Capítulo 34

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Pasaron varias semanas, todo iba normal, mi panza cada vez crece y se me nota un poco. Ahora llevo ocho semanas, el doctor me dió una lista de comida y mejoré bastante porque vomitaba mucho y ahora ya no. Mis pechos se han vuelto grandes y también mis hormonas subieron que antes.

La única cosa que quiero es saber el género de mi bebé. Derek es muy atento conmigo, es un hombre ideal y muchas mujeres querrán tener uno así en su vida. Ah tuve cartas de Edward, decía que le había gustado el nombre Vincent. Si naciera una niña, quiere que se llame Gabrielle. Nada mal, me gusta ese nombre también. Agradezco que no hubo peleas. Tyler creció bastante, me gusta que cada vez se parezca más a mí que a sus padres. Excepto su timidez, seguramente lo sacó de su madre.

Todo iba normal, me preocupaba porque las cosas iban demasiado bien para mí pero el tiempo pasa, mi preocupación cada vez era menos y espero que dure un poco más pero tengo un presentimiento que va a pasar algo muy grande.

Sentí naúseas otra vez, fui al baño y vomité como siempre lo hacía. Eso me pasa por preocuparme de cosas inecesarias. Veo a Derek viniendo hacia mí preocupado.

- No te acerques mucho - le pedí.

- Por qué? Todo está bien?

- Si, sólo son naúseas. No es una novedad. Mi cuerpo está muy sensible, si me tocas, quizá pierda la cabeza - me disculpé mirándole con ganas de devorarlo.

- Oh, Allisson - me entendió al instante.

- Me molesta...

- Te duele la panza?

- No! El presentimiento, todavía pienso en eso. Me pregunto qué pasará esta vez - casi exclamo pero me controlé porque él no tiene nada de culpa.

- Mejor no pienses mucho en eso.

Me ayudo a levantarme, me dejó en su cama mientras se acostaba a lado mío mirándome y acariciaba mi pelo para tranquilizarme.

- No podemos hacerlo? - le pregunté casi suplicando.

- Qué? No, hace segundos estabas vomitando. Cuando estés mejor, quizá lo hagamos - negó con la cabeza.

- Por qué no me tocas ahí abajo? Me siento incómoda - insistí como si mi vida dependiera de ello.

- Ali, duérmete ya.

Puso su brazo en mi cuello como almohada, lo abracé mientras nuestras piernas se entrezalaban. Alguien golpeó la puerta desde afuera y dijo que era Carter. Tuvo que irse porque no quería que escuche la conversación y eso me enoja pero me parece justo, me pongo ansiosa por todo. Es entendible.

Me acosté un rato porque me sentía agotada, pasaron varios minutos, escuché ruidos extraños y tuve que despertarme. No había nadie, me puse a pensar que estoy siendo paranoica o realmente escuché esos ruidos. Me levanté de mal humor porque literal no pude dormir nada. Abro la puerta, Elsa estaba buscándome como una loca y su cara se alivió al verme y corrió hacia mí.

- Allisson, no me lo vas a creer...

- Escúpelo.

- Tu esposo está aquí.

Abrí los ojos sorprendida porque no me lo esperaba que viniera tan pronto. De la nada, me puse nerviosa porque estaba pensando en cosas no muy agradables.

- Tengo que verlo, dónde está?

- Está en tu pieza, dijo que había venido por ti.

- Cómo mierda supo que estaba aquí? Jamás le dije la ubicación.

¿Otra vez? ¿Sirvienta?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora