Capítulo 41

938 81 2
                                    

─Jeon Jungkook. ─mencionó su nombre, mirando con curiosidad el lugar. ─Estás muy mal como para haberme traído a la playa con un clima tan.. relevante.

Recalcó la última palabra con cierto asco. No era por la acción del azabache, ni el clima. Había un ratón muerto en una esquina de la playa, semi cubierto por arena. Claro, la arena no alcanzó a cubrir su cuerpo entero y eso era sumamente asqueroso.

─Ya, Sunhee, no me regañes. ─chasqueó la lengua. ─No soy adivino, tampoco se me pasó por la mente que comenzarán a caer gotitas.

─Jungkook, el problema no son las gotitas. ─hizo un pequeño gesto con sus manos. ─Hace frío...

Lo último dicho por la joven, fue más bien un murmuro. No quería parecer débil o algo por el estilo, pero sí, las gotitas no eran un problema. A Sunhee sin duda le encantaba la lluvia, sentir las gotas pequeñas deslizarse por su rostro y su cabello, era muy satisfactorio. En cambio a Jungkook, el solo las evitaba. Cubriéndose con el gorro que traía puesto.

─¿Tienes frío?

La pregunto quedó en blanco, sin respuesta alguna.

Por una parte, Sunhee no quería admitirlo y por otra, ya lo había mencionado, ¿realmente era necesario hacerlo de nuevo? No, Jeon no era sordo.

Se quedó inmóvil pensando en hacer aquel gesto o no. Quizá no sería bien recibido por su contraria, pero de todas formas lo hizo. Comenzó a retirar su abrigo negro que usaba hace unos instantes para dejarlo en los hombros de la joven. Había sido un gesto muy tierno a decir verdad, pero claro, Sunhee no es una princesita.

─No tengo frío. ─negó ante sus anteriores declaraciones. ─Es tuyo.

─Deja así, hace frío.

Al ver cómo intentaba quitárselo, le dió un pequeño y suave manotazo para que dejara de hacer lo que quería y por fin se lo dejara puesto. Claro, no fue fácil pero lo consiguió.

Después de minutos con el abrigo encima de sus hombros, lo acomodó mejor, para intentar cubrir mejor la parte de su torso y conseguir evitar el gélido viento que se presenciaba en la oscura noche. Un olor pudo percibir con facilidad. Era el olor característico de Jungkook. Un olor suave a chocolate, con una fragancia varonil demasiado seductora para su gusto. Su cabecita le jugó una mala broma y por acto "impropio" comenzó a oler de este de mejor forma, más mencionada.

─¿Qué? ¿Ahora te gusta oler mí ropa? ─un sonrisa boba se le formó en el rostro.

Era muy gracioso ver a su querida chica oler su abrigo sin ninguna sutileza.

─Si. ─admitió con las mejillas rojas. ─Tiene olor a bebé.

─¿Qué? No es cierto. No uso perfumes de bebé.

─Huele como a un tierno bebé. ─una sonora carcajada se escapó de su boca. ─Ay Jungkook, ¿no crees que eres demasiado grande para estas cosas?

─¡No es cierto! ¡Yo no uso eso!

Su nariz se había arrugado y sus mejillas habían tomado un color más rosado a lo normal. Quizá no usaba perfumes de bebés, pero si parecía uno molesto.

Sunhee no pudo evitar sonreír ante eso. Realmente podía llegar hacer muy tierno cuando quisiera.

─Jeon, debes aprender. ─se burló. ─Mira que yo si uso perfume de grande, no como otros, que usan de bebés.

Suspiro con arrogancia, de alguna forma le gustaba molestar al chico, debido a su tierna manera de enojarse y, las ventajas que podía tomar.

─¿Así dices..? ─asintió segura de sus palabras. ─Veamos.

Smile, please. ©Jeon JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora