"Feliz Navidad aunque yo no pueda estar ahí para ti "
Esta nota... ¿De quién será? ¿Y cómo habrá entrado quien lo hay hecho sin que yo me diese cuenta?
Me fijé mejor en la nota. Estaba escrito en letras pequeñas "23/12". ¡Fue escrito hoy!
Un escalofrío recorrió mi espalda, y automáticamente me giré por mis reflejos. La luz se había apagado. Con valentía empecé a buscar una linterna, de la que estaba segura de que se encontraría ahí.
Después de mucha búsqueda, logré agarrar una linterna, hasta que recordé que tenía cierto poder y que no necesitaba linterna.
¡Qué tonta soy! Si no me hace falta.
Miré, pero no había nadie, claro, vivo sola. Moví los ojos hacia arriba, ya que podía ver a través de los objetos y vi a alguien escaparse hacia la puerta.
No podía atraparle, aún así decidí correr, y sin darme cuenta, ¡estaba delante de aquella persona!
No sé que ocurrió, sólo sentí una fuerte brisa y en un momento llegué ahí.
Volviendo al tema, no me esperaba que ese sujeto fuera... Iniko.
Satsuki- ¿Qué estás haciendo a estas horas de la noche aquí?
Iniko- Ya lo has visto, preparándote un árbol de Navidad para desearte... felices fiestas.
Satsuki- No quiero... ¡No quiero que un sujeto como tú me diga eso!
Iniko- Por favor Satsuki, ¡escúchame!
Satsuki- ¿Por qué debería? Espera... ¿Tú no estabas muerto?
Iniko- Eh... Les hice creer a tu Maestro y a Carla que sí...
Satsuki- ¡Eso es imposible! No creo que fueran tan tontos... De todas formas, me da igual lo que hagas o digas, ¡no quiero verte!
Iniko- Te lo he pedido por las buenas, pero si no lo quieres así, tendrán que ser por las malas...
Satsuki- ¿Ah, sí? ¿Y qué vas a hacer?
Sin recibir respuesta, me agarró por mis muñecas y me las ató por detrás mía (a saber de dónde habrá sacado las cuerdas). Empecé a dar patadas para que se alejara, pero también me ató los tobillos. Me tumbó en el sofá y él se sentó en el otro, mirándome satisfecho.
Iniko- Por fin puedo hablar sin que me des un golpe.
Satsuki- ¡Que me sueltes!
Iniko- Ah, sí. Se me olvidó un pequeño detalle
Cogió un paño y me lo puso en la boca para que no hablara.
Iniko- Ahora sí que sí. Vale, empezaré a hablar, más te vale escucharme. Yo era amigo de tu difunto padre, el cual, al saber que tu madre estaba embarazada, escapó. Ni siquiera estaban casados. Tu madre decidió tenerte por algún motivo y se arrepintió luego de que cumplieras recientemente los dos años de edad. Yo... es vergonzoso decirlo, pero me había enamorado de ella. Empezamos a salir y en secreto te estaba manteniendo, porque me dio pena que un pobre criatura que no había hecho nada, se muriera por el error de otra persona. Tu madre empezó a ser una pareja un poco tóxica, hasta que no aguanté más sus gritos y corté con ella. Esto ocurrió cuando tú tenías siete años.
Me quité el paño de la boca como podía y lo tiré al suelo.
Satsuki- Que asco... Mira que ponerme un paño sucio en la boca...
Iniko- Fue entonces cuando tú y tu papá estuvieron en el lugar y momento equivocados. Tu madre estaba enloquecida por haber perdido el trabajo y justo había salido a dar un pequeño paseo nocturno, yo te estaba acompañando, como recordarás, vimos la escena, de tu madre apuñalando una y otra vez a tu padre, con rencor y mucho odio en su interior, al fondo de un callejón sin salida, donde nadie pudiera ver la escena criminal. Desafortunadamente, habíamos escuchado unos gritos pasando cerca de ahí, eso es lo que nos llevó a ver lo ocurrido. Cuando terminó de clavar el cuchillo en el pecho de tu padre, ella empezó a sonreír como psicópata. Tu estabas aterrada, mirando la escena de enfrente del puticlub. Te agarré de la mano y te llevé lejos de ahí. Entonces tu madre se había percatado de que estábamos ahí, observando.
Satsuki- ¿Tenías que recordádmelo?
Iniko- Lo siento, ahora viene el porqué te abandoné y te traté así. Tú no lo habrás escuchado, pero cuando caminamos para ir a casa a olvidar esa escena, tu madre estaba gritándote "¡te mataré, haré que te maten y a ti también, Iniko!" Dijo eso, cuando en realidad yo trabajaba como asesino.
Satsuki- Eso tú nunca me lo habías dicho.
Iniko- Es que eras muy pequeña, y seguramente tus pensamientos hacia mí se volverían desagradables, cosa que no quería.
Satsuki- Pero al final lo has logrado.
Iniko- ...Bueno, tu madre encargó a asesinos, para como dijo, matarte. Esos se encontraron en mi camino, dejándome dos opciones, abandonarte o dejar que te quitaran la vida. Me dieron esas opciones porque para ellos no tenía sentido matar a una pobre niña inocente. Yo opté por la primera opción y con el tiempo te iba tratando peor para que no te encariñaras conmigo. Me dolía, pero no tuve opción de protegerte.
Satsuki- Ya veo... Si te hubieras cargado a los asesinos esa señora asquerosa hubiera contratado más hasta cumplir con sus caprichos...
Iniko- Exacto...
Satsuki- Puedo entender que sólo querías... protegerme. Gracias Iniko.
Iniko- Espera, que te desato.
Se levantó y me liberó de las cuerdas que estaban apretándome para que no me moviera. Empecé a mover mi muñeca un poco dolida por el tiempo que estuve atada y me acomodé, por alguna razón, al lado de él.
Los dos estábamos en un silencio algo incómodo. Después de pensármelo dos veces, me levanté y le di un abrazo con una mirada melancólica, dirigida al suelo.
Satsuki- Gracias... Iniko...
Me tembló la voz un momento. No pude más y estallé en miles de lágrimas recorriendo por todo mi rostro. Todo lo que hizo era para protegerme de esa loca, además de tener que correr riesgos por si ella mandara otro asesino a encargarse de él.
Iniko correspondió mi abrazó y lloré en su hombro hasta quedarme profundamente dormida.
CONTINUARÁ...
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~Tendrás que besarme... Tarde o temprano~ Karma y tu
FanfictionEs mi primera historia, por favor, apoyadme UwU. Por favor, dale una oportunidad a este fanfic, cuanto más avances más te interesará la historia, te lo prometo :D