Capítulo 75: Totalmente Cautivados

1.6K 182 51
                                    

Los acelerados pasos de Hoseok resonaron en el pulcro piso del hospital, el eco golpeando fuertemente las paredes y regresando a la figura del hombre corriendo, en camisa, sudado y en completa zozobra

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Los acelerados pasos de Hoseok resonaron en el pulcro piso del hospital, el eco golpeando fuertemente las paredes y regresando a la figura del hombre corriendo, en camisa, sudado y en completa zozobra. Finalmente paró al divisar un hombre conocido, sentado en una banca del pasillo de urgencias, con la mirada clavada en sus manos y la ropa manchada de sangre.

—¡¡JIN!! —Hoseok llegó hasta él y lo tomó por los hombros, sacudiéndolo levemente. —El Jefe... ¿dónde está el Jefe? ¿Ya han empezado la cirugía?

—Mmm... —Una enfermera llegó a su lado repentinamente, no se había percatado de su presencia antes, parecía dudosa. —Disculpe, ¿usted está relacionado con el paciente?

—Ah... sí.

—Él está en condiciones críticas porque perdió mucha sangre. —La enfermera hablo rápido, pero lo más claro que se podía. Se acercó más y enseguida le tendió un portapapeles. —Usted tendrá que firmar esta autorización en su nombre.

— ¡¿Qué acaba de decir?! —Hoseok no tardó en alterarse más, si es que era posible. —Entonces nadie ha fir-

—Esa mujer es extraña, Hoseok... —Fue increíble como el susurro de SeokJin se alzó sobre la voz de Hoseok, a pesar de ser tan débil, le envió un terrible escalofrío al cuerpo. —Siguió pidiéndome que firmara... siguió diciéndome que el Jefe podía morirse, así que debía poner mi nombre en ese formulario...

—Jin...

—El Jefe sostenía mi brazo y no me dejaba ir. —SeokJin siguió encorvado en la banca, observando fijamente sus manos con el rojo seco. —Estaba sangrando tanto... parecía estar sufriendo tanto dolor... y sin embargo... le dije que solamente tenía que hacer una simple llamada. —Entonces su voz se hizo pedazos, como probablemente estaba por dentro; y con las salvajes lágrimas dejó escapar un lastimero sollozo. — ¡Le dije que no lo dejaría! ¡Pero...!

Hoseok apenas si alcanzó a reaccionar y sostenerlo de la cintura, cuando SeokJin se abalanzó hacia él, casi cayendo. Tomo su camisa entre sus manos, jalándolo con desespero, suplicándole con los ojos llenos de lágrimas.

— ¡¡¿Qué voy a hacer si muere, Hoseok?!! Si no despierta... si se queda de esa manera... ¡¡¿QUÉ DEMONIOS SE SUPONE QUÉ VOY A HACER?!!

—... —Hoseok le observó, al chico que se sostenía con desespero a su pecho, muriendo de preocupación por aquel que le buscaría hasta el fin del mundo. Contrario a él, eran tan jóvenes, pero parecían haber vivido una muy larga vida, solamente por ese amor. Por eso mismo él lo sabía. —Él va a estar bien. Tú sabes la clase de hombre que es. —No hubo ni un solo atisbo de duda en su voz, ni en el fuerte abrazo que rodeo a SeokJin en esa banca de hospital. —No llores, Jin. Todo va a estar bien...

≈≈≈≈≈≈≈

— ¡Jefe...!

— ¿Jefe, ya despertó?

Totally Captivated ~NamJin~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora