Los Hijos De Cloe y Harry Potter y [Lazos Familiares]

3 Traumas

POV Albus:

El chillido más espigado que había escuchado era cuando Lily se había caído. Nunca pensé que ese aullido terrorífico fuera superado por uno mucho peor. Ver la mano de Cass sangrado despertó cada uno de mis nervios. Odiaba ver la sangre al tal punto de desmayarme. Pero sabía que tenía que ayudarla.

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—¿Cómo estás? ¿Ya dejo de sangrar?— preguntaba Philip.

Tal vez fueron dos minutos o diez mientras le quitaba la saga y la llevaba al lugar seguro más cercano, pero se sintieron como horas. Los gritos de Cass y me desesperaba al ver que la sangre no paraba de salir.

—Si, pero el dolor no. El doctor dijo que era simple, pero Cass está muy asustada y alterada. No lo está haciendo fácil.

—Odia la sangre y no soporta el dolor físico ¿Qué mano fue?

—La derecha.

Cass era derecha. Así que él en el momento que la daga le cayó en la mano soltó la varita y alguien la pisó. Yo tenía la varita o mejor dicho lo que quedaba de ella.

—Ella está bien. No tienes que quedarte. Tu papá está afuera esperando que salgas.

—No puedo. Necesito ver cómo está antes de irme.

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—No fue nada grave. Solo que toco una vena por eso era ganar sangre, pero todo está bien.

—James salió con Emma. Así que ella no está aquí. Deberías hablar con ellas. Bridget y Emma son tus mejores amigas.

—Si, pero no quiero. No lo entenderías.

— No, si no me lo explicas. Sabes que ellas hubieran hecho todo por ti. Pero las dos estaban ocupadas.

—Por favor. No estoy molesta solo que no quiero responder preguntas. Estoy bien. Solo quiero hacer que nada pase, pero esta marca me lo recuerda todo el tiempo.

Su llanto comenzó. Teníamos semana en la misma. Yo abrazándola y consolandola mientras ella recordaba lo más horrible. Sabía que la había afectado mucho, Philip me contaba y no tenía que ser un detective para darme cuenta que ella estaba afectada.

—Solo quiero que deje de pasar. No pasó nada. No entiendo.

—Ya— le dije mientras le acariciaba su rojizo cabello — Cada quien lidio como puede.

—Es que no lo entiendes. Hemos peleado tantas veces con ella, no entiendo cual es la diferencia.

—No puedes comprarlo. Viste la cara de todos ellos. Eran cinco, pero no tenían miedo de matarnos. Tú lo sabes, sabes que pudimos morir.

—Albus. El té quería muerto. Yo lo vi. Cuando clavó su daga en mi mano, si yo no la hubiera puesto...— su voz se quebró.

Nunca quería hablar de eso. Ni cuando me preguntaron, ella dijo que alguien le lanzó la daga, nunca dijeron que me la querían clavar en la espalda y ella se interpuso. Si ella no hubiera estado ahí, no se qué hubiera pasado, pero se que él quería lastimarme no a ella.

—No tenemos que hablar de eso— le dije —¿Es por eso que no has hablado con ellas?

—Si— dijo —¿Cómo les miento? Diciendo que fue un accidente cuando se que casi te matan ¿A quien mas quisieron matar? A Bridget, tal vez a James. Tal vez sólo tuvimos suerte esta vez, pero la pro mía tal vez si maten a uno.

—No digas eso.

—¡Esto dejó de ser una broma! Ellos querían matarte yo lo vi en sus ojos, no le importaba a qué estuviera de espada.