Narra Erika
La fiesta seguía, apenas eran las 02:00 de la mañana las personas se encontraban bailando en la pista o más bien en toda la sala. Había invitado a mis amigos al igual que Nahuel, me encontraba hablando con ellos mientras seguía cuidando a mis hermanos.
Tenia en brazos a Ángel intentando hacerle dormir mientras que Angus estaba tranquilo en su porta bebé, tarde bastante pero al final lo logré y cuando iba a llevarlo veo que cargan a Angus y era Cristian, sonreí y él hizo lo mismo.Los llevamos arriba y los acostamos en sus cunas con cuidado y en silencio para no despertarlos, los arrope bien para luego acariciar sus mejillas rosadas y dejar un beso en cada una de ellas.
- te vez hermosa cuidando niños, amor - dijo en un susurró mientras me abrazaba por la cintura besando mi cuello.
Reí y me aparte un poco dándome la vuelta, estando así frente a frente y le di un beso, ahora que lo veo está vestido de un manera muy diferente a lo que usualmente suele usar, una camisa blanca con líneas negras y pantalones negros, todo al cuerpo y le sentaba de maravilla.
- ¿porque tan elegante? - pregunte con una sonrisa y acaricié su pecho con la punta de mi dedo.
- pff, es obvio. Hay que impresionar a los cuñados ¿no? -.
Esa no era la respuesta que esperaba.
- idiota - reí y el me dio un corto beso -será mejor que regresemos o pensaran que estamos haciendo otra cosa - dije en un susurró algo divertida.
Él asintió y bajamos, cuando llegamos todos mis amigos comenzaron a gritar y silbar, solo reí y comenzamos a tomar y bailar.
Seguimos así durante varias horas más hasta que mi amigos se fueron llendo solo quedaban algunos invitados de Dereck y Nahu.
Al terminar de despedirme de Luna caminé como pude, me había pasado un poco además que estaba sumamente cansada y mareada, ni siquiera me di cuenta que he perdido mis zapatos. No se como lo logré pero apenas toque la suave tela del sofá ya no supe más nada, solo que caí profundamente dormida.(...)
Narra Nahuel
Frunci el ceño y gruñi al notar tanta luz al abrir mis ojos, parpadeó un par de veces intentando acostumbrarme a la molesta luz y cuando logró abrirlos me doy cuenta de que ni siquiera estaba adentro de mi casa. Estaba acostado en el patio tracero, la espalda me dolió cuando me levanté así que me estiré un poco y entré, era un desastre además de estar todo sucio había algunas personas dormidas por ahí y la que más me sorprendió fue ver a mi amigo dormido en las escaleras. Solté una risa y saqué mi teléfono al instante para sacarle una foto.
Guarde el teléfono y fui hasta la sala donde vi a mi hermanito moviendo a Erika quien estaba dormida sobre el sofá.
- ¿Liam? - dije llegando hasta ellos.
- ¡Nahu! ¡Erika no despierta...hambre! - comenzó a moverla otra vez.
Reí bajo, me acerqué a Erika y pude notar que su vestido estaba mal, es decir...casi se le salía su pecho, con cuidado le acomodé la ropa y ella se quejó. La levanté mientras ella se tomaba de la frente.
- vamos princesa, arriba - la abracé y cargué hasta la cocina, mire de reojo que liam nos seguía corriendo.
La dejé sobre la mesa, ya que no sabía donde estaban todas las sillas, y también subí a Liam quien se acomodó entre sus piernas. Saque del refrigerador la leche y lo serví en dos vasos, se los pase y al instante comenzaron a tomarla, sobre todo Liam.
- Nahu..me duele la cabeza -.
La volteé a ver y se volvió a agarrar de la cabeza, tuve que morderme el labio para no reír. Ahora recuerdo porque no le dábamos alcohol.
- te voy a traer una pastilla, espérame - le di un beso en la frente y asintió, subí hacia mí cuarto y empecé a buscar algo para el dolor de cabeza o más bien para la resaca..
Narra Erika
Ahora recuerdo porque nunca bebía, no se si aguante a Nahu mientras busca esa maldita pastilla.
- Erika quiero jugar - dijo mi hermano y se comenzó a mover de un lado a otro sin dejar de tomar su leche.
- espera un rato Liam, luego jugaremos - dije sin ganas.
- ¡pero yo quiero jugar ahora! - dijo esta vez gritando.
- Liam no grites te dije que luego jugaremos espera - cuando dije eso hizo un puchero y se llevó su manita a su boca y comenzó a chuparla.
Al rato llego Nahuel y me pasó una pastilla, la metí en mi boca para luego pasarla con el agua, luego de unos minutos escuché un sonido y se cuál era, era el sonido de llamada de mi celular, baje a Liam y me dispuse a buscarlo y lo encontré tirado entre el sofá moví a la persona que estaba dormiendo ahí y lo saqué.
Vi la pantalla y era de Luna, le contesté.
- ¿hola? -.
- ¡¿porque tardas tanto?! ¡hace rato te estaba llamando, mujer! Cómo sea... Hoy hay fiesta en mi casa, en la piscina comienza a las 05:00, no llegues tarde - dijo para luego cortar.
Parpadeo un par de veces analizando lo que dijo hasta que me di cuenta que dijo que hay fiesta en su casa, lo pensé por unos minutos si ir o no pero al final decidí que si iría pero primero debía pedir permiso.
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El mejor error de mi vida
Teen Fiction¿Con la llegada de un ser inocente puede arruinar o mejorar tu vida? Eso le pasará a la protagonista de esta historia, que con la llegada de un niño cambia su vida totalmente causando conflictos entre su familia ¿podrá solucionarlo? #8 mellizos 15...