Paladines, seres de leyendas que fueron escogidos por la diosa para vigilar el mundo por ella.
Personas de todas las razas que durante su vida fueron tan reconocidos incluso a día de hoy se les describe como mitos por sus numerosas hazañas.
Actualmente existen siete paladines y una santa.
La santa Vanessa, reconocida por ser la única que incluso con una vida llena de desgracias se mantuvo firme a sus creencias, siendo elevada prácticamente al estatuto de deidad, ya que ella es la médium entre la diosa y los paladines.
Los paladines por su parte se encuentran conformados por:
Zephyrinus, actualmente el líder del grupo y el héroe que logró sellar al rey demonio.
Aeneas, de raza élfica y la mejor arquera de la historia, siendo capaz de defender su pueblo ella sola contra innumerables hordas de demonios.
Evander, perteneciente al clan de los dragones y aquel que unifico a los mismos.
Kosmos, la maga humana que adquirió la capacidad de ver el futuro.
Linus, el elfo que dominó la oscuridad y la venció, además de ser el causante del sellado de los elfos oscuros.
Niles, la primera dragona.
Rhodes, el caballero santo más poderoso de la historia.
Actualmente, Zephyrinus se encuentra sorprendido y totalmente conmovido, ya que han sido invitados a lo que ellos consideran el cielo, un lugar totalmente creado con nubes, donde a una cierta distancia a su derecha se encuentra su diosa.
Reconociéndola de inmediato, todos los paladines aparecen frente a ella y se arrodillan, nadie sería capaz de negar la divinidad de la diosa Ceres, la más grande de los dioses.
—Estos son mis leales guerreros —menciona Ceres visiblemente nerviosa.
Todos se encuentran desconcertados ante el estado de su diosa, por lo voltean hacia la izquierda, donde se encuentra un hombre de unos veintitantos años con cabello totalmente blanco y ojos rojos, un cuerpo delgado que se encuentra cubierto por vestimentas de cualquier aldeano promedio.
Sentado en un trono mientras en cada una de sus piernas hay una niña de unos cinco o seis años, las cuales se encuentran tomando una especie de jugo.
Apostados a sus lados izquierdo y derecho, se encuentran un ángel y un hombre humano de larga cabellera negra.
—Zavebe, ¡Más! —exclama una de las niñas, la niña posee un cabello negro azabache y unos ojos igualmente rojos.
—Hermano, Lucifer está de glotón —recrimina la otra niña, una de cabellos rubios y ojos del mismo color que su hermano.
El ángel hace aparecer un jarrón y se aproxima a la niña pelinegra llamada Lucifer, misma que sonríe ante su capricho cumplido.
Aquello le parece inaudito ante Zephyrinus, el cual no puede ver sino como aquellos simios manchan el territorio sagrado, sumado a eso, no pudo ver aura divina alguna o siquiera un maná digno para alguien llamado por la diosa.
Pero, ¿Por qué dijo que habría otro dios?
La santa Vanessa se aproxima ante aquel hombre, con una expresión de severidad, una vez llegó frente a aquel hombre, este mismo levanto la mirada con desinterés total.
—¿Podría guardar la respectiva postura? Está frente a una diosa, mortales como usted o yo no tene-
Antes de que lo supiera, Vanessa tenía una espada cerca del cuello y una pistola pegada en su nuca.
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Crónicas de una Lich
FantasyDe repente, me encuentro frente a un dios que me ofrece la oportunidad de ir a otro mundo. En un mundo lleno de razas y magia, nosotros aparecimos en distintos lugares dado que todos nos encontramos en la cima de nuestra respectiva especie. En mi ca...