El Fuego De Tu Mirada

Capítulo 1

Sus labios explicando "El gran libro de mitología griega" del autor, Robin Hard, era realmente un espectáculo digno de admirar. 

Sus grandes manos se movían al son de su explicación y realmente no podía dejar de pensar en que nunca había visto unas manos tan prolijamente masculinas. Me di cuenta que en su dedo anular no había ningún anillo, por lo que quizá había alguna posibilidad de que estuviera soltero. 

No... Realmente no lo creo.

 —"...Por ello también será la guía principal en la primera parte de este libro, a lo largo de la narración sobre el surgimiento del mundo, de las divinidades mayores y menores, y de cómo Zeus y los dioses del olimpo consiguieron la autoridad suprema."— Dijo mientras caminaba por el pasillo del medio de la sala, acercándose a mi asiento. 

Su impecable traje, lo hacía ver mucho mas sofisticado. Si no me había equivocado en escuchar por los pasillos, el profesor Alexander Mackenzie tenía aproximadamente unos 28 años. 

Era el profesor más joven de la universidad de Toronto, que estaba relacionado con la filosofía antigua. 

Cuando lo tuve suficientemente cerca pude sentir su maravilloso aroma. ¿Habría algo de él que no encontrara perfecto?

 Cuando pasó de largo de mi pupitre, pude admirar que todas las féminas, las cuales eran pocas, estaban pendientes a sus movimientos... al igual que yo. 

No había duda que mi profesor favorito atraía todas las miradas. Su prominente mandíbula cuadrada, su gran porte, su vestimenta majestuosa, su voz... todo en él atraía completamente al sexo opuesto.

Muchas de ellas tendrían más posibilidades de intentar algo y no fracasar. Bueno, quizá si fracasarían... pero podrían seguir adelante. Yo no podría. Prefería mil veces adorarlo en las penumbras, que sacar a la luz mis deseos. 

Vengo de un pequeño pueblo del condado de Medina, en el estado de Texas, llamado Castroville, en el cual me crié la mayor parte de mi vida, en una granja cuidando ovejas. 

Fui a una escuela de monjas, lo cual dificultó mi relación personal con los hombres ya que, bueno... no había hombres y no fue hasta que me cambiaron de escuela que pude relacionarme con el sexo opuesto. Algunos de estos se dieron cuenta de mi existencia cuando estaba en secundaria, ya que ahí empezaron los cambios físicos más notorios, sin embargo, ninguno me interesaba... eran tan melosos. 

Fue en esos años en donde conocí a mi único mejor amigo y único novio de toda mi vida, Nathaniel, el cual dejé atrás en Texas para poder seguir mis sueños. 

Realmente funcionábamos mejor como amigos que como novios, pero a mis padres les encantaba ese joven para ser parte de mi vida y de la familia, ya que decían que si me ponía de novia con él, podría quedarme en Texas.

Gran error.

Estudio filosofía en la Universidad de Toronto. Gané una beca por mis excelentes calificaciones en mi época escolar y no desaproveché la oportunidad de hacer mi vida fuera de Texas. No es que no quiera la tierra en donde nací, pero a veces es preferible dejar los recuerdos atrás para poder avanzar, y yo sabía que podía ser más que una cuidadora de ovejas. 

Trabajo media jornada en el restaurante Gallery Grill, el cual está a solo unas cuadras de la universidad, porque bueno, la beca que me dieron es solo para mis estudios. 

Mis padres me envían la cantidad necesaria para poder pagar una pequeña hostal, sin embargo, ellos piensan que el dinero es suficiente para todas las demás necesidades y pues todo estudiante universitario quiere tener dinero extra ¿No?

Empecé el curso hace 3 meses, me encanta ir a la universidad y no solo porque tengo al profesor más atractivo del universo, sino porque siempre he querido vivir una vida distinta. Más independiente, más libre del qué dirán los demás. Esto claramente no podía tenerlo en Castroville, ya saben... Pueblo pequeño infierno grande.

