Overlord + HELLSING

Parte 4

Delante de él en la enorme pantalla se podía ver la ciudad de Londres, pronto llegaría a su objetivo. Sus soldados -Das Letzte Bataillon- estaba ansioso por iniciar la guerra, esa que tanto se les prometido y  que ahora, en esta noche, se volvería realidad después de tantos años de preparación.

El coro de sus hombres inundaba los oídos, el grito de guerra, el saludos a su amo, el puño alzado y el golpe al piso.

¡QUÉMENLO, QUÉMENLO! QUÉMENLO TODO, QUE ARDA HASTA VOLVERSE CENIZAS.

¡DESTRUYAN LO, DESTRUYAN LO! LA TORRE, EL PUENTE, EL MUSEO, LA CIUDAD!

¡QUE MUERA CADA HOMBRE, MUJER Y NIÑO!

¡QUE LA CIUDAD SE PINTE DE SANGRE!

¡QUE VIVA LA GUERRA!

¡QUE VIVA LA VICTORIA!

El mayor que miraba atento el vitoreó de sus hombres, sonreía de manera amplia ya que en su ser era lo mismo, la emoción de la guerra lo embriagaba. Embriagaba cada parte de su cuerpo.

"¡Señores!"

Grito, ante la voz de su amo todos guardaron silencio, como su Comandante Mayor cada uno regreso a su formación y presento su respeto, mismo que fue respondido por él.

"A llegado la noche prometida, ha llegado el día en que el mundo recordara nuestro nombre, vera nuestro regreso. El día en que Inglaterra conocerá la derrota.

Los gritos se hicieron presentes, el Mayor tuvo que calmarlos de nuevo.

"Esta noche no hay perro que cuide de la casa... la corona. El perro murió hace diez años."

"COMAN, BEBAN, MATEN, DESTRUYAN TANTO COMO PUEDAN. ESTA NOCHE ES NUESTRA. EL INFIERNO LLEGO A EUROPA!"

El Mayor sostenía una copa en su mano, todos le miraron con atención.

"¡GESUNDHEIT!"

Con esa palabra dejo caer la copa y con ella, las llamas  del infierno llegaron a la Tierra.

--II--II--

La situación actual era un caos, la ciudad estaba cubierta por el rojo de la sangre y el fuego, los ghoul's caminaban por todos lados y los vampiros nazis destruían y devoraban todo a su paso.

Los caballeros de la muerte ayudaban a sacar a cuanto civil quedara con vida y a destruir a esos vampiros, prácticamente era una tarea fácil para ellos, el partirlos en dos con sus espadas y cuando eran abrumados por esos seres inferiores hacían uso de sus escudos torres para mandarlos a volar.

Desde lo alto podía verlo todo, las calles y edificios destruidos, la avanzada del enemigo y el retroceso de los humanos mientras que en el cielo nocturno podía ver naves, Zeppelin para ser exacto.

Varias de ellas se mantenían en su lugar, otras daban vueltas en un solo punto mientas la que creía que era la principal se mantenía al margen.

A donde viera era una masacre.

No le agradaba para nada, el estar envuelto en esto no le traía ningún beneficio. En cambio lo exponía a enemigos desconocidos que - en el mas paranoico de los casos- lo pudiese matar y él por ahora no quería morir. 

"Por que... estas cosas me tiene que pasar a mi."

Se dijo a si mismo lamentando la situación, deseaba por primera vez regresar a casa. Regresar con urgencia a Nazarik.

"Señor, el radar ha detectado un objeto pequeño que flota sobre esta área. al parecer solo se pudo detectar por que ya lleva tiempo estático en el lugar."

Hablaba con el superior, el radar mostraba un punto pequeño en la pantalla.

"Quiero visibilidad, quiero saber que es."

Ordeno a vigilancia y comunicaciones.

El conjunto de pantallas mostraba un objeto pequeño y blanco, algo 'humanoide' que flotaba en el aire y se mantenía pasivo en el lugar. Extrañados decidieron observar más el objetivo.

Era algo pequeño, pero se podía ver que era un hombre, no podía ver su cara ya que estaba cubierta por tela blanca y su cabeza cubierta por una capucha, aunque su ropa blanca podía darle una idea de a que bando se relacionaba.

"¡ISCARIOTE, LOS ASESINOS DE ISCARIOTE ESTÁN AQUÍ!"

Llamo a comunicaciones.

"Contacta con el Mayor y dile que ISCARIOTE esta en Londres. Manda imagen a la base de operaciones, esto ya es trabajo de los Lobos."

"¡señor, si señor!

Antes de poder hacer algo más, la nave exploto en el aire.