El mejor error de mi vida

Capítulo 11:"Comienzan los problemas..."

Narra Erika

- ¿ya te he dicho que tu madre no me cae bien? -.

- por Dios, Erika - Cristián río y rode los ojos - ella es así con todos -.

Bufé acomodandome en mi lugar, estaba en una cena familiar con la familia de Cristián, no es que los odie pero su gente es tan insoportable, bastantes serios, amargados y falsos. La peor es su madre, si de por sí ya no le caía bien de niños mucho menos ahora que soy la novia oficial de su hijo y no quiero imaginarme su reacción cuando se entere que va a ser abuela....

Hablando de eso...

No se como decírselo, es decir, ya tengo el "regalo" hecho pero no se como dárselo, lo que si se es que ni loca le voy a decir enfrente de su familia, conociéndola serían capaz de correrme h prohibir a Cristián que sea mi pareja.

Se me revuelve el estómago el solo pensarlo.

- ¿no tienes hambre? - me pregunto Cris cuando empuje levemente mi plato de comida, solo negué con la cabeza.

- no me siento bien - dije bajo para que nadie más nos oyera.

- Erika.... - una odiosa voz nos interrumpe.

- así que, ¿nuestro primo ya se ha conseguido novia por fin? - suspiré mirando a Fede, el odioso y molesto primo de Cristian.

- era de esperarse y aún más con ella - dijo otro, Mario.

- ¿qué esperabas? Siempre estuvieron juntos desde preescolar - todos soltaron una risa.

¿ya ven porque son insoportables?

Ellos nos llevan como cinco o seis años a los dos.
Recuerdo muy bien que siempre me molestaban de niña cuando venía a jugar con Cris, me jalaban del cabello y esas cosas.

- ya no la molesten, parecen niños - alabada seas Juliette, es la prima de Cristiány hermana de Fede, tiene veintidós años y muy buena conmigo - hay que burlarnos de ustedes que ya pasan de los veinte y ni una chica han traído - es tan diferente a su molesto hermano.

Esta vez fui yo quien rio bajo provocando que esos dos idiotas me miren mal, aún así sonreí victoriosa.

- nos levantaremos - me agarró de la mano y dio un tirón.

Me sorprendió pero solo lo seguí, el me llevó hasta su cuarto y nos encerramos ahí.

- lo lamento - se disculpó y se acercó hasta mi - sabes que odio que te molesten pero no quiero que mi madre haga escándalo defendiendolos - me agarró con delicadeza por la cintura atrayendome y su otra mano en mi mejilla, acariciandola.

- está bien, me alegra que Juliette siempre me defienda -.

- no se como los ignoras, si fuera tu ya le habría tirado algún tenedor - ambos reímos.

- las veces que quise hacer eso... - volvimos a reír.

Todo se quedó en silencio por unos minutos, solo se escuchaba el ruido de nuestra respiración, no era un silencio incómodo sino uno bastante tranquilo. Cris vuelve a acariciar mi mejilla pero esta vez con sus nudillos y se acercó con cuidado hasta mis labios, sonreí un poco y lo besé, un beso lleno de amor y tranquilidad.

Sus manos pasearon con delicadeza por mi espalda, al final nos separamos por falta de aire y logró notar un fino hilo de saliva que conecta mis labios con los suyos, el sonríe y lo lame.

Sus besos bajaron de mi mejilla hasta mi cuello y sentí como poco a poco mis mejillas se calentaban pero me apartó de el cuando quiso apretar mis pechos, sabía lo que quería y no podía...el bebé...