40. El plan de Karen.

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Narra Karen.

No se que me pasa, sé que esta mal, muy mal a decir verdad, pero me gusta Tom, me encanta Tom, desde el día que Kendall me enseñó su foto. Esa maldita foto que me cautivó, luego cuando hable con el en la videollamada, fue tan lindo y ni siquiera me conocía. O cuando lo conocí por primera vez en sus vacaciones, también se portó muy lindo conmigo.

Pero claro que no le voy a decir a Kendall, lo voy a tener en secreto hasta que Tom esté completamente enamorado de mí. Tiene que ser mío de una u otra forma.

Me decidí mandarle mensaje por Instagram.

Me contestó muy amable como siempre, le dije que tenía muchas ganas de conocer Nueva York, pero que lamentablemente no tenía el dinero para pagar un hotel.

Y como tenía planeado, el se ofreció su departamento, ya saben el típico "mi casa es tu casa" y ese tipo de cosas, lo cual no dude en aceptar.

Ojalá que su novia me vea con él en su departamento y terminen de una vez por todas, esa chica tiene algo que no me agrada.

Para mi suerte ya son vacaciones, así que me puedo ir cuando yo decida.

***

Hoy me iba a ir a Nueva York, tome un vuelo por la mañana. Después de muchas horas ya estaba en Estados Unidos. Tom me dio su dirección, tomé un taxi y fui a la misma.

Minutos después ya estaba afuera de su departamento. Toque.

Me abrió con una sonrisa en el rostro y yo entré. Me mostró cual iba a ser mi habitación y después él se fue, dijo que tenía que hacer algunas cosas. Eso no lo tenía planeado, pero bueno, es un hombre ocupado.

Mi plan era sencillo, venir a Nueva York, que él y su novia terminaran. Y si era posible, que pasara algo más entre el y yo por las noches para que por fin termine completamente enamorado de mí.

Narra Tom.

Karen me mandó mensaje por Instagram diciéndome que quería conocer Nueva York pero que no tenía el dinero suficiente para pagar un hotel por aquí. Yo le ofrecí mi departamento, solo fue por cortesía, pero ella me tomó la palabra. Se me hacía algo incómodo que ella estuviera en mi casa ya que casi no la conozco como a Rachel o a Kendall. Pero bueno, es amiga de mi mejor amiga, no le podía decir que no y mucho menos cuando yo ya le había ofrecido mi casa.

Hoy llegó, le mostré su habitación y salí a caminar un poco, ya que era algo incómodo para mi estar solo con ella ahí dentro.

Estuve viendo que hacer por un largo tiempo, pero después opté por regresar, era muy grosero de mi parte dejarla ahí sola y mas cuando no conoce nada. En fin, tendré que aguantar estos tres días así.

Llegue a mi casa y ahí estaba ella sentada en el sofá viendo la televisión.

—Hola, siento llegar hasta ahora. Tenía unas cosas importantes que hacer.

—No te preocupes Tom, lo bueno es que ya estás aquí.

—Si, bueno. Estos últimos días estaré ocupado y casi no podré estar en casa —mentí— Pero sabes que esta es tu casa.

—Gracias Tom, pero ¿Que hago si alguien te viene a buscar?

—Dudo que eso pase, a menos de que sea Harry. Es un vecino y muy buen amigo mío.

—¿Y tu novia?

—Oh, si, ella también. Pero ella no sabe que estar aquí y te agradecería si siguiera así.

—No hay problema.

Narra Karen.

Al día siguiente por la mañana fui a dar una vuelta por aquí. Si quería conocer Nueva York, que de algo sirva que viaje tanto.

Solo salí por la mañana, me iba a quedar toda la tarde en casa de Tom por si venía su novia a buscarlo, tenía que hacer lo posible porque ella supiera de mi presencia en casa de su novio.

Ya llevaba bastante tiempo en la casa y a nadie se le ocurría venir a visitar a Tom, me estaba desesperando.

Agarre el teléfono de la casa y para mi suerte Tom tenía una agenda a lado. Busque y si, tenia el número de su novia y marqué. Al segundo timbrazo contestó.

—Hola mi amor —dijo con cierta emoción.

—¿Hola?

—¿Quién eres?—dijo molesta.

—Me equivoqué, lo siento—colgué.

A los pocos segundos regresó la llamada, pero no contesté, con eso ya era suficiente.

Me dediqué a ver la televisión y treinta minutos mas tarde ya estaban tocando la puerta desesperadamente. Mire por el picaporte y era la novia histérica de Tom.

Me daba miedo abrir, no esta Tom ¿Y si me golpeaba?

—¡Tom, abre la puerta! —tocó— ¡Abre la maldita puerta Thomas!

Sin mas abri.

—¿Quien mierda eres?, ¿Tú me llamaste?, ¿Que putas haces en casa de MI novio?— me dijo muy molesta. Me dió miedo, ahora estaba arrepentida por llamarle.

—Hey cálmate—trate de sonar lo mas normal posible.

—¡No me digas que me calme, estupida!. ¡Dime que haces aquí si no quieres que yo misma te saque!— me dió una cachetada.

—Esta bien. Escucha. Soy amiga de Tom, vivo en Londres, yo quería conocer Nueva York, pero no puedo pagar un hotel así que el se ofreció a que me quedara en su casa, pero casi no lo veo y tampoco dormimos juntos. Hoy ni siquiera lo he visto en todo el día.

Gracias a Dios llegó Tom, para que ponga en su lugar a esta.

—Hey, ¿Que pasa aquí?

—Es lo que yo te pregunto Tom ¿Que está pasando aquí y quien es esta ramera?

—Ella es Karen, amiga de Kendall— ella rodó los ojos molesta

—Esa maldita perra.—susurró.

—Vino a conocer Nueva York, es todo. Se esta quedando en mi casa solamente porque es amiga de Kendall ¿Okay?— ¿Solo por ser amiga de Kendall?

—No te preocupes Tom, me voy a un hotel.

—Si, vete—me dijo ella.

Tom no me detuvo, fui por mi cosas y salí de ahí. Fui al hotel más cercano, claro que tenía dinero para pagarlo, solo quería intentar algo con Tom.

Narra Kendall. (Momentos antes)

Estaba en casa haciendo nada. Me metí a mis redes sociales y Karen subió una foto con ubicación en Nueva York. Se me hizo bastante extraño, las tres nos contamos todo y ella en ningún momento nos habló de ningún viaje ni de ir a Nueva York, tal vez era un asunto personal.

Tal vez vea a Tom. O tal vez esté allá por Tom.

No, no creo. ¿Por qué por Tom? A ella no le gusta, sabe que me gusta a mi.

Bueno, espero que sea por algo personal, algún trabajo de sus padres, vacaciones o lo que sea, y sea lo que sea, que le vaya bien.

Siempre fuiste tú. •Tom Holland•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora