¿Otra vez? ¿Sirvienta?

Capítulo 20

Volví corriendo porque Camilo me mandó un mensaje que quería dárselo el arma en la cocina. ¿Por qué en la cocina? Debe estar tramando algo porque es un lugar público y quién sabe qué pasará. Al final no sucedió nada entre Derek y yo, no era el momento para hacer bromas y no pude evitar ponerme un poco triste porque él está muy cambiado y solíamos ser muy cercanos.

Estoy muy consciente que fui yo la que corté los lazos pero todavía sigo teniendo esa sensación de culpabilidad. Debo estar estresada por lo que está pasando últimamente, vine para despejar la mente y no trabajar. Entonces... ¿Qué carajo estoy haciendo aquí?

Llegué a la cocina, ví que había algunas personas, me concentré viendo a dos chicos al fondo Ryan y Nathaniel. Ese muchacho se reía como si fuera el simpático y nadie sospecharía de él. Como estaba de mal humor, me acerqué a ellos de una vez y agarré a Ryan desde el cuello de la camisa.

Al principio se asustó, luego se hizo el que no entendía que pasaba y eso empeoró mi humor. Sonreí porque me recordé que había gente alrededor de nosotros y tuve que arrastrarlo hacia un lugar para tener privacidad. Cuando llegamos, tuve que patearlo de la nada y él soltó un quejido de dolor. Nathaniel sólo tragaba saliva nervioso sin saber qué hacer con la situación.

- Vayamos al grano porque no estoy de buen humor. Si quieres seguir vivo, será mejor que hables sin rodeos - le amenacé directo y Ryan se quedó sin palabras.

- No sé de qué me hablas - habló Ryan confundido pero el problema es que no sabe fingir y su cara lo dice todo.

Saqué el arma de la mano de Nathaniel, lo disparé en su pierna en un abrir y cerrar los ojos, él iba a gritar pero le dí un puñetazo antes y ví que escupió sangre y le dificultaba moverse. Nathaniel estaba bien pálido y no podía creer lo que estaba viendo.

- No estoy jugando, niño. La próxima vez será tu brazo o tu Ryancito. Estoy segura que sabes a qué me refiero eso - señalé su parte íntima y él se quedó congelado. Ahora sabe que conmigo no se juega.

- Victor - soltó de repente mientras empieza a temblarse de miedo.

- ¿¡Quién mierda es Victor!? - le grité con rabia y me doy cuenta que cada vez estoy perdiendo la cordura pero eso no me importó.

- Un amigo de Carter - se interpusó Nathaniel incrédulo, aplaudí como una loca enferma y lo agarré desde la camisa para ponerse de pie y él caminaba como si fuera un pirata con una pierna.

Abrí las puertas sin su permiso, entramos al living donde suele juntarse con sus amigos. Estaban Derek, Ashley y Max hablando mientras se reían, cuando nos vieron, sus sonrisas se esfumaron y se pusieros serios excepto Ashley que no entendía nada.

- ¿Qué? El culpable que está detrás de todo eso, es alguien llamado Víctor y Nathaniel diji que es un amigo de Carter - solté directo mientras lo lanzaba bruscamente a Ryan como si fuera un saco de papas.

Sólo hubo un silencio, Ashley entrecerraba los ojos varias veces y miró a Derek esperando que diga algo en respecto. Salí del living sin el consentimiento de nadie y fui hacia mi habitación y decidí irme de acá porque no vine a trabajar y me quedé aquí por Derek pero las cosas están fuera del control y estoy obligada a trabajar para él. ¿Quien se cree que es? Saldré de aquí, no creo que pueda quedarme por más tiempo. Fue un error salir del castillo y sólo empeoré las cosas. Quiero ser libre de responsabilidades aunque sea por un momento.

Terminé de guardar mis cosas en mi mochila, me puse peluca rubia y lentes. Camino cuidadosamente para que no me pillen antes, me escapé por la ventana chica, miré hacia abajo, está la caja gigante que tira la basura. Esta vez tengo suerte porque la tapa está cerrada y tendré que saltar desde el segundo piso sin problemas. Salté como una heróe sin miedo.