El imbécil de mi vecino

The Sanctuary of lovers

Dylan

¿Novio de Ale? ¡Maldición! Nunca en mi vida he tenido una relación y ahora que estoy en una me siento raro. Ya que eso implica serle fiel a tu pareja y yo de eso no tengo ni una mierda.

Pensé que esto iba a ser fácil, pero me equivoqué. Primero con Rosalyn que me abofeteo frente a todo el mundo cuando le dije que lo nuestro había acabado, después con April que se lo tomó todo bien, o más bien quiso engañarnos a todos haciéndonos creer eso, pero yo sé que no fue así.

Aparte tuve que tragarme todos mis reclamos cuando Cam mencionó lo de Diego, este idiota ha sido el peor estorbo que he tenido en toda mi existencia, molesta aunque no esté presente y si antes me caía mal ahora más que nunca sé que no soporto verlo. Su mera presencia me da un gran aborrecimiento que me incita a quererlo quitar del camino de April.

Siento los brazos de Ale rodearme mientras pega su rostro en mi espalda.

«Cómo me gustaría que la que estuviera haciendo esto fuera otra persona»

—¿En qué tanto piensas?

—Nada en específico.

—¿Seguro? Te siento algo tenso —doy media vuelta y me quedo frente a ella.

—Muy seguro —sonrío rozando mis labios con los suyos.

—No sabes lo feliz que me siento —suspira— Nunca imaginé que algún día estaríamos así —frunzo el ceño— Como pareja, tontito.

—Siempre te vi como una mujer preciosa, así que esto tarde o temprano tenía que pasar —me encojo de hombros.

—No sé porque presiento que esto lo hiciste solo por lo que te dije, y no porque realmente sintieras algo por mí.

—Claro que no —acuno su rostro— Tú fuiste la primera chica que me gustó caramelo, y nadie se va a comparar a ti.

—Te quiero —susurra.

—Yo también —nos fundimos en un último abrazo.

Salimos de mi casa para dirigirnos a la de April, antes de entrar ella se voltea y me besa.

Cam sale con el ceño fruncido y cuando me ve rueda los ojos.

—Hola a la pareja de enamorados —Ale se voltea y le sonríe tímida— Todavía no me acostumbro a verlos juntos. Ya saben, con eso de que tú —me señala— Siempre estabas tras April —me tenso— Pero bueno, el mundo da muchas vueltas ¿cierto?

—Lo hacía para llamar mi atención —responde mí... mi novia.

—Ya veo.

Supongo que mi vecina le contó todo lo que pasó entre ella y yo. Por eso la rubia se comporta de esta manera.

—Hablamos más tarde —me pregunta Ale.

—Sí, te marco en una hora para ir a cenar.

—Perfec...