Extra cinco:
—¡Iris relájate!— Expresó Stefany, cruzó sus brazos y dirigió su mirada a la rubia sentada en el sofá —No tienes que hacerlo si no quieres— Agregó
Un día solo de chicas, un día sin estar tolerando ni controlando las molestias que suele traer la mayoria de la población masculina, no estaba para nada mal en el inicio de un período de descanso.
El primer día en la playa, comenzó con una interesante y atemorizante charla. Iris quería tomar la mejor decisión en cierto asunto, Fanny y Sadie querían ayudar. Ambas se metieron en el plan de: "Las chicas de los consejos intensos"
—Es cierto— Afirmó Sadie —Se nota en tu mirada que no quieres hacerlo
—¿Por qué hablan con tanta seguridad?— Replicó la rubia, aún sentada en el sillón apoyó su cabeza en sus manos cómo resultado de desesperación —No entiendo como pueden hablar así
—Tal vez por que conozco a Jaeden y aunque no lo creas conozco a Iris. Los dos son igual de perfectos, son tan pasivos pero a la vez tan tontos...— Comentó sin la intención de ofender.
—Demasiado, diría yo— Le siguió la pelirroja. Esa clase de palabras ya eran de costumbre
—Jaeden es como nuestro bebé, él no es malicioso, sé que no te obligará a hacer cosas en las cuáles tú no estés de acuerdo y si alguna vez lo intenta, no lo permitas, solo tú podrás decidir— Iris sonrió melancólica, ante las últimas palabras de la del cabello morado, su mente se había despejado un poco.
—Date cuenta que esta no eres tú, no se por que o por quién te estas dejando llevar, parece que estas siguiendo los pasos de lilia— Aseguró Sadie
—NO, yo no quiero ser como Lilia— De pronto se volvió asustadiza. El ejemplo de Lilia era el que menos queria seguir —¿Qué debo hacer?
—... Comienza por descubrirte a tí misma ¡Nosotras te ayudaremos!
Nosotras te ayudaremos... Igual a: Las tres palabras que la sociedad más teme... Obviamente con "descubrir" se referían a: "Conocer" "Saber ¿Qué quieres?" "Experimentar" "buscar lo que quieres" "Disfrutar la vida sin límites y que el mundo siga rodando".
[...]
Por la tarde, en realidad no importaba el momento, todos se encontraban distribuidos el la tierra como el viento, debajo del sol oscureciendo. Stefany se entretenía tratando de triturar el hielo de su raspado
—¡Te encontré!— Exclamó la voz que tanto había extrañado —Prácticamente estuve buscándote todo el día
—¡Wow!... Pues eso quiere decir que eres un pésimo buscador— Bromeó sonriente, dejó a un lado el raspado de frutas y se acercó a su chico
—¿En dónde estuviste?— Finn la abrazó por la cadera y besó sus mejillas
—Con Iris y Sadie, todo el día estuve con ellas— respondió
Stefany escondió su rostro en el pecho de Finn. Percibió sus latidos e inhaló su aroma en particular. Él siempre olía delicioso, su perfume de alguna manera le parecía acogedor.
—Supuse que tú estarías con esa chica que come mucho— Añadió otra vez, antes de que Finn pudiera hablar, en ese enunciado había un ligero reclamo.
—¡JAJA! Su nombre es Débora, no tiene nada que ver en si come mucho o no... Espera... ¿Estás celosa?— Sonrió pícaro
—¡JAJA! ¡Por favor bájale a tu egocentrismo!— Negó victoriosamente pero eso no quería decir que estuviera diciendo la verdad —¿Por qué estaría celosa? Estoy tan acostumbrada a que seas demasiado caritativo con las chicas
Su falta de honestidad se descubrió por sí misma... Sí estaba celosa.
—¿A sí?... Pues déjame decirte señorita toxica que te guste o no serás la única para mí.
Terminaron atacándose los labios, eso les traía una sensación extraña, una exquisita corriente eléctrica que les encantaba y que además los hacía mantenerse unidos.
Lyattinn