Desafiando al Destino (Trafalgar Lawx___)

Estabilidad

-¡ERES UN INCOMPETENTE! El acuerdo ha terminado- dijo el anciano jadeando, sostenía del hakama al hombre moribundo, la sangre le escurría por la cara los rasgos faciales eran irreconocibles. El anciano dejó caer el cuerpo, trató de caminar para aclarar sus ideas estaba desconcertado, la fuga de esa información no estaba en sus planes, se había confiado. El haber dejado el pergamino en custodia del rey de Monria fue un error irreparable, había perdido su caballo, pero aún tenía la torre en su jugada.

-¿No crees que estas exagerando?- dijo un hombre de edad media, estaba recargado sobre una de las columnas que rodeaba la sala de estrategias del castillo, una de las construcciones majestuosas y elegantes del Nuevo Mundo, las enormes cúpulas de mármol lo hacían imponente y sus grandes portones de hierro lo hacían impenetrable.

-¡CALLA! Te deje en este lugar con órdenes específicas- dijo el anciano iracundo.

-No creí que fuera para tanto- respondió el hombre sin importarle en lo absoluto la furia que mostraba su compañero.

-¿Crees que exagero? ¿Acaso no entiendes la magnitud de tu error?- dijo el anciano sosteniendo con fuerza su katana.

-Vegapunk te dio el candado y tú tienes la llave.- dijo el hombre sin perder la compostura, esto altero al mayor.

-Sinvergüenza, si ella se hace de la katana será nuestro fin. No importa si tengo la llave- dijo el hombre quería rebanarle y acabar con la existencia de ese hombre.

-Piensa mejor las cosas, sigues con vida porque lo deseo. El gobierno tiene la culpa en depositar su confianza en los poderes de las frutas del diablo- dijo el hombre en tono burlón.

-¿qué conozca mi lugar? Muchacho, tu desconoces mi fuerza. Aunque acabes conmigo el vendrá por ti. Y no será tan generoso como yo- dijo el anciano una gota de sudor resbalo por su frente.

-Me tiene sin cuidado, él no puede conmigo. El gobierno no puede con Monria mientras yo esté aquí. Me importa un bledo si ella se hace de la arma, será más interesante para mí. Estoy harto de vivir de esta forma, es más interesante cuando chocan dos voluntades. Si no fuera como yo digo, entonces responde ¿Por qué no has dado la orden para que inicie el Buster Call?- dijo el hombre mirando al anciano fijamente, sus penetrantes ojos rojos eran intimidantes.

-El gobierno no tendrá trato con ustedes. Estás solo. Además el Rey ha caído- dijo el anciano desenfundado la katana para decapitar al moribundo rey.

-Una marioneta que se puede remplazar- dijo el hombre sin mostrar alguna emoción ante el hecho ocurrido. El anciano agito la katana para quitar el exceso de sangre y enfundo. La puerta de la sala se abrió para dejarle salir. En el pasillo sacó un denden mushi

-Monria ha caído- dijo el anciano del otro lado no hubo respuesta. El anciano siguió su camino iba furioso, no había más que problemas. Roger había desatado la Nueva Era, el gobierno desconoce el paradero de Plutón, el anuncio del despertar de Poseidón y Urano estaba fuera de su alcance. Había un gran desbalance en el mundo y todo apuntaba a un gran cambio. Y ese cambio no lo iba a tener el Gobierno Mundial, pero si trabajan arduamente para que así fuese.

-¿Cómo le fue mi señor?- dijo Rob Lucci saliendo de las sombras.

-Nada bien. Debimos exterminar su Clan cuando tuvimos la oportunidad- dijo el anciano

-Si quiere mi señor, yo puedo encargarme- dijo el joven ansioso.

-No serías ni su aperitivo-

-¿tan fuerte es mi señor?-dijo Lucci ya que al no le había parecido. Es más no entendía por qué el Gobierno Mundial trataba con pinzas el país de Monria, si su rey era patético y sus habitantes en su mayoría eran campesinos. En lo único que destacaban era en la producción agrícola, exportando materia prima a todas partes del mundo con la ayuda del gobierno. Esa era la fachada de Monria, bajo esta yacía un poderoso imperio militar.