Confesiones

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La persona que fue al baño había regresado a clase y decidimos salir. ¡Por fin! ¿Qué me pasa? ¿Por qué cuando estoy con Karma siento felicidad? Pero no es cualquier felicidad, es... ¿Estoy enamorada?

Satsuki- Karma, vayámonos ya, no hay nada interesante que podamos explorar.

Karma- *Me mira decidiéndose burlonamente* Está bien, está bien, pero me la debes. 

Yo me mantuve tranquila, o al menos mi expresión mostraba eso. ¡Maldito Karma! 

Explorando un poco más la montaña, encontramos un río, en el que nos sentamos a relajarnos un poco.

Karma- ¿Te acuerdas de la carrera que echamos? Tardaste en llegar, ¿porqué?

Satsuki- Yo... Solo... Me tropecé y me casé, así que descansé un poco. ¿Algún problema?

Karma- Ninguno.

Estábamos ahí los dos, yo acariciando el agua de cuclillas mientras veía cómo se deslizaba entre mis dedos, mientras Karma sólo me observaba con su característica sonrisa. Miré a mi reloj y ya faltaban 10 minutos para la clase siguiente, a la que esta sí asistiríamos. 

Me dí la vuelta para avisarle al chico más violento y peligroso de la escuela, que resultaba ser ahora un buen amigo mío. En ese instante, me atrajo de forma brusca hacia él en forma de abrazo, hasta que me dí cuenta de dónde estaba. Estaba en los brazos del chico que, por primera vez, me gustaba. Me puse roja, pero no negué que quería quedarme ahí.

Me apartó y miró algo con una expresión un poco molesta. Me extrañó, así que yo también miré. Era una púa afilada y un poco gruesa, que intentaba apuñalarme con la intención de que yo muera. 

Karma me había protegido. El sonrojo de mi rostro había desaparecido y miré la zona desde donde se lanzó con un rostro serio.

Satsuki- Vámonos.

Karma- ¿Tienes enemigos?

Satsuki- No. 

Pero me hago una idea de la que puede ser.

Regresamos los dos al aula (nos había tocado otra vez juntos este año solo que ahora me sentaba adelante junto la ventana y al lado, Asano). Tocaba matemáticas y esa asignatura siempre se me hacía eterna.

 A la hora del descanso, Ayame, corrió hacia mi llorando y gritando mi nombre de forma exagerada. Amo la forma en la que se preocupa por mí. 

Ayame- *Con lágrimas en los ojos*¡¡Satsukiiiii!!

Satsuki- Tranquila, sólo falté a dos clases.

Yo ya conocía el porqué de todas sus acciones y no hacía falta que ella me explicara nada.

Ayame- *Con ojos de corderito asustado*¡No sólo lloro por eso, es porque no me habías dicho que te ibas a ir con Karma!

Satsuki- Ayame, él a mi no-

Ayame- *A moco tendido* ¡Sois tan adorables juntos! ¡Mi niña se ha hecho mayooor!

Puse cara de estar avergonzada por lo que dijo y recé por que nadie la escuchase con el follón que estaba armando.

Satsuki- No hables tan alto Ayame. *Nos sentamos en un banco mientras que ella al fin se relajaba*

Ayame- *Ya relajada* Bueno, ¿entonces te gusta o no?

Satsuki- Yo... ¡Espera no digas nada!

Ya iba ella a alterarse otra vez.

Satsuki- Bueno, ¿para qué mentirte? Si, SI me gusta, ¿y qué?

Ayame- ¡Por fin lo confiesas! Ahora, dime qué ha pasado entre vosotros dos cuando escapasteis. ¿Te ha tocado? ¿Te ha dicho algo bonito? ¡¿Te ha besado?!

Satsuki- Ayame, por favor, poco a poco.

Le expliqué lo de los arbustos, lo de la sala del conserje y lo del abrazo.

Ayame- ¡¿Cómo que de repente te ha abrazado?!

Satsuki- Ayame, si me dejas terminar sería genial.

Ayame- *Con una sonrisa despistada* Jeje...Perdón.

Le terminé de explicar y puso una cara aterrorizada.

Ayame- ¿Te intentaron... matar? Y Karma... ¡Te salvó!

Empezó a alegrase y a emocionarse de nuevo porque eso era "romántico" de su parte.

Satsuki- Por favor Ayame, ¡que me acaban de intentar asesinar! *Me río junto a ella*

El tono en que lo había dicho sonaba claramente a broma, pero sé que lo que pasó tenía que ver con el trabajo de ser una asesina. 

Sonó la campana para regresar al aula. En el camino, un chico que yo conocía, del cual éramos, me dijo que si podía esperarle a la salida. Yo toda ingenua acepté, sin embargo, Ayame ya parecía saber por dónde van los tiros y, con temor a que yo me alejase de Karma, yo estaba segura de que nos iba a espiar.

Terminaron las clases, y vi a Asano acercarse a mí.

Asano- Satsuki-san ¿te apetece hacer algo esta tarde?

Satsuki- Te he dicho un montón de veces que no añadas el -san. Ya tenemos confianza entre nosotros. 

Asano- Perdón, no me acostumbro.

Satsuki- Bueno, ¿a que hora quieres que nos encontremos?

Asano- A las 5:00, en el centro comercial, y si quieres, puedes invitar también a Ayame.

Satsuki- Vale, entonces ya nos veremos.

Asano- ¡Adiós!

Satsuki- *Le abrazo* ¡Chao!

El me correspondió el abrazo y cuando nos separamos me dirigí al lugar que el chico de antes me había comentado, y cuando me vio se puso nervioso, de tal forma que saltaba a la vista que estaba sudado.

Chico*- E-esto... tú...

Se agachó de forma que estiraba sus brazos entregando una carta de amor, se veía así por el sello en forma de corazón rojo que estaba cerrando el sobre. Lo tomé por cortesía.

Satsuki- *Apenada* Yo... lo siento, pero no me atraes... al menos tú no.

Lo último que dije fue tan bajo que siquiera lo escuchó. Al chico se le había vuelto la cara roja, acto seguido se fue gritando un: "¡¡Lo sientooo!!" Miré la carta y me la guardé en la cartera, para luego leerla cuando me aburriese. Ayame estaba detrás de las vallas, escondida escuchando nuestra conversación y cuando vio al chico marchándose me miró orgullosamente con una sonrisa bien llamativa.

Ayame- ¡Estoy feliz por ti! Esa es la prueba que necesitaba para confirmar que solo Karma es al que amas.

Satsuki- No es para tanto... Espera, ¿Le "contrataste" para que me dijera todo eso y así ponerme a prueba?

Ayame- ¡No, no, no, no, no! Bueno... Sí. *Se ríe* Es broma, es broma. ¡Yo no haría eso! Pero aún así me alegro. Jejeje...

Satsuki- Bueno, marchemos.

Yo sospechaba de Ayame, ella tenía la capacidad de hacer eso, aunque es verdad que tampoco le gusta jugar con los sentimientos de nadie, así que le creía. Ella era una especie de ángel endemoniado, todo lo que hacia era bondad con malas intenciones. Es alguien ideal para mí.

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¡Hasta aquí el capítulo de hoy! Si te ha gusta vótame una estrella para animarme a hacer más historias como esta. ¡Chauuuu! <3

~Tendrás que besarme... Tarde o temprano~ Karma y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora