treinta y dos.

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Por Ella:

Niall y yo nos encontrábamos en la cocina, él preparando el desayuno y yo sentada esperando a que terminara, —pude haberte ayudado –dije por tercera vez y lo escuche reír.

—No voy a quemar la cocina Ángel –susurró y mis ojos se abrieron al igual que los suyos, sus mejillas se enrojecieron haciéndome sonreír, —Ella –corrigió, —no voy a quemar la cocina –se apresuró a girarsé.

—¿De done ha salido eso? –pregunté y lo sentí tensarse, me ignoró y colocó el pan sobre el comal, —Niall.... –sentencié y suspiró.

—¿El que? –se hizo el desentendido.

—El ángel –dije y sus mejillas se tornaron rojas de nuevo, —¿Por qué me has llamado así? –pregunté.

—Yo.... –se detuvo y dejó salir el aire encogiéndose de hombros, —él día que te conocí –susurró, —llevabas un vestido blanco –declaró y fruncí mi ceño.

—No, estaba usando jeans -corregí y negó.

—No –interrumpió, —nosotros no nos conocimos en casa de Josh Ella, nosotros nos conocimos en una fiesta en Irlanda –dijo y mis ojos se abrieron, ¡era él!, —hace un año, tu llevabas un vestido blanco que te hacia lucir como un verdadero Ángel –continuó y una sonrisa de lado se dibujó en sus labios, —no quisiste darme tu nombre así que yo te bauticé de esa manera –terminó y se giró a voltear el pan en la estufa, mordí mis labios y antes de poder hablar de nuevo mi celular sonó.

—Es jess –informé y coloqué el altavoz.

—Hola –dije animada

—heeeeeeeeeey –alargó la voz, —suenas muy feliz Ella, ¿Niall ya te dio su amor? –preguntó y mis ojos se abrieron, Niall mordió su labio reteniendo una carcajada mientras mis mejillas ardían de vergüenza.

—Pero que graciosa –dije obligándome a sonar calmada.

—¡Que amargada! –se quejó en respuesta, —como sea, estamos invitadas a una fiesta así que trae ese bonito trasero a casa a las siete –sentenció y fruncí mi ceño.

—No voy a ir a...

—¿Puedo ir? –preguntó Niall y lo miré mal.

—Por supuesto hombre, alguien tiene que cuidarle el trasero a Ella –se burló Jess y rodé los ojos.

—¡Yo no quiero ir! –me quejé.

—Será algo pequeño Ella, te vas a divertir, te lo prometo –aseguró Jess.

—No tengo nada que usar –susurré.

—Claro que si –dijo Niall, —Nos vemos a las siete entonces –y la llamada terminó.

—De verdad no tengo nada que usar Niall -dije y negó.

—Yo compre algo para ti hace unas semanas –dijo y fruncí mi ceño, —te lo daré después de que comamos –aseguró y suspiré rendida, el desayuno/comida pasó entre risas, Niall contándome sus experiencias huyendo de fans a lo largo de su carrera y como solía necesitar disfrazarse para ir a la tienda.

—Suena más divertido de lo que creí –dije riendo y asintió, su mirada se encontró con la mía y mordí mi labio sintiéndome nerviosa de pronto.

—¿Qué pasa? –pregunté y negó.

—Es solo que... me gusta verte sonreír –dijo y sonreí sin poder evitarlo, sonrió y miró su reloj de mano, —son las 3 –dijo y dejé salir el aire.

—Tenemos 4 horas antes de irnos –declaré y asintió, —¿Qué quieres hacer? –pregunté y se encogió de hombros.

—¿Qué quieres hacer tú?

—¡Película! –dije emocionada y asintió feliz.

3 horas más tarde, los créditos de la película aparecieron, —jamás me cansaré de ver esta película –aseguré.

—¿Por qué Evans sale medio desnudo? –preguntó alzando una ceja y reí.

—Tal vez influya –admití y sonrió, —pero la película es buena en realidad, me encantan las películas de Marvel –confesé y sonrió, —ahora es hora de que comencemos a arreglarnos –dije y sonrió asintiendo.

—La bolsa está al lado de la puerta de tu habitación –dijo y fruncí mi ceño, entonces recordé que era lo que me había comprado, —Yo iré al departamento para vestirme y paso por ti ¿de acuerdo?.

—¿Departamento? –pregunté y asintió.

—Compré un departamento a unas cuadras de aquí –señaló y sonreí.

—¿De verdad? –asintió, —pues felicidades por eso –dije sonriendo.

—Gracias, tal vez pueda mostrártelo en otra ocasión –dijo y asentí, se acercó a besar mi mejilla y suspiré, —nos vemos más tarde entonces –y dicho esto salió. Subí a mi habitación a prisa y sonreí encontrando la bolsa donde él dijo, la tomé y caminé hasta la cama, mis ojos se abrieron al ver el vestido que me probé el día que fui de compras con Jess, lo saqué de la bolsa y lo puse sobre la cama, caminé por los tacones negros que mamá me había regalado la última navidad, tomé mis bragas y una licra, los cubre pechos adheribles y los dejé sobre la cama, suspiré y encendí la música para después caminar hacia el baño, después de bañarme depilé mis piernas, y me sequé a prisa, unté crema por todo mi cuerpo y salí hacia mi habitación, coloqué mi copa interior y los cubre pechos para después colocarme el vestido, caminé hacia el espejo cerciorándome de que no se viera nada más de lo necesario, caminé hacia la cama y me coloqué los tacones, "te vez ridícula" las palabras de Josh vinieron a mi mente y mordí mi labio sintiendo la necesidad de cambiarme, negué obligándome a ignorarlas y caminé hasta el tocador, sequé mi cabello con la secadora y lo agarré con pasadores a mi lado dejando mi espalda desnuda, coloqué una capa de maquillaje, mascara para pestañas, delineé mis ojos y coloque labial rojo sobre mis labios, suspiré complacida y salté escuchando el sonido de la puerta, "salchichas mal empaquetadas" las palabras brotaron en mi subconsciente y maldije.

—No –gruñí y desvié mi mirada del espejo, —no me vas a seguir afectando Josh –aseguré y suspiré, —ya tuve suficiente –tomé una respiración profunda y me apresuré a bajar, cuando abrí la puerta la mirada de Niall se encontró con la mía y después bajó por mi cuerpo haciéndome sentir nerviosa, una sonrisa se dibujó en sus labios para después murmurar un.

—Carajo Ella... estas guapísima –haciendo que mi niña interior comenzara a bailar al haber obtenido una A+ en su prueba, la primera A+ en años.

—Gracias –dije y sonreí con tranquilidad, sintiéndome contenta, sintiéndome feliz, sintiéndome hermosa, así me hacía sentir él, hermosa.

Déjame conquistarte♥.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora