notas debajo de la mesa # D.S ✓

✧CAPÍTULO 24✦

(Daniel with Cello in multimedia)

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(_____ Narra)
Dos semanas después...

Llevo dos semanas de pareja con Daniel, es encantadora la idea que me hago de que soy su novia, la única pega que tengo es que mañana empiezan la clases otra vez y... creo que estoy... mmhm.. Asustada. Por lo que pueda decir l gente, que cuando nos vean digan cosas que pasen cosas, no me quiero hacer la idea, pero el echo de que Daniel es popular me da miedo.

— Deja de pensar en mañana.— me dijo como si me leyera la mente.— Enserio que no va a pasar nada, lo único que te tiene que importar somos nosotros no los demás.— le mire sonriente y asentí.

— Deja de hacer eso.— le dije cuando empezó a hacerme cosquillas cuando se puso encima de mi en mi cama.— ENSERIO DANIEL PARA.— Dije riendo demasiado fuerte.

Al poco de quejas y risas el paro y se quedó a mi lado en la cama de nuevo, solo estábamos el y yo en ese momento, riendo pero a la vez mirándonos, sus sonrisas tan reconfortantes que me daba en ese instante.

— ____.— habló de nuevo susurrando. Hice una mueca con la cabeza para que siguiera.— Te amo.

— No sabes lo que llego a amarte yo Dani.— aún tumbados puso su mano en mi mejilla y nos besamos, así arropados nos abrazamos y quedamos rendidos en la cama.

Escena total de película, me encantan estas escenas así, en la que el chico te atrapa con sus brazos y te sientes protegida junto el, en la que no te sentirás sola y con mi cabeza pegada a su cuerpo, estas son las mejores escenas.

No se cuanto tiempo paso pero notaba un peso encima de mi y entre abrí los ojos, Daniel no era ya que seguía a mi lado abrazándome. Entonces mire hacia arriba.— ¡AAH!— Grite.—¡Que haces aquí maldito!— le dije al rulado.

— Es que no contestabais las llamadas. Vamos arriba os estamos esperando.— Soltó de la nada y se bajo de encima de nosotros.

—¡Pero estás loco! Nos acabas de asustar.— dijo mi novio abriendo los ojos y asustado.

Solo una cosa, sienta bien poder llamarle mi novio al fin.—¡QUE OS ESPERAMOS ABAJO!— Nos grito.

—¡MAMÁ, NUNCA JAMAS DEJES ENTRAR A JACK A MI HABITACIÓN!— Le grite a mi madre que era la única que estaba en estos momentos en casa.

—¡A SIDO EL!— Dijo desde abajo.

Suspire.— Lárgate.— puse cara de asco.— Nunca vuelvas a hacer eso Jack Avery o entonces te enterarás de quien es ___ Peters.

—¡UY ESO SUENA A AMENZA!— Grito mi madre.

—¡SEÑORA PETERS!
— ¡MAMÁ!— Gritamos Jack y yo la vez y Daniel solo se incorporo y empezó a reír.

— Enserio Jack vete ya.— le dijo.— Ahora bajaremos.— el subió una ceja y asintió.

Me volví a tirar a la cama y solo mire como Daniel se ponía su suéter color azul. Yo le robe el otro día una sudadera color violeta pastel y pensaba ponérmela porque me encanta.
Me levante pesadamente y el de sentó a mirar lo que hacía yo esta vez, fui hacia el armario donde tenía guardad la sudadera y la agarre, me la puse y le sonreí.

— Es mía.

— Ahora ya no.— le dije.

Se levanto y se puso delante de mi, me encantan sus sudaderas porque me quedan por el muslo y esas son mis favoritas. Nos besamos y escuché un pequeño ruido en mi ventana que hizo que nos separásemos.