Totally Captivated ~NamJin~

Capítulo 59: Mío

Los brutalmente serios y elegantes guardias de seguridad cuidaban la puerta de la oficina con una cautela profesional. No era para menos, el Presidente Bang era un hombre que valía millones, había muchos que deseaban la posición que él ostentaba.

Dentro de la oficina, el susodicho se encontraba tomando un vaso de vodka mientras meditaba la situación que se había dado con su ex perro faldero.

—En verdad... el chico nunca falla en actuar en contra de mis expectativas... —En su mano izquierda balanceaba el vaso en alto, y en su mano derecha sostenía su cabeza, hablando hacia el líquido con una sarcástica sonrisa. —No me fue difícil imaginar que, ocasionalmente, podría morder la mano que le dio de comer, pero nunca esperé ser abandonado así...

«¡¿Por qué demonios me estás haciendo esto?!»

La imagen de un iracundo Namjoon llegó a su cabeza, mucho más joven y de apariencia inmadura, vistiendo desordenado. Había sido hace mucho tiempo, la primera vez.

«¡¿Por qué...?!»

—Pasa una cosa, luego otra... y, de pronto, han pasado ya siete años. —El Presidente cerró los ojos y dejó el vaso en el escritorio. —Supongo que ha sido tiempo suficiente para que él haya tenido un cambio de actitud. Muy bien entonces... —Se enderezó, ambas manos cayeron como puños al escritorio y su voz lúgubre cubrió el silencio del lugar. Ya no había rastro de su sonrisa. — ¿Cómo debo lidiar con este malagradecido perro?

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—Ni siquiera pareces tener energía para levantarte y salir afuera. —Taehyung se sentó con cuidado en la cama, al lado de SeokJin, y acarició su cabeza con suma suavidad. Desde los cabellos rubios de la coronilla hasta la pálida mejilla, dejando un pequeño toque en su barbilla. —Vamos ¡Levántate! Vamos por algo de cenar.

SeokJin siguió de espaldas a él y con los ojos cerrados, negando con la cabeza.

— ¡Ugh! Que patético bastardo.

Taehyung resopló con una mueca, tratando de molestarlo y llamar su atención, pero entonces un débil susurro salió de entre el nido de cobijas.

—Tengo frío... tengo frío...

—...

Taehyung le miró con suma tristeza y acerco su mano nuevamente a su cabeza, pero a unos centímetros se detuvo, recordando las palabras de SeokJin. "No puedes hacerlo. Tú eres el único hijo de la familia Kim." Frunció los labios y se mordió el interior de su mejilla, su mano se hizo un débil puño y se alejó súbitamente.

—Voy a decirle al ama de llaves que suba la calefacción. —SeokJin sintió como el peso al otro lado del colchón desaparecía, y Taehyung trataba de volver a hablar con un tono cotidiano. —Que mariquita, temblando como un anciano cuando apenas está comenzando el invierno.

La expresión de SeokJin era vacía, antes de volver a cerrar los ojos y tratar de hundirse más en el colchón.

Apenas Taehyung salió de la habitación, fue recibido por el ama de llaves que ya estaba esperando afuera por él y por nuevas noticias.

— ¿SeokJin-shi quiere saltarse la cena?

—Ah... sí, así es...

—Para un chico que se sirve dos porciones en cada comida, mientras come aperitivos entre ellas, es muy extraño. ¿Qué hay si se enfermó de algo grave? —La señora junto sus manos casi gritándole a Taehyung de la preocupación que la invadía. — ¡Debemos apurarnos y llevarlo al hospital!