26 parte 2

70 14 13
                                    


Anya

Mi respiración aun estaba acelerada había hecho demasiado deporte en un día. Al salir del ascensor camine por las calles y recuerdos borrosos llegaron a mi mente.

Flashbacks

Podía sentir sus manos recorrer mi cuerpo, provocándome repulsión. Además aquel vestido corto no cubría demasiado y por la gran cantidad de alcohol era difícil poder defenderme.

-No quiero- mis palabras se arrastraban y por más que trataba de moverme o alegarme mi cuerpo no respondía.

-Quédate tranquila hermosa, no dolerá - su voz sonaba ronca y demandante, seguía besando mi cuello y mintiendo sus manos al interior de mi vestido tocando mis partes intimas de manera brusca y desesperada.

¿Por qué mi cuerpo no reaccionaba, qué había en ese trago?

Las lágrimas caían y yo solo quería que se detuviera, que todo fuera una pesadilla.

Me besaba de la misma forma descontrolada y su lengua recorría mi boca sin mi permiso. Su rostro era borroso ante mí y mis brazos cada vez se sentían más pesados.

Tenía que salir o gritar, pero el ruido de la música era tan elevado que nadie vendría por mí.

-Por favor... - mi voz se quebraba y comencé a sollozar- no qui...ero detente.

-¡Cállate maldita zorra!-bramo y golpeo mi mejilla, el dolor se entendió por toda mi cara como mil agujas esparciéndose y retumbando mi cabeza por el fuerte impacto.

***

No sé si pasaron minutos u horas, escuche la sirena de policías y el desgraciado se vistió rápido y salió corriendo. Yo estaba entre inconsciente y alguien me saco de esa habitación envuelta completamente por una manta. Al llegar al hospital pudieron revisar las agresiones, por suerte no había alcanzado a penetrar, pero me había drogado colocando algo en mi vaso. Por lo que dijeron los policías una persona llamo de manera anónima y dijo que estaban abusando de una chica.

Fin del Flashback

Nunca tuve el valor de hacer la denuncia, después de colocarme suero y limpiar la herida de mi mejilla, solo me enviaron a casa, pero mientras estaba ahí envuelta aun en esa manta que cubría mi cabeza, podía escuchar aquellos susurros.

-No creo que la hayan estado violando, por la manera en la que se viste y el nivel de alcohol en su sangre... lo dudo debe ser de esas típicas chicas fáciles y se está tratando de hacer la víctima es obvio.

- Se nota que es suelta... quizás el chico tiene dinero y le quiere sacar.

Ni el personal médico tenia la mas mínima discreción, trataban de mirar mi rostro por debajo de la manta y pasaban lentamente frente a mí.

Cuando llegue a mi casa no pude evitar llorar y sentirme sucia, como una basura y sentirme culpable, aunque fuera la victima de esa situación. Estaba sola como siempre mis padres de viaje y al volver qué les diría, conociendo a mi papá no me creería y pensaría lo mismo que aquellas enfermeras, para proteger su imagen no dejaría que nadie más se enterara,. y mi mamá... se sentiría decepcionada.

Así que me pase los días tratando de fingir que nada paso, los comentarios recorrían los pasillos de mi antiguo colegio pero por suerte nadie supo con exactitud quien fue la chica.

Por las noches solo lloraba en mi habitación y despertaba con las pesadillas donde el momento se repetía pero esta vez sin un retorno o final "feliz".

Hasta El Demonio Fue Inocente ( Completa, Libro 1 )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora