Capítulo 53

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Diez meses después, Cevdet había tenido que irse, reclamado por el ejército a cumplir una misión y Azize recibió un llamado para presentarse otra vez, con su misión encubierta.

Siempre tenía la esperanza de cruzarse con su marido y eso la ponía feliz, pero cada vez le resultaba más difícil tener que separarse de sus hijos.

Habló con mamá Hasibe y se dispuso a preparar sus cosas para irse.

Pasó el resto del día en su casa con sus hijos y en un momento, vio que Yildiz y Ali Kemal se asomaban a la ventana y saludaban a alguien....

Se asomó y vio a Yakup, que hacía morisquetas y hacía reír a sus hijos, especialmente a Yildiz...

-¿Conocen a ese niño?

-Sí...- dijo Ali Kemal.

Azize lo miró pensativa y no dijo nada más. Yakup se quedó un rato cerca y luego desapareció.

Al día siguiente, luego de despedirse de sus hijos y garantizarle a mamá Hasibe que estaría de vuelta lo antes posible, se encaminó hacia su misión y se encontró con Yakup en la zona del puerto, de donde sería trasladada.

Yakup le sonrió con alegría cuando la vio y Azize lo abrazó con ternura...

-Pequeño, ¿qué haces aquí?

-El Capitán me envió para cuidarla...

-Bien... me gusta que me cuides...

-¿Sus hijos están bien?

-Sí... muy bien... te vi ayer afuera de mi casa...

-También cuido a sus hijos...

-Entiendo... el Capitán te envió...

-No... bueno, si la cuido a usted, también a su familia...

-Pero debes tener cuidado... tú sabes que esto es...- dijo y bajó la voz para que nadie los oyera- un secreto... ¿verdad?

-Así es, señora... - dijo y la abrazó con ternura.

Azize sintió un nudo en la garganta, ese niño necesitaba tanto el afecto de una familia que se les había pegado a ella, a Cevdet y a sus hijos...

Llegaron a la misión y Azize fue directamente a ver si encontraba a su marido. Hacía casi un mes que no lo veía y estaba desesperada...

Golpeó la puerta de su despacho y cuando entró, lo vio hablando con Hulya, y él, al verla, sonrió.

-Enfermera Ayse...- dijo con exagerada simpatía.

-Enfermera...- dijo Hulya.

-Capitán...- dijo Azize casi sin poder ocultar la emoción al verlo- Hulya...

-¿Cómo está tu bebé?

-Muy bien... muy grande... ya tiene casi un año...

-¿Este tiempo hace que no nos vemos?

-Bueno.... me retiré un poco de la profesión para cuidarla... tuvo algunos problemas respiratorios, pero ya está mejor...

-Me alegra...- dijo la mujer con una sonrisa que a Azize se le hacía medio rara en sus facciones.

-Hulya, por favor encárguese de lo que le pedí, debo hablar con la enfermera...- dijo Cevdet y la mujer asintió y le sonrió a Azize antes de salir.

-Azize... mi vida...- dijo en voz baja y se acercó a ella y la abrazó con fuerza, su nariz perdida en su cuello... sentía que no tendría suficiente contacto con ella.

Érase una vez...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora