DAVID
Llegué de la universidad y toqué el timbre.
...
...
Nada...
Y otra vez.
...
...Nada...
¿Dónde está Nancy?
Decidí llamarla:
-hola Nancy, ¿Dónde estás?- dije sin terminar de entender lo que pasaba.
-DAVID, ¡Bautista pisó un cuchillo! Estamos en el hospital francés ¡Ven rápido! - dijo sollozando
-V- voy - dije tartamudeando mientras me dirigía al hospital.
TODO ES MI CULPA.
YO ME ENCARIÑÉ CON ÉL.
A ESTE PASO LO VOY A MATAR.
NO SOY SEGURO.
Me gritaba mentalmente mientras corría hacia el hospital francés el cual estaba bastante cerca del departamento.
Por fin llegué al maldito hospital, entonces pregunté por mí hermano...
-hola buenas tardes ¿Está aquí Bautista Lewis?- dije lo más tranquilo que pude.
-buenas tardes señor, déjeme mirar - y volteó su vista al antiguo ordenador que tenía a su lado- si, Bautista Lewis está siendo operado, por favor tome asiento, en cuanto terminen la operación se lo dejará pasar.
¿¡ De verdad estaban operando a mi hermano a causa de esta maldición!?
No podía pensar en nada, tenía cientos de pensamientos al mismo tiempo y no tenía tiempo de prestarle atención a ninguno...
Y de repente escuché una voz...
-Señor Lewis, la operación a sido finalizada, tiene que ir a la habitación 137 para ver a Bautista Lewis - me levanté apurado y fui a ver a mi hermano...
Cuando abrí la puerta me encontré a Baurista acostado en la camilla y a Nancy a su lado...
¿Qué clase de hermano soy? ¡Doy pena! ¡No soy capaz de proteger a ninguna persona en este mundo!
En cuanto me miró le dije:
-Bautista, de verdad, lo siento mucho- veía en su pequeña cara de adolescente su confusión ante mi comentario -lo lamento, todo es culpa de la maldición- dije mientras me acercaba cuidadosamente a su lado...
-¿Qué pasó?- de repente mi hermano se puso a llorar -Bauti, ¿qué pasó?- dije ahora más nervioso todavía.Me miró con sus ojos llenos de dolor y levantó su sábana y automáticamente miré su pie...
No estaba...
No había un pie donde debía estar...
Su pie izquierdo había desaparecido...
Antes de poder reaccionar Nancy habló:
-el corte fue muy profundo, el cirujano dijo que el pie ya no se podía salvar... - dijo mirando al suelo con una tristeza fingida...
¿Por qué actúas tanto Nancy? Quería gritarle, pero no podía, ella estaba siendo tan buena... No tengo que tratarla así...
-Bautista... yo... em... - no sabía cómo comenzar a hablar; sabía perfectamente que quería disculparme pero ¿qué le digo?
"Perdón por hacer que te amputan el pie gracias a una maldición mística que ni siquiera entiendo"
No podía...
-no pasa nada...- dijo en forma de suspiro. Se notaba que estaba triste, cómo no estarlo...
-Bautista, no es seguro que vivas conmigo...- dije sin mirarlo a los ojos... -es completamente ilógico que sigas viviendo conmigo, te puedo lastimar... -
Automáticamente recibí respuesta de mi hermanito:
-no me iré a ningún lado David, además ¿A dónde me mandarías? ¿A un orfanato? Nunca antes me habías querido, solo me buscabas en el colegio y punto...- desvío su mirada llena de furia y resentimiento por unos instantes, pero esta volvió en un corto período de tiempo -¿Por qué de repente tuviste que acercarte a nosotros?¿Por qué hiciste que papá muriera?- Bautista estaba llorando desconsoladamente... Yo también, nada más que no me había dado cuánta por todo lo que sentía en ese mismo momento...
Me estiré para abrazarlo y el no se negó -lo lamento, realmente lo lamento, prometo no acercarme más ni a ti ni a nadie... lo prometo, no te haré más daño - y nos quedamos así por un largo rato...
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NUNCA LASTIMES A QUIÉN DESPUÉS NO PUEDAS MATAR
Teen FictionDavid tiene una "maldición", pero no es el tipo de maldición que él cree tener, su verdadero problema es Nancy, una asesina en serie con una enorme secta de servidores que tienen que seguir con un legado... Lee la historia para descubrir a estos dos...