El Fuego De Tu Mirada

Capítulo 15

El sol iluminaba completamente mi pequeña habitación recordándome a casa... Había días en que extrañaba estar en Castroville, caminar unos cuantos kilómetros hacia las montañas más altas y sentarme en la cúspide admirando la hermosa vista frente a mí... Los prados verdes, las bellas flores, la naturaleza, la frescura del viento en mi rostro. Si... realmente extrañaba Castroville.

Estiré mi cuerpo levantando los brazos sobre mi cabeza. Hoy será un buen día.

Después de clases, tendría que ir a trabajar a Gallery Grill y después pensaba en visitar a Rose para ir a dejar unas cuantas cosas.

El reloj marcaba las 9 am. Mis clases comenzaban a las 10:30 el día de hoy. Tomé una ducha relajante, depilé mi cuerpo y cuando estuve fuera del agua, puse una fragante crema de coco sobre mi piel.

Saqué la toalla que envolvía mi cabello mojado, y comencé a restregarla para absorber la humedad restante. Me puse unos jeans negros ajustados y una blusa blanca de manga larga que dejaba ver mis hombros.

El sonido de mi celular interrumpió mi silencio. Maldición... ¿Por qué soy tan desordenada?

Lo encontré entre las frazadas de la cama y contesté.

-¿Aló?

-Hola prima ¿Cómo están los preparativos? -La voz de Rose sonó a través del arruinado celular.

Este sábado me mudaría definitivamente al departamento de Rose. Realmente todo se ha ido arreglando a través de los días. Quizá solo necesitaba dar el primer paso para que la vida volviera a sonreírme...

-Tengo casi todo listo en las cajas -Reí

No tenía muchas cosas... las cajas contenían libros, recuerdos y más libros. Lo demás era mi ropa, pero tenía en las 2 maletas llenas y listas para ser trasladadas el día de mañana.

-¡PERFECTO! -Chilló - ¡Estoy tan emocionada de tenerte aquí! Bueno... y también por el tremendo bombón que tenemos de vecino, es que te mueres Julie... literalmente casi se me caen las malditas bragas cuando lo vi. De saber que había este tipo de hombres aquí en Toronto, me hubiera venido de New York hace mucho tiempo. -Reímos juntas.

- Pues al ataque, nena -Le dije risueña - ¡Ey! Después del trabajo pasaré a dejar una maleta de ropa ¿Estarás en casa como a las 8pm?

-Si, por supuesto Julie. Aprovecharé de pasarte la copia de la llave inmediatamente.

-Muchas gracias por todo esto, Rose...

-No me sigas agradeciendo, yo también odio estar sola y tu serás una muy buena compañera de piso -Rio - Ven a la hora que me has dicho, que tu prima Rose estará esperando por ti.

-Está bien -Sonreí - Ahora tengo que dejarte prima, se me está haciendo tarde para la Universidad. Nos vemos, te quiero.

-¡Adiooos mi Julie! ¡¡Esto será un desmadreeee!!

Reí cuando corté la llamada. Así era Rose... extrovertida y espontánea.

Terminé de alistarme, me puse las sandalias negras, desodorante, peiné mi cabello mojado, perfume y listo. Tomé mi mochila y partí a la universidad.

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La clase del Filosofía antigua pasaba lentamente. Teníamos que leer en silencio un capítulo del libro "Historia de la filosofía antigua". Los exámenes empezarían muy pronto, por lo que tenía que ponerme las pilas y estudiar...

Una pregunta invadió mi mente ¿Tengo que contarle al profesor Alexander que tengo algo con Liam? Me he puesto a analizar nuestro comportamiento y llegué a la conclusión que nuestra relación es como una "amistad".