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Brooke Stewart
Como lo pedí al lugar donde Noah me había traído en nuestra primera cita, estaba con un saco gigantesco, con un gorro y con unas gafas de sol, estaba con unos audífonos escuchando una canción, mis manos sostenían una foto una de mis favoritas a decir verdad, Noah y yo sonriendo a la cámara con el letrero de Hollywood atrás, en la otra sostenía una copia de la ecografía la primera y única que me hice.Necesitaba despedirme de ellos, no podía mejorar si ellos seguían detrás de mí, y mi bebé creo que simplemente necesitaba descansar en paz.
Rachel me paso un globo color negro, metí las dos fotos enrolladas ahí e inflamos el globo con helio que tenía Sarah, puse un lazo y lo tuve en mi mano con lágrimas en el rostro que simplemente no podían dejar de salir.
-Noah, te amo y siempre te amare, me hubiera encantado poder perdonarte, de verdad que si-dije con la voz rota-Pequeño bebé perdóname por no poder protegerte como debí de hacerlo, siempre serás mi fortaleza, te amo-la voz se me seguia rompiendo con el paso de las palabras.
Mis amigas pasaron sus brazos por mi espalda y eso fue lo que me hizo darme fortaleza para poder soltar el globo, cuando lo hice sentí que las piernas me pesaban y caí en el suelo viendo como se iba él símbolo de mi pasado.
Empezaria de nuevo
Esta vez por mí.
***
2 meses después...
Mis tacones sonaban contra el piso mientras buscaba él numero de la habitación a la que la habían trasladado.Cuando la encontré entre con una sonrisa mientras sostenía el ramo de flores en mis brazos.
-¿Es adecuado traer flores?-ambos levantaron la mirada y me sonrieron, se veían radiantes.
-Supongo que sí-dijo Dylan recibiendo el ramo-Como sea, gracias-le di un beso en la mejilla.
-¿Donde estan los demas?-pregunte acercándome a Sarah.
-Mis padres en la cafetería y nuestros amigos ya se fueron, creo.
Había estado con Sarah cuando dió a luz esta madrugada, ya había visto a mi pequeño sobrino pero me había ido horas después cuando la mayoría de gente llegó.
-Hola bebé-dije observando al pequeño en los brazos de Sarah-Soy tu tía-me reí al ver su pequeña mirada.
-Cariño, dile hola a tu tía-Sarah moviendo su pequeña manita.
-Es divino, justo como les dije que sería-mi hermano llego a mi lado y pasa su brazo por mis hombros-Los felicito a ambos, es demasiado lindo.
-¿Quieres alzarlo?-preguntó Sarah con una sonrisa un poco triste.Asenti y con cuidado tome al bebé en mis brazos, hizo un sonidito tan tierno que me dieron ganas de llorar.
-¿Escogieron un nombre?-asintieron orgullosos-¿Cual es?
-El es Thomas Stewart-dijo Sarah.
-¿Tenía que ser tu segundo nombre?-mire a mi hermano que me sonrió y se encogió de hombros-Pero como sea, le queda.Un nombre lindo para un chico guapo como tu.
Sus ojos se abrieron y un hermoso color avellana apareció en mi campo de vista.Eran los mismo ojos de mi madre, de mi hermano y míos.Acaricie su mejilla y una lágrima bajó por la mía, no me gusto la sensacion que senti en él estomago en absoluto.No deje que mis pensamientos se dirigieran al pasado doloroso así que volví a mirar a Tommy-ya hasta le tenia apodo-Y le di un beso en la mejilla antes de dárselo a Dylan que lo recibió con una sonrisa.
-Estoy muy feliz por ustedes-mi voz se rompio asi que me calle por dos segundos-Se lo merecen.
Sarah me miró triste y supe que sabía exactamente que pasaba por mi mente, disimuló su tristeza tomando la mano de Dylan y apartando la mirada.
-Sere la mejor tia del mundo-dije para cambiar de tema.
-De eso no tengo duda-dijo mi hermano mayor-Tu tía será muy consentidora y fastidiosa asi que preparate-le saque la lengua y volví a tomar mi bolso.
-Probablemente venga más tarde ¿Bien?-asintieron así que le di un beso en la mejilla a los tres y salí de la habitación y del hospital lo más rápido que pude.
Subí hasta mi auto y conduje hasta la direccion que tenia en mi celular, aunque la sabía más de memoria que otra cosa por estos días.Cuando baje del auto y subí hasta el quinto piso, Julian me recibió con una sonrisa y una botella de vino.
-Yo lo amé tanto ¿Sabes?-agradece que al menos tenía alguien con quien habla últimamente.
-Se que lo amaste, Brooke-me da una suave palmada en la espalda-Creo que todos fuimos testigos de eso.
-Tengo miedo, mucho miedo.Han pasado más de dos meses y yo sigo sintiendome mal, me despedí de ellos en el lago.Pero al ver al bebé hoy simplemente no dejo de imaginar cómo sería él mío, tendría mis ojos cafés o los verdes de él.Yo tendría cinco meses ¿Sabes?
-Lo sé-le di un sorbo más a la copa de vino.Al menos no estaba ebria-Se que los amaste a los dos, pero piensa en esto.Tu bebé es tu mayor protector, te protegerá desde donde está.
-¿Crees que es así?-pregunté en un sollozo.
-Es así.
-Hubiera deseado que todo haya sido diferente, pero la vida me dio una vuelta para la que no me preparo.
-Pero tu eres Brooke Stewart, eres fuerte.No lo olvides.Seguiras delante, estas saliendo adelante.Demuéstrame que no necesitas de nadie para hacer eso, que tu pasado es lo que te lleva a luchar.
Julian tenía razón, yo era fuerte.Necesitaba serlo y quería serlo.Demostraría lo fuerte que soy.Los recuerdos están ahí pero no dejare que me derrumben, demostrare que este giro no me destruyo que soy más fuerte que eso.Mi pasado tendrá un lugar demasiado grande en mi corazón.
Después de todo mi pasado se formó de lo que nunca creí que pudiera sentir, todo fue un dulce amor.
