Guardemos el secreto

Capítulo 25 "Encuentro Casual"

Está muy equivocado si piensa que voy a deprimirme, a hacer estupideces por él o a mostrarme abatido. La mejor forma de pasar página es retomar la rutina y en eso estoy. Sentado en mi despacho, miro por encima las anotaciones que me ha dejado Baekhyun sobre unos nuevos proveedores. Dice que los actuales funcionan bastante bien, pero como ha habido un par de problemillas con los suministros, quiere tener un plan alternativo. A mí me parece estupendo. Él sabe que en los temas culinarios no me meto, dispone de plena
autonomía, yo sólo me ocupo de la administración y la gestión.

-¿Se puede? -pregunta una voz cantarina llamando a la puerta.

Reconozco que lo he evitado. Baek me cae bien, pero vive en un mundo de fantasía aveces me resulta cansino con eso de los finales felices, cree que como a él le ha ido en el amor, a los demás nos va a ocurrir lo mismo.

-Adelante -respondo con sequedad, a ver si se da cuenta de que no estoy humor.

-¿Has mirado lo que te pasé?

-Estaba en ello -contesto observándolo.

-Jongin, te lo di hace diez días -me recuerda y tuerzo el gesto. Tiene razón, reconozco que no he estado todo lo atento que debería.

-Ya sabes que no te hace falta mi aprobación para estos asuntos -digo para olvidarme del tema-. ¿Algo más?

-Oye, ya sé que no te gusta que me meta en tu vida; sin embargo, no soy el único que se ha dado cuenta de la situación...

-Si ya lo sabía yo... -murmuro-. Baek, déjalo.

-Vale, lo dejo, pero te pongas como te pongas, estás mustio. ¿Cuánto hace que no sales con alguno de los ligues de tu agenda?

-Desde que a ti no te importa -replico, advirtiéndole con la mirada que no continúe tocándome la moral. Él levanta las manos en señal de disculpa-. Por cierto,

¿qué tal va tu embarazo?

Baek sonríe y se lleva las manos al vientre. Yo me recuesto en el sillón. Aunque me importan poco los detalles, cambiar de tema es la mejor opción para no seguir hablando de mí.

-Apenas se me nota -dice emocionado-. Tengo unas ganas de lucir barriguita...

-No hay quien entienda a los embarazados. Cuando engordan medio kilo hacen un drama épico y ahora resulta que quieres lucir tripa. -Niego con la cabeza.

-Y ya que estamos con el tema, ¿has pensado en alguien para sustituirte?

-Pues no, la verdad, porque si me organizo bien, prácticamente estaré hasta el último día.

Sonrío de medio lado y niego al mismo tiempo.

-Baek si piensas que vas a venir por el restaurante y trastear en la cocina con un barrigón que no te va a permitir ni llegar a los fogones. Por no mencionar que si Chanyeol se entera, me cortará las pelotas -le digo en tono de advertencia.

-¡Qué exagerado eres! En mi primer embarazo trabajé hasta un mes antes de dar a luz.

-Baekhyun, no digas estupideces. Eras más joven y, por lo que sé, estabas solo, pero ahora la situación es muy diferente.

Él tuerce el gesto ante mis desagradables palabras, aunque muy ciertas. Abandono la comodidad de mi sillón y me incorporo para acercarme a él.

-Bueno, ya veré lo que hago -se obstina.

-Ni lo sueñes -asevero quedando frente a frente con él -. Vas a cogerte la baja en cuanto te corresponda, así que deja de tocarme la moral y ve pensando en un sustituto temporal.