrible resaca.
Los rayos del sol se colaban a través de la ventana de su habitación, hacía un poco de frío y no quería levantarse de su cómoda cama, era un día como cualquier otro, con la diferencia que se hallaba en Japón.
Cogió su móvil para revisar sus mensajes. En este encontró un mensaje de Sakura, sonrió automáticamente al leerlo.
''Espero que hayas llegado muy bien, en cuanto abordaste el avión a Japón, comencé a extrañarte. ¿Cómo están todos por allá? Envíale saludos a los chicos... y recuerda, no hagas alguna estupidez, lo prometiste. Te amo, Sasuke.''
Él contesto de inmediato, asegurándole que no cometería ninguna tontería y que la extrañaba demasiado. Prometió mandarle los saludos a todos sus amigos.
Sasuke decidió tomar una ducha rápida, se vistió y salió a dar una vuelta por los alrededores. El sol estaba a todo su esplendor, camino sin una dirección muy clara. Extrañaba a Sakura, fueron unos días felices a lado de su novia en Nueva York, sin embargo, tenía la certeza que las cosas se complicarían cuando arribara a Japón.
Intento hacer algo de fricción con sus manos frías, el ambiente se percibía bastante gélido a pesar del imponente sol en el cielo, los cambios bruscos del clima, en ocasiones eran confusos. Observo a su alrededor, no divisaba a muchas personas, a pesar de ello, estaba muy relajado estar en ese entorno. Añoraba su hogar, la tranquilidad de Japón, a comparación con la agitada vida en Nueva York.
Aunque le hacía falta algo, ese algo llegaría muy pronto, mientras pensaba en ella, ocurrió lo que más temía.
Su vista se enfocó en el horizonte, diviso una figura humana que se acercaba con unas bolsas en manos, centro más su mirada, pensando que podría ser alguno de sus vecinos, lamentablemente así era, uno de los más indeseables. Sintió un escozor recorrer por su cuerpo, la ira se apoderaba de él. Orochimaru caminaba despreocupado por la acera de la calle.
"Contrólate" se dijo a sí mismo. Fue casi imposible retener su rabia hacia ese hombre, sobre todo cuando el malnacido le dirigió la palabra.
—¡Uchiha, has vuelto! ¿Qué tal Nueva York? —su voz le parecía desagradable, sintió unas ganas inmensas de golpearlo contra el pavimento y matarlo
Trato de calmarse para no cometer una imprudencia, no obstante, una idea vino a su cabeza, si Orochimaru llegaba a sospechar que Sasuke sabía algo relacionado a Sakura, era muy probable que huyera. Debía idear bien el plan, por lo que intento parecer lo más tranquilo posible.
—¡Ajetreado! —respondió intentando sonreír— ¡nada comparado con Japón!
—Te creo —dijo el hombre con una sonrisa, que a Sasuke le pareció totalmente irónica— ¡es bueno verte muchacho!
Él asintió sonriendo y el hombre entró a la que alguna vez fue la casa de Sakura.
Sasuke avanzó a paso rápido hasta algún lugar que le despejara la mente. Su parque favorito estaba a la vista, corrió hasta allí, sintió la brisa cosquillearle el rostro, el alivio se apoderaba de él, sin embargo, rápidamente volvió el maldito sentimiento de ira y odio, sus ojos se llenaron de lágrimas por la frustración. Se acercó a un árbol donde se sostuvo con fuerza, mirando como el suelo se humedecía con sus lágrimas que caían de su rostro.
"Quiero asesinarlo... solo quiero verlo muerto" pensaba con rabia
Su mente estaba fuera de sí, odiaba a ese repugnante hombre, le tenía un asco infinito, Sasuke solo quería vengarse, ni siquiera la muerte parecía un suficiente castigo.
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Love Maze
RomanceAmor, desengaño es lo que experimentara Sasuke al darse cuenta que no todo sale como él lo esperaba. . . Si estamos juntos, incluso en un laberinto sin fin es el paraíso. . . . . . . . . . Hermosa portada realizada por Annette-san