—"En primer lugar, según Hesíodo, fue Caos. Esta palabra, que significa literalmente «el vacío que se produce en una abertura», supone mucho más que un mero vacío; ya que Caos es un elemento original del universo, una realidad lóbrega que será representada en las sucesivas genealogías como la fuente de buena parte de todo lo que es oscuro y negativo en el mundo".— Explicó el sabio profesor.

—¿Alguien puede decirme alguna otra definición de "Caos" de la antigua Grecia?— Preguntó a toda la clase, la cual se componía mayormente de hombres y solo 10 mujeres, incluyéndome. 

Todos los varones levantaron la mano con entusiasmo para poder responder al profesor, como de costumbre. Pero este último pareció no verlos.

—¿Alguna dama que quiera dar su opinión sobre el tema? Siempre son los varones los que responden a mis preguntas ¿Acaso no me están poniendo atención? —

Ja... Si supiera profesor Alexander. 

—Está bien... si no quieren participar, voy a elegir un nombre al azar de alguna de ustedes.— Dijo caminando de vuelta a su mesa, la cual estaba al medio de la sala, en la parte de adelante.

Por favor que no sea yo, por favor que no sea yo...  Repetí en mi mente mientras el profesor elegía un nombre de entre los que estaban en la lista.

—"¿Julieta Bassett?"

¡Oh Diosa Até! por qué te ensañas con esta insignificante mortal.

Obviamente sabía la respuesta. Durante toda mi adolescencia fantaseaba con la historia de la antigua Grecia.. Pero de solo pensar que su mirada se encontraría con la mía, me hacía temblar de pies a cabeza. Levanté mi mano temblorosa... estaba a punto de sufrir un colapso nervioso. 

¡Zeus ayúdame!

—Bien señorita Julieta, dígame entonces ¿Sabe la respuesta a mi pregunta? — El profesor Alexander al ver mi mano levantada se acercó hasta mi pupitre mirándome con atención. Todavía llevaba la lista de alumnos en su mano.

—Si profesor... 

Por todos los dioses, ¿por qué tenía que ser tan magnífico?

— En la mitología griega, el Caos es el estado primitivo de existencia del que surgieron los primeros dioses. En griego antiguo significa "vacío que ocupa un hueco", y "procede de abrirse de par en par" —Tomé aire —  Caos era el dios primordial y origen del resto de los dioses en la mitología griega... —No te desmayes, respira —Su mito y sus atribuciones son semejantes al Absu sumerio, con la diferencia de que Absu era un vacío en medio de las aguas y Caos un vacío en medio de la nada. Caos fue el primer dios que apareció, siendo el vacío original que existía cuando no había nada. En un momento dado, Caos se dividió en tres, dando lugar a Gaia, Erebo y Nicte, dioses que representaban a la tierra, el destino y la noche. Caos era un dios sin forma, sin cuerpo, por lo que no podía ser representado.

El silencio en la sala era mortal. Mi respiración se detuvo hasta que el profesor Alexander Mackenzie rompió el silencio.

—Bravo... — Sonrió—  No pensé que supiera que el caos se dividió en Gaia, Erebo y Nicte. Normalmente la gente suele confundirse y pensar que las deidades Gea, Tártaro y Eros son descendientes del caos. 

Todas las miradas estaban sobre mí, pero la única que lograba poner mi corazón a tope, era la de mi profesor. 

—Para los que no saben, los 3 mejores alumnos que tengan mi recomendación, podrán optar a un viaje a la ciudad de Atenas, que se realizará con el grupo de estudios griegos. Tienen 5 meses para poder impresionarme y demostrarme de qué están hechos. La señorita Julieta ya se les adelantó. 

Oh, mi Dios...

—Espero que mañana, las demás féminas pongan más entusiasmo a participar y no a estar pendientes de cosas banales... aquí vienen solamente a estudiar.— Y con una última mirada hacia mi, dio media vuelta y finalizó la clase.

***
Hola a todas, espero que se encuentren muy bien, aquí les dejo el capítulo 1 de "El fuego de tu mirada".
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¡Un abrazo!
XOXOXO