sanar ; bnet.

veintiocho.

Javier.

—¿cómo te sientes? —pregunté evitando la suya.

—¿cómo está Mauro? —repitió.

—Mia nena, la doctora acaba de darnos informe sobre tu primo, debido al golpe que tuvo en su cabeza, el tuvo una contusión, y está en coma —Mia inhaló y las lágrimas caían por sus mejillas— le darán un lapso de tres semanas para esperar alguna respuesta.

empezó a hiperventilarse, y yo la tomé de las manos rápidamente.

—mírame, Mia, mírame —le hablaba pero ella empezaba a desesperarse— Mia mírame —ella puso su mirada en la mía— tranquila, inhlana, exhala —le decía y ella seguía mis indicaciones— inhala, y exhala —repetí y ella lo hacía, así hasta que logró controlar su respiración— estoy, aquí, estás en un lugar seguro. —dije mientras la abrazaba y ella se aferraba fuertemente a mí, y lloraba desesperadamente, mis ojos amenzaban con llorar porque me dolía verle así, y no poder hacer nada para evitar ese dolor.

—¿quieres que llamemos a wos y a Dani? —preguntó Sergio y ella asintió.

los chicos salieron de la habitación y yo me quedé con ella.

—si nunca hubiese aceptado ser novia de Ulises nada de esto estaría pasando, es mi culpa Javier. —decía mientras lloraba.

—no, no, no es tu culpa, preciosa, nunca digas que es tu culpa porque no es así, el único culpable es Ulises, tú no —dije poniendo mi mano en su rostro.

—¿por qué no puedo ser feliz Javi? —dijo en un susurro, mientras veía nuestras manos, sentí un pinchonazo en mi pecho.

—la vida es una hija de puta, pero Mauro saldrá de esto, vas a ver, pronto todo estará bien nuevamente. —dije besando su frente, mientras ella se acurrucaba en mi pecho.

—yo estaba empezando ser feliz contigo, y pasa todo esto, perdón por siempre tener que ser quien se traga mis mambos.

—no me pidas perdón, yo estaré contigo siempre, yo he sanado heridas de tu corazón y eso me hace feliz, tú me haces feliz Mia, antes de conocerte realmente no le encontraba sentido a mi vida, claro que habían cosas que me hacían feliz, estar con los chavales, el freestyle, pero sin embargo yo sabía que hacía falta ese complemento, y justo llegaste tú, te fui conociendo y entendí que aparte de gustarme también quería cuidarte. —le decía mientras ella estaba acostada en mi pecho.

—estoy tan agradecida con vos Javi. —yo me quedé ahí con ella en mi pecho, esperando que su dolor tal vez disminuya un poco.

—Hola —decía Wos mientras entraba a la habitación —¿querés que esperemos afuera?

—no, no chaval, ustedes se necesitan en este momento, yo saldré, si necesitan algo no duden en avisar ¿vale? Se lo digo a los tres. —los tres asintieron, antes de cerrar la puerta Mia me tiró un beso y yo sonreí.

Mia.

las caras de mis amigos emanaba tristeza real, y no era para menos, estábamos tan acostumbrados a estar siempre los cuatro, y jamás pasaba por la mente de alguno un escenario de estos.

—es demasiado bueno ese pibe —decía Dani.

—lo sé, a veces siento que lo merezco —dije jugando con mis uñas.

—claro que lo mereces tarada ¿que decís? —me regañó Valen.

—¿ya saben lo que pasó? —dije con temor.

—sí, hace un rato que llegamos, no entramos porque la verdad es que nos dio re mal la noticia y no queríamos que nos vieras llorar —decía Valen con sus ojos tristes, y Dani guardaba silencio pero tenía la misma mirada triste.

—vengan acá —dije extendiendo mis brazos y ellos se acercaron, entre los tres nos dimos un abrazo.

flashback.

"—no boludo te juro que me me duele. —decía Mauro llorando, su novia lo había cuernado y estaba mal por eso, se había enamorado fuerte de la mina.

—la quiero cagar a trompadas. —dije molesta.

—che ya vas vos de agresiva Marena. —me retó Daniel y yo lo ignoré.

—ya boludo, vos hiciste las cosas bien, me consta. —decía Valen.

—y aún así me cuerneó, yo creyendo que haciendo todo bien no me iban a pasar estas cosas. —estaba realmente dolido.

—vení acá trolo, ven para darte un abrazo. —dije atrayéndolo hacia mí, y los otros dos se unieron al abrazo.

—ustedes me hacen re bien loco, estos abrazos te dan fuerzas. —decía Mauro mientras jalaba mocos."

—estos abrazos nos dan fuerzas ¿recuerdan? —decía Valen con su mirada triste.

—no lo digas así flaco, Mauro no se ha muerto, va a salir de esta. —dije mientras secaba sus lágrimas y evitaba las mías.

—pero claro que saldrá de esta, el pibe tiene demasiado por delante. —decía Dani.