Totally Captivated ~NamJin~

Capítulo 33: Instinto

SeokJin dormía tan profundamente que ni se inmutó cuando Namjoon le dejo caer en la cama como una plasta, rebotó apenas en el colchón y siguió roncando.

— ¿Así que tuviste las bolas para mentirme?

Namjoon se sentó a su lado y continuó fumando sin esperar respuesta del rubio. Sólo se quedó observándolo incrédulo, se había quedado sin palabras ante el desastre que parecía ser SeokJin en ese momento.

—Mmm...

— ¿Mm?

Al cabo de un rato SeokJin empezó a removerse un poco y medio entreabrió los ojos adormilado.

—Jefe. —Logró enfocar a Namjoon a su lado, quien le miraba expectante. —Espera, tú no eres ningún jefe para mí. Después de todo, somos compañeros de la primaria. —Levantó su mano y agitó divertido su dedo índice, riéndose un poco mientras hablaba. — ¿No quiere decir eso que podría tratarte de amigo a amigo? ¿Cierto?

—Miren esto...

—Namjoon... —El susodicho se había molestado por la burla que le estaba haciendo SeokJin ebrio pero abrió los ojos sorprendido cuando escuchó que lo llamó por su nombre por primera vez. —Jejeje, me gusta el sonido de eso. Namjoon. —Sin embargo, perdió por completo el encanto por la odiosa risa de SeokJin. —Namjoon~~~~

—Adelante, disfrútalo. —Ya fastidiado por lidiar con el ebrio, se abalanzó sobre él en la cama y subió el borde de su camisa y saco, dejando su pecho al descubierto. —Te veré cuando te despiertes.

Paró en seco cuando se disponía a atacar su piel al ver un par de marcas rojizas sobre esta. — ¿Qué demonios es...? —Quedó estupefacto, pero antes de reaccionar por si solo el timbre de un celular le despertó.

Tomó el celular de SeokJin y leyó el mensaje que le había llegado.

«Como eres alto, pensé que eras un activo.»

Se podía ver completo a pesar de la pantalla bloqueada. Enseguida llegó otro, ocultando el primero.

«Te habría atacado si hubiera sabido que eres un pasivo. Le doy a ambos lados ¿sabes?»

Namjoon se puso alerta y de inmediato llegó el último mensaje.

«De todas formas, me divertí esta noche. Llámame cuando tengas ganas de ponerle los cuernos.»

Decir que Namjoon gruñó como bestia salvaje que acababan de provocar es poco. Porque había sido exactamente así.

— ¡Hey! Despierta.

—Mmm... —SeokJin que había vuelto confiadamente a su mundo de sueños, escuchaba lejana la voz de Namjoon y definitivamente no quería despertar.

— ¡Despierta, pequeño vándalo! —Pero no era su decisión. Quedó completamente despierto tras sentir una fuerte bofetada de parte de Namjoon, quien estaba sentado sobre él y le tenía del cuello de la camisa.

— ¡¿Por qué fue eso?! —Se llevó una mano a la cara y se alcanzó a sentar en la cama, le iba a reclamar a Namjoon su agresividad pero pegó un grito ahogado al ver la expresión de furia asesina en él. —Oh... Jefe... —El miedo le inundó. Ya estaba totalmente sobrio. — ¿Qué demonios...?

—Te doy cinco segundos para explicar qué mierda es esto. —Namjoon levantó el celular frente a la cara de SeokJin, con el último mensaje a la vista. El rubio se sorprendió al leer, enseguida llegando a su mente la imagen del pelinegro que conoció en el bar.

—Uh...

—Uno.

—Bueno, verás...

—Dos.