Smile, please. ©Jeon Jungkook

Capítulo 35

El llamado no sólo había sido recibido por Sunhee, también lo habían recibido los amigos restantes. Todos se alertaron, en sus cabezas no cabía la idea de que Jung Ho-seok estuviera en el hospital, debido a un accidente. Sin duda, la noticia afectó a cada uno, tanto así, que Haeun y Yoongi partieron al hospital.

Jungkook fue quién lo pensó dos veces, ¿qué era de Sunhee en estos momentos? Definitivamente estaba destrozada, no tenía percepción del tiempo, ni de lo ocurrido, solo era un mar de lágrimas.

Jeon partió hasta el departamento de la chica. Debía llegar lo antes posible para averiguar el estado de aquella, ¿qué podría estar haciendo la joven en estos instantes? No lo sabía con certeza, solo esperaba no verla en el departamento y encontrarla en el hospital.

No tardó más de diez minutos en llegar. Afuera de la puerta de departamento estaba, llamado a su nombre y tocando la puerta con cierta desesperación. Como se esperaba, nadie abrió. Tuvo que usar su segunda opción, la copia de la llave que tenía para entrar. Dentro del hogar, abundaba el silencio, al igual que la oscuridad. No había luz que iluminará el lugar, solo las pequeñas estrellas que adornaban el cielo lograban ayudar en algo. Si no estaba en la sala, debía estar en la habitación. Y acertó.

Jamás creía ver aquella imagen en su cabeza.

─ Sunhee, mierda, ¿¡qué haces!? ─ corrió hasta donde estaba la susodicha y le arrebató el objeto que tenía en las manos.

En su cabeza había quedado impregnada la imagen de Sunhee con una navaja en las manos, pasando aquel objeto sin ninguna delicadeza sobre su brazo.

No había llegado a tiempo, pero por lo menos logró quitarle aquel objeto de las manos y evitar una tragedia más.

─Sunhee, Dios.. ¿Qué creías que lograrías? ─dejó la navaja en el suelo y miro a la joven esperando alguna respuesta. ─No puedes hacer eso..

No hubo respuesta por parte de la contraria. Su cabeza estaba baja, sus pequeños y rasgados ojos inundados de lágrimas y sus mejillas húmedas.

─Dime, ¿crees que así se arreglará lo sucedido?

─Hoseok está a punto de morir.. es lo más probable, ¿lo entiendes? ¿¡Ves lo que está pasando!?

Silencio. Un silencio se extendió por toda la habitación.

─Hoseok estará bien.. P-pero, no es la solución..

─¿¡Y que si no lo está!? ¿No has oído lo que ha dicho esa mujer..? ─replicó las últimas palabras con dificultad.

Un nudo oprimia su garganta, dando paso a las lágrimas que pedían a gritos salir.

─Sunhee, joder.. No sirve de nada pensar en lo negativo.. ─tomó el rostro de la joven con delicadeza entre sus manos, intentando transmitir su tranquilidad. ─El estará bien. Por favor, no vuelvas hacer esa tontería, no te ayudará a solucionar nada Sun..

Ambos se miraron fijamente por un proporcionado tiempo. Jungkook intentaba calmar las incesantes lágrimas que rodaban por las mejillas de la castaña, mientras que Sunhee pedía a gritos un abrazo por parte de el.

La mirada del joven se posó sobre el brazo izquierdo de la mencionada anteriormente. Éste estaba cubierto por un tipo de capa delgada de sangre, que corría con lentitud en forma de hilo, suave y ligera. Se levantó con el objetivo de buscar una toalla o algún trapo húmedo para limpiar con cuidado las heridas.

─Mira lo que has hecho.. ─murmuró, pasando con suavidad la toalla sobre el brazo herido. ─Sunhee, no lo vuelvas hacer por favor..

No dijo nada. Limpió con brusquedad las lágrimas que aún caían de sus ojos. No era primera vez que Jeon la veía en un estado tan devastador, tampoco era la primera vez que la veía llorar, pero su idea jamás fue llorar delante del joven.