My little Girl (Uta no prince-sama Fanfic)

Las Cosas Claras...

¿Que es ese sonido? ¿Porque no me dejan dormir un poco? 

Solo quiero disfrutar esta tranquilidad...ya no quiero volver a sufrir. 

"¡Aoi! Por favor regresa" 

Abri los ojos al reconocer aquella voz...había pasado muchos años desde que la escuche.

-¿Eres tu, papá? 

No podía ver nada, todo estaba oscuro y mi voz hacia eco.  A lo lejos pude distinguir una figura que brillaba entre la oscuridad, pero a cada paso que se acercaban pude notar como aquella figura se dividía. 

"Aoi..."

Al ver como reconocía ambas figuras me levante con dificultad y corri hacia ellos, mis padres.

-Papá, papi. 

Ambos me sonrieron, pero el primero que me abrazo fuertemente y con lagrimas en sus ojos fue quien perdí desde pequeña. 

"Mi pequeña, por favor perdóname por no haber sido fuerte para ti y tu hermano" 

Las lagrimas comenzaron a resbalar por mis mejillas, y le correspondí el gesto. 

"Es bueno verte mi girasol" 

Me gire a ver a mi otro papa, el me acaricio la cabeza mientras seguia siendo abrazada. 

-Los extraño mucho.

Aumentaron mis lagrimas, y ambos ahora me abrazaron fuertemente. 

"Tienes que ser fuerte, pequeña. Tu desde que eras una tierna bebe emitías un radiante luz que transmitía calidez. No dejes que esto de destruya, eres mucho mas fuerte de lo que crees"

"El tiempo que estuvimos juntos fueron los mejores mi girasol, siempre con una sonrisa y con una actitud irrompible. Tu siempre fuiste mi motivación para continuar...hasta el ultimo momento de mi vida"

Mientras aun mas disfrutaba la calidez de ambos, sentí como poco a poco ellos comenzaron a desvanecerse.

"Siempre estaremos contigo" 

Al ver como mis padres pasaron a ser unas llamativas luces, sentí como si una extraña fuerza comenzara a nacer dentro de mi. 

-Muchas gracias, papás. 

Y justo en ese momento aquel oscuro lugar se lleno de luz, y un camino se formo debajo de mis pies. Lo seguí sin dudar. 

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Al abrir nuevamente los ojos, vi como una persona se encontraba sosteniendo mis manos y me miraba con una sonrisa. 

-Es bueno verte, Aoi.-Me acerco a ella, y me abrazo fuertemente. A pesar de que no la conocía, algo en ella me daba una extraña confianza. 

-¿La conozco? -Pregunte aun en brazos de ella. 

-Mi nombre es Seili, y soy quien te entrego el libro de Moon.-Al decir eso, no pude evitar emocionarme.- Ambas estamos muy felices de que regresaras, Aoi.-Me dio un fuerte apretón para despues soltarme. 

-Es un gusto conocerla, al fin.- Dije mientras daba una pequeña reverencia.

Ambas nos miramos por unos segundos, el cielo aun era oscuro, hasta ahora no me había preguntado... ¿como había llegado aquí? 

-Aoi, tendrás que acompañarme...-Asentí sin dudar. Ella se rió.- Deja que termine. Tendrás que acompañarme a la tierra de Moon, necesitas ser una mejor cuidadora para ella.-Su dulce voz se transformo en una severa, no pude evitar agachar la mirada avergonzada.- Ella es una diosa quien te presta su poder, y tu su cuidadora quien se encarga de prestarle tu fuerza vital para que ella pueda compartir su poder, tu debes cuidarla no al revés, Aoi. 

-Pero que pasara con mis ami...-guarde silencio por un momento.- Mi mama, ¿le puedo avisar a donde ire para que no se preocupe? y a mi jefe. 

-No hay problema. Pero tendrás que hacerlo en el camino.-Dijo ella mientras caminaba por un lado mio. 

Al seguirla con la mirada, observe que nos encontrábamos en la casa de mi abuela. La seguí con cierto miedo, y justo en la puerta ahí se encontraba.

-Veo que la es traído de vuelta.- Dijo ella sin mirarme.

-Si, ahora tenemos que irnos como le dije.- Comento ella y me tomo del brazo.- Gracias por ayudarme a venir.

Ella se quedo en silencio. Seili me tomo de la mano y caminamos hacia la salida.  Algo me decía que volteara a ver a mi abuela, y asi lo hice, sorprendida vi como una lagrima resbalaba por su mejilla. 

La noche se acababa poco a poco, y sin darme cuenta ya nos encontrábamos en el aeropuerto y listas para salir con ayuda de las influencias de mi abuela.

-¿Estas lista para irnos? 

La mire por unos segundos, ya había hablado con Shining y con mi madre, y aunque me sorprendiera, ambos estaban de acuerdo. Shining se encargaría de avisarle a Raging. 

-Si, estoy lista.

Me tomo de la mano y juntas caminamos para subir al avión. 

No sabia cuanto tardaría en regresar, pero estaba preparada aguantar todo con tal de ser alguien capaz de cuidar de mi única amiga, Moon. 

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Fin...?

¿En verdad todo puede terminar de esta manera? 

Muchas gracias por seguir esta gran historia, las amo a todas!