En la Boca del Lobo

Capítulo 4

Mi cabeza me retumba, cuando consigo abrir los ojos ahí está ese hombre, mirándome, el hombre que vino ha hablar con nosotros en la celebración de la boda, estoy a solas con el en una habitación pequeña que parece de madera, me asusto y me siento rápido en la cama, el está en una silla sentado hacia mi.

- Tranquila. – dice con pasividad
- Dónde estoy?? Quién eres tú?? Dónde está Liam?? Me has secuestrado?? – pregunto con miedo.
- No! No estás secuestrada, tranquila, te lo voy a explicar todo, pero las preguntas de una en una. – dice intentando calmarme. – yo me llamo Takaqua, cómo os advertí anoche, hay animales peligrosos…
- Anoche?? – le interrumpo.
- Llevas durmiendo toda la noche, hace un buen rato que amaneció.

Lo miro prestando atención a su explicación y pero me pierdo en sus gestos, en sus ojos y eso que me saca al menos 20 años.

- Estás en una cabaña, en mitad del bosque, nuestra intención es protegerte, está cabaña está a prueba de animales salvajes, ellos están ahí, no debes salir o te mataran. – parece que habla en serio.
- Dónde está Liam??
- Él está bien, está a salvo
- Le habrá pasado algo a alguno de nuestros invitados?? – pregunté asustada
- No, solo te buscan a ti. Sabes por qué?
- A mí?? A mí por qué?? No los había visto nunca… No tengo nada que ver con animales salvajes!! Vivo en la gran ciudad, vine al pueblo solo para casarme por qué mis padres viven aquí… No entiendo nada…

El vestido me aprieta y me estoy agobiando con todo esto, necesito hablar con mis padres “Donde está mi móvil?? No puede ser!! se lo di a Liam” me echo las manos a la cabeza, me desespero.

- Me puedes prestar tu teléfono móvil? Necesito hacer un par de llamadas. – le suplico
- No, lo siento, no tengo móvil.
- Que no tienes móvil? Quién no tiene móvil hoy en día? Hay teléfono fijo aquí??
- No estoy familiarizado con las nuevas tecnologías, lo siento. – parecía sincero. – quienes son tus padres? Puede ser que todo esto tenga algo que ver con ellos, pero no te preocupes por ellos, hemos comprobado que solo te persiguen a ti.
- Estupendo! Y que se supone que tengo que hacer entonces? – pregunté irritada.
- Necesito que me facilites todos tus datos y los de tus padres, voy a reunirme con el líder para intentar averiguar de qué se trata todo esto.
- El Sabio?
- Si, es como llamamos al alcalde de nuestra aldea donde vivimos, cerca del lago, en el bosque.
- No vives en el pueblo?
- No, de echo el pueblo está lejos si vas a pie. Se que esto te resulta un poco difícil de entender, pero necesito algo de tiempo, y con tu ayuda lo solucionaremos.
- Bueno, se supone que estamos de luna de miel, así que nadie nos echará de menos hasta dentro de dos semanas por lo menos…

Le facilito todos mis datos personales, los de mis padres, dónde vivo y dónde viven mis padres, a que se dedican, el tiempo que llevo aquí en el pueblo, respondo a todas sus preguntas. Es muy amable, caballeroso y atento, además de atractivo.

Yo intento situarme... Si  solo me persiguen a mi, supongo que es normal que tengan a Liam en otra parte, pero tiene que haber algún malentendido, yo no tengo nada que ver con esas bestias.

Todo esto me quedando grande y el vestido apretado, necesito una ducha, habrá que verme los pelos que llevo…  me miro el vestido, está sucio y algo roto. “mi vestido”

- Supongo que necesitas asearte. – acierta Takaqua. – tenemos baño aquí y agua caliente.
- No tengo ropa aquí, no?
- Si, yo te la traje anoche, en lo que mi hijo te traía a ti.
- Tu hijo?

Un portazo suena dentro de la casa, fuera del dormitorio.

- Ya estoy aquí con provisiones, Papá!! Se ha  despertado Blancanieves??

Dijo el que parecía ser el hijo de Takaqua, e inmediatamente después apareció por la puerta del dormitorio…