Mamá Hasibe sonrió cuando al asomarse a la ventana, vio venir a su nuera sonriendo, con Yildiz en sus brazos y Ali Kemal correteando a su lado...
Las primeras semanas, luego de enterarse del embarazo habían sido bastante trabajosas porque ella no había querido quedarse quieta y no se sentía demasiado bien. Pero como seguramente ya había cumplido los primeros tres meses, las molestias comenzaban a desaparecer y ya estaba de mejor ánimo...
Cevdet se había ido hacía un par de semanas, también, y no tenían demasiado novedades, pero Tevfik siempre se tomaba el trabajo de visitarlas y Hasibe estaba segura que de suceder algo, él se los diría...
-Madre... - dijo Azize luego de entrar a la casa- estos niños están hambrientos... ya casi no puedo cargar a Yildiz...
-Están sanos y fuertes...- dijo la mujer y rio- el almuerzo está casi listo...
-Bien... vamos a lavarnos las manos...- dijo Azize.
Un rato más tarde los cuatro estaban sentados a la mesa, comiendo. Ali Kemal empezó a molestar a su hermana y mamá Hasibe le llamó la atención. El niño empezó a llorar y Azize lo llevó a lavarse la cara mientras Yildiz terminaba de comer con su abuela.
Una vez terminado el almuerzo, mamá Hasibe se fue a descansar un rato y Azize se quedó contándoles un cuento a sus hijos, no iba todos los días al hospital y se sentía mucho mejor...
Escuchó la puerta y cuando abrió, se encontró con un soldado que venía a entregarle una carta.
Reconoció al instante la letra personal, tan particular de Cevdet y luego de ofrecerle un vaso de agua al soldado, que el joven no aceptó, lo dejó ir, algo ansiosa de leer las líneas que su marido le había hecho llegar...
Le pidió a su hijo que cuidara a su hermana, lógicamente no los dejó solos, pero se sentó en el sillón para abrir la carta...
"Mi Azize:
Cada minuto se hace una eternidad cuando pienso en ti y en mis hijos, ahora lejos, pero siempre en mi corazón. Estos días te he echado mucho de menos, he soñado contigo y deseo especialmente que los días que me quedan hasta vernos, se pasen lo antes posible...
Mi vida... me han asignado una nueva misión, sé que seguramente cuando leas esto, estarás enojada, cansada y hasta disgustada conmigo, pero lamentablemente se trata de mis responsabilidades.
Como la vez pasada, te pido que no le digas a nadie sobre esto, ni siquiera tú deberías saberlo, pero no he podido hacerte sufrir sin saber donde estoy o si estoy vivo o muerto... mi pobre madre ya se ha acostumbrado a eso y nuestros hijos no se dan cuenta aún...
Quiero decirte que te amo y que mi corazón late junto al tuyo todo el tiempo. Que te pido este esfuerzo por nuestra familia y también por nuestra patria, a la que he jurado defender con mi vida... aunque me vida seas tú... tú y mis hijos...
Te echaré de menos, te amo con el alma...
Tu Cevdet"
Azize dejó escapar algunas lágrimas y releyó la carta. Lo comprendía, ¿cómo podía no hacerlo si conocía su pasión por su trabajo y por su patria?
Se sentó en su escritorio y le escribió una carta a su marido. Al terminar, sonrió y la guardó en un sobre lacrado.
Se encontró con Tevfik afuera del destacamento y el hombre le sonrió con placidez.
-Azize... ¿qué haces por aquí? ¿estás bien?
-Sí, lo estoy, Tevfik...- dijo y levantó la carta para mostrársela.
-Azize... no puedo entregarle nada a tu marido... no sabemos donde está, ha desaparecido...
-Tevfik... escucha... no te pido detalles... sé cómo son las cosas... solo te pido que le hagas llegar esta carta a Cevdet...
-Pero... ¿tú estás al tanto?- le preguntó en tono de confidencia.
-Sé que no debería... pero sí... - dijo y bajó la vista, recordando que no debía decirle a nadie sobre la misión de su marido.
-Es muy grave... que lo sepas, quiero decir...
-Tevfik... por favor... creí que eras mi amigo... necesito que le entregues esto... no te pediré nada más en mi vida...
-Veré lo que puedo hacer...- dijo fingiendo fastidio, que muy en el fondo sentía realmente.
Azize volvió contenta a su casa y Tevfik se quedó mirando la nada, pensativo.
Unas horas más tarde, Cevdet abrió la puerta de su habitación de hotel y arrugó en entrecejo al encontrarse con uno de sus compañeros...
-¿Qué haces aquí? ¿Pasó algo?- le preguntó y el hombre asintió.
-Capitán... me envía el capitán Tevfik... me pidió que le entregue estas cartas...
-Muchas gracias...- dijo y el hombre se fue, dejándolo.
Cevdet se sentó en la silla que tenía a su lado y abrió la carta de Azize...
"Mi héroe:
Sé que no debería escribirte, pero quiero que sepas que a pesar del dolor que me causa no poder verte, te apoyo en lo que tengas que hacer. Estoy profundamente orgullosa de quien eres y de ser tu esposa.
Sueño contigo y con tu regreso. Mantente a salvo para volver lo antes posible a mí y a tu familia. Cuida a nuestra patria.
Azize."
Cevdet sintió una emoción muy profunda al terminar de leer la carta de Azize. Su esposa, además de joven, tenía muy en claro cuales eran los valores más importantes para él y por suerte los compartía... sus ojos se enfocaron en la segunda carta. Allí reconoció la letra algo desgarbada de Tevfik.
"Hermano:
No he podido convencer a Azize de que no podía entregarte esa carta. Nuestros superiores se han enterado de que ella está al tanto de tu misión. No sé que vaya a suceder, pero quería que lo supieras. Lo siento... pero no te preocupes que, si algo sale mal, yo cuidaré de Azize y de tu familia.
Tu hermano Tevfik."
Cevdet sintió que su mundo se desmoronaba cuando cayó en cuenta de lo que podría suceder. Él no tenía miedo por él, sino por su mujer, que, inocentemente había cometido el error de hablar con Tevfik para hacerle llegar la carta.
Él lo consideraba un hermano a Tevfik, pero desde que se había casado con Azize, las cosas entre ellos habían cambiado drásticamente, Cevdet había creído que se trataba de celos con ella, pero últimamente se había dado cuenta de algo más importante, los celos de Tevfik no eran con ella sino con él... Tevfik se había fijado en Azize y ahora tenía la oportunidad de quitárselo de encima y tener el camino libre con ella...
Cevdet apretó el papel de la carta entre sus manos y cerró los ojos... tenía que encontrar una solución a ese problema porque que Azize estuviera en peligro por lo que sabía no era una opción, y pensar en Azize esperando su hijo era todavía peor...
Bueno, no todo pueden ser buenas noticias en esta historia. Espero que les siga gustando, a mí me apasiona escribirla. Gracias por leer!
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Érase una vez...
FanfictionEsta es la historia de cuando Azize y Cevdet se conocieron. Sencillamente eso, como una especie de etapa previa al comienzo de la novela. Espero que les guste