Capítulo 30

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Llegamos al edificio, todos les miraban un poco extraño a Zac porque era un poco alto de lo normal y parece intimidante gracias a su altura. Él no parece darse cuenta porque miraba cada detalle del lugar y llegamos al living donde se juntan siempre para presentar a Zac. Abrí la puerta, estaba Elsa cargando a Tyler y se volteó para ver quién abría la puerta y su cara cambió cuando vió que era yo.

- Veniste! - sonrió aliviada y asentí con la cabeza un poco apenada.

- Lo siento, pasaron muchas cosas. Este es un amigo mío, Zac. Ella es mi compañera de cuarto, Elsa.

- Hola - saludó Elsa con tímidez y Zac hizo la reverencia con la cabeza.

- Aquí estás, mi bebé - agarré a Tyler, él enseguida me abrazó y escondió su cara en mi hombro como de costumbre.

- Es Tyler? - me preguntó Zac intentando ver su cara sin incomodarlo pero fue en vano.

- Tyler, saluda a Zac - le hablé en tono suave y luego lo saludé para que Tyler hiciera lo mismo.

Tyler volteó su cabeza, se quedó mirandólo por un rato, le saludó con su mano chiquita y apoyó su cabeza en mi cuello en señal de tímidez. Zac se mostraba asombrado, sonrió para ganar su confianza. Miró a ambos para saber si nos parecíamos o no.

- Se parecen bastante - asintió Zac todavía perplejo.

- Viste? Esa belleza lo heredó de mí - sonreí orgullosa.

De repente entró Derek con sus amigos de siempre, se detuvieron en seco al vernos y Zac levantó su mano para estrelazar con la mano de Derek. Sonrieron y empezaron a hablar como los viejos tiempos. Antes de que se fuera Derek, era muy amigo de Zac porque siempre practicaban juntos. Zac es bueno con las artes marciales casi como un profesional y Derek, también es bueno en esto pero a él le gusta luchar con fuerza brutal y parece más como un boxeador.

- Tanto tiempo sin verte, Zac.

- Digo lo mismo, Derek. Vine para cuidar a Allisson - le dijo como si nada y sonreí con inocencia.

- Supongo que las cosas no salieron tan bien o me equivocó? - habló Derek arqueando una ceja.

- Podemos hablar a solas? - le pedí y Derek asintió con la cabeza.

Fuimos a su oficina, me senté en el sillón un poco nerviosa sobre cómo reaccionará si le digo todo. Derek estaba parado enfrente de mirandóme mientras esperaba que dijiera algo y rompí el silencio, le dije todo sobre Edward y lo del embarazo, todo. Derek seguía sin reaccionar, no puedo adivinar qué está pensando de todo esto. Lo escuché suspirar, ladeé la cabeza nerviosa y él me miró a los ojos, se encogió de hombros y luego sonrió débil.

- Supongo que las cosas salieron de este modo.

- Qué? Eso es todo lo que tienes que decir? - le dije intentando disimular mi decepción y pensé que me diría una respuesta distinta.

- No estamos destinados a estar juntos después de todo.

- Pero yo... - mordí la mejilla desde adentro intentando contener las lágrimas.

- No podemos estar juntos como una pareja normal. Cuando lo intentamos, las cosas salen fuera del control y especialmente tú estás casada. No hay vuelta atrás.

- Pero sabes porque nos casamos!

- Lo sé, se casaron para evitar problemas en el futuro. Edward hizo algo inperdonable pero el hecho ya está. No me digas que tú tambien quieres hacer lo mismo por venganza.

- Por qué debería importarme esto? - fruncí el ceño enojada.

- Allisson...

- La verdad es que yo quiero estar contigo y no con Edward. Ahora sabes de mi condición, querrás estar conmigo igual? Eh? - me levanté del sillón con una expresión desafiante.

¿Otra vez? ¿Sirvienta?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora