~Tendrás que besarme... Tarde o temprano~ Karma y tu

Iniko y yo

Desperté por un rayo de luz que provenía de la ventana. Me encontraba tumbada en mi habitación, parece que Iniko me había traído hasta aquí al quedarme dormida.

A todo esto... ¿Dónde está? Me fui al baño a asearme. Bajé, y un olor a tostada inundó mis fosas nasales. Fui hacia donde provenía el olor y me encontré a Iniko, con dos platos con tostada y tomate.

Mis ojos se iluminaron antes tal situación. Miré a Iniko y me regaló una sonrisa, que decía que todo iba a volver a ser como antes.

Me senté en la mesa que había en la cocina para empezar a desayunar y de mientra estuvimos conversando como si ya estuviéramos bien del todo.

Al terminar caí en cuenta de dos cosas. La primera es:

·Tengo que preparar hoy mismo el cumpleaños de Karma.

Y la segunda:

·Iniko está siendo perseguido por una organización de asesinos profesionales, si ellos se llegan a dar cuanta de que el cuerpo está desayunando conmigo, me tomarán también como una traidora. 

La cuestión es... ¿Qué es lo que hará Iniko de ahora en adelante?

Me decidí preguntarle sobre ese tema, a lo que respondió:

Iniko- Hablando de eso... ¿qué te parece si me quedo a vivir otra vez contigo? Empezando desde cero. Olvidemos lo que ocurrió

Me quedé muda. Simplemente no podía aceptar eso tan de repente. Supongo que todavía guardo rencor hacia él de cierta manera. No puedo olvidar tan rápido.

Satsuki- No... puedo. No puedo aceptar eso. No soy capaz de aceptar todo esto tan rápido.

Iniko- ... Puedo entenderlo de cierta manera, pero Satsuki, por favor, dame otra oportunidad.

Satsuki- ¿Me dejas tiempo para pensarlo?

Iniko- Está bien, todavía tengo esperanzas...

Satsuki- Gracias.

En eso, me levanté para llamar a Ayame y a Nagisa para decirles de quedar esta tarde. 

El teléfono de Nagisa lo conseguí por medio de Karma, que este, un poco celoso, se ofreció.

Iniko tenía que salir a por unas cosas esa misma tarde, así que para mí era mejor. 

Al fin llegaron las visitas, les guié hacia el salón, y antes de comenzar a poner el árbol que anteriormente olvidé colocar, merendamos unas galletas de arroz acompañado de bebidas.

Nagisa- ¿Puedo preguntarte una cosa, Satsuki-san?

Satsuki- Dime.

Nagisa- ¿Hace cuánto que estás con Karma?

Satsuki- Déjame pensar... Empecé a salir con él a principios de curo, así qué... Unos seis meses.

Nagisa- ¡Wow, es demasiado!

Satsuki- Ya, también estoy sorprendida un poco.

Terminando todos los preparativos, tanto regalos como comida, tomamos un descanso. Era de noche, fue entonces cuando escuché el timbre. Abrí y era Iniko.

¡Mierda, se me olvidó de que él volvía a vivir aquí! Ah, no... eso todavía lo tenía que decidir, pero creo que ya lo tengo claro.

Iniko- ¡Hola Satsuki! ¡Ya volví!