CAPÍTULO 30

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NANCY

Una vez David se fue de mi habitación me tiré en la cama completamente sonrojada.

¡Lo logré! ¡Desde ahora será mucho más fácil manipularlo!

De cualquier manera me gustó el beso...

Quizás si Bautista no estaba en el departamento...

¡NANCY PENSÁ EN OTRA COSA!

Me llevé las manos a la cara en un intento de frenar mi sonrojo.

Tengo que matarlo, esto no se puede quedar en amor, tengo que manipularlo...

Pero me da pena tener que hacerlo...

Me rendí de pensar en eso y me fui a dormir...

-ey Nancy ven conmigo - el chico de pelo blanco me extendió la mano para que lo siga.

-¿a donde vamos?- le pregunté mientras tomaba su mano.

-a un lugar muy especial - empezamos a correr agarrados de las manos y paramos en una pradera solitaria, no había un alma en ese lugar...

En ese momento nos sentamos en el pasto y David me tiró y se puso encima mío bloqueando mis costados con sus brazos.

-Nancy, te quería decir que...- y sacó de su bolsillo...

-Nancy...-

Que pasó, escucho una voz lejana...

-Nancy, despierta - esa es la voz de David...

Y abrí los ojos...

-Nancy... oh, buen día - me dijo David sentado al lado de mi cama.

- buen día, ¿Cómo dormiste?- dije mientras me sentaba en la cama.

-muy bien, ¿Vos?- dijo con su radiante sonrisa.

-también... ¿Qué hora es?- le pregunté mientras me pasaba las manos por los ojos para despertarme del todo.

-son las 11:00 - ¿¡Las 11!? Es mas tarde de lo que esperaba.

-uy, será mejor que me cambie - me levanté corriendo y agarré ropa para entre casa.

Elegí una remera lila, un buzo negro y unas calzas grises; no estaba hermosa pero bueno...

Almorzamos y fui con David a preguntarle algo:

-hey David, ¿Te gustaría ir a la plaza?- vi como un leve sonrojo adorno su pálida cara.

-¡Claro!, Un segundo que me cambio - entonces me fui de su habitación y me cambié para salir.

Me puse una remera manga corta color negro, una campera verde militar y me dejé las calzas negras que ya tenía.

Ese día para ser invierno estaba bastante caluroso, así que no era necesario salir con tres camperas.

Me reí un poco de mi comentario mental y me maquillé un poco.

Escuché de la otra habitación a David hablar con Bautista:

-Bauti, ¿Te quedas solo unas horas?-

-de acuerdo - dijo con mala gana...

Claramente tiene miedo de lo que le pueda hacer, no va a hablar...

Salí radiante y dije:

- ¿estás listo?- dije con la voz más angelical que pude.

-¡claro!- dijo mientras salía de su habitación...

Estaba hermoso...

¡BASTA!

Salimos en silencio del departamento y luego me preguntó:

- ¿a cual vamos a ir?- tenía un leve sonrojo. ¡Este chico está todo el día sonrojado!

-conozco un prado que es muy bonito-
Ya estábamos saliendo del departamento.

Y caminamos en silencio hasta allí.

Una vez llegamos saqué conversación:

-es aquí, sentemonos- dije mientras lo hacía y David también-

-hey Nancy... te quiero decir algo... - su sonrojo había desaparecido...

- dime - me miró con sus hermosos ojos negros y me dijo:

- descubrí algo leyendo sobre la maldición - que... ¿encontró algo? -nuestras familias están relacionadas por algo... no lo entiendo del todo, pero tú tatarabuelo echó la maldición sobre mi familia - eso es verdad... -quizas haya alguna manera de que tu rompas está maldición... -

No Davidcito... NO HAY MANERA DE QUE YO PARE ESTA MALDICIÓN.

NUNCA LASTIMES A QUIÉN DESPUÉS NO PUEDAS MATARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